Ensayo De Informatica

Muchos en el camino me han repetido lo mismo: “El escogió ese estilo de vida, el decidió esa forma de vivir”. Yo no sé... nunca lo he creído, al menos no de Víctor. Por mucho que suene a cliché siempre me encerré: ‘el negocio... esa forma de vivir, si, fue quien lo que escogió a el”.

Siempre vivió consiente de si mismo, un niño normal, normal porque le interesaba las cosas que los chicos hacen a esa edad. Jugar, aprender, reír, escaparse de la casa, llorar en tintes de enojo eran entre otras, cosas con las que creció. Poco sabía... de lo mucho que sabría después. ¿Su mejor amigo? Claro, siempre tuvo uno... tal vez el mejor, tal vez no, pero su amigo de infancia y desde luego, el de más confianza: Mario Cosenza. Iban creciendo físicamente como cualquier muchacho pero su desarrollo crecía en terminología más profunda y más vil. Claro está, nacer entre bares, salas de apuestas, prostíbulos, crímenes, drogas, negocios y coches llenos de TNT no era ni mucho menos el mejor escenario para un par de jóvenes. “Todo empieza con un trabajo” así me dijo alguien una vez. Y si, lo viví y lo he visto, te gusta, luego recibes tu parte de la pasta y te das cuentas que es más rentable vivir así que esperar un trabajo casual de carpintero. Es decir, honrado, si, pero para ellos indigno.

La mafia moldea, tarde o temprano moldea; elegancia y sinuosidad, fríos, abruptos, turbios y gradualmente insensibles, eso enseña. Con extremos inhóspitos, donde la venganza permanece como un instinto secundario con tal de proteger y cobijar todo aquello que es propio, que nos acompaña y nos arropa. El origen del crimen organizado se escribe -en un inicio- con tres famiglias, si, tres famiglias y con ‘famiglias’ me refiero como definición historica a un sistema esencialmente exportado de Italia, que incluye organigrama, reglas y desde la perspectiva más peculiar, principios. Pancho Corleone le da nacimiento o lo que casi parece un Imperio, exactamente eso, el imperio Corleone, por sus ideales de expansionismo y su cogida de territorios en una zona casi virgen delictivamente hablando. Sandro, Un muchacho con quien nadie veía futuro, adoctrinado, ex-militar, serio, formal,seco y taciturno, casi nacido para esto crea a la famiglia Genovese. Y por último, al que el tiempo llamó “El Cuervo”.

Al que inexplicablemente se le atribuye poco pero se le debe tanto. Al que se le desconoce el porqué de su apodo, no miento, no sabría definirlo. Las leyendas sobran... muchas de ellas relacionadas a la ave carroñera: “Es territorial, El don de Bonanno lo era, lo defendía cuando veía la mas mínima mirada amenazante”, “Viene por su desconfianza con todos”, “No lo conocí pero su actuar era casi como su pensamiento, negro, insensible”, “Inteligente, eso era, tenía una capacidad de solución... que salía de la nada, progresivo en sus conocimientos mediante la práctica y la interacción a hilo con la mafia”. Y así, la fama, o el remanente de ella siguen dando de que hablar. Sin embargo las exigencias de la época en el crimen organizado eran cada vez mayores y complejas. Casi una lucha estratégica entre las tres por tomar para sí los poderes de la ciudad pero sin tocarse.

Pero como todos saben, el tiempo desgasta, el tiempo consume, el tiempo no perdona a nadie, el tiempo no busca de socios, y el tiempo fue dejando a “El Cuervo” aunque por un lado, en un cuadro de genialidad, lujo y carácter en el mundillo pero en otro, de corta duración. Dio final a una etapa, terminó su faena mediática, no heredó en muchos su potencial grupo criminal y así, sin detalles desapareció. Bajo el periodo de ausencia de Bonanno y otras famiglias importantes, la ciudad se llenó de algo que... casi no se necesitaba ser profeta para preverlo: Un desproporcionado

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