VALIDACION DE METODOS ANALITICOS TERMINADO

INTRODUCCION

La cromatografía liquida de alta eficiencia o resolución (HPLC) es una técnica que permite un análisis eficaz y seguro de matrices constituidas por gran variedad de compuestos de primordial interés en distintos campos científicos e industriales. En ella los componentes de una mezcla son llevados a través de una fase estacionaria fijada dentro de una columna mediante el flujo de una fase móvil líquida. Las separaciones están basadas en las diferencias de la velocidad de migración entre los componentes de la muestra, que vienen condicionadas por la naturaleza de los analitos y su interacción con las fases. El análisis cuantitativo por cromatografía líquida se basa en la comparación de la altura o área del analito con el de uno o más estándares, según sea el caso.

Básicamente el HPLC es un sistema compuesto de un reservorio de fase móvil, bomba, inyector, columna de separación y detector. La muestra se introduce en pequeños volúmenes a la corriente de la fase móvil y allí se retarda por interacciones químicas con la fase estacionaria (tiempo de retención). Los solventes más comunes usados en la fase móvil son combinaciones de agua purificada con líquidos orgánicos como metanol o acetonitrilo principalmente, también suelen usarse sales y buffers para contribuir a la separación de componentes. Estas combinaciones introducen el concepto de gradiente de elución, variación de la composición de la fase móvil, para adaptarse a los diferentes analitos y conseguir mejores resultados. Cada analito tiene un gradiente de elución óptimo para obtener la máxima separación de picos en el detector. El correcto uso del HPLC incluye pasos previos como son: el desgasificar y filtrar adecuadamente la fase móvil; seleccionar, instalar y acondicionar la columna analítica; evaluar el performance cromatográfico o aptitud del sistema, parámetros fundamentales para mejorar las separaciones cromatográficas.

MARCO TEORICO

La calidad tiene y tendrá una consideración creciente en ámbitos sociales, científicos y tecnológicos. En el último tramo del siglo XX puede afirmarse que es una preocupación constante para dirigentes, usuarios y público en general. Para mejorar y contrastar la calidad en un inmediato futuro, serán notables los esfuerzos y tendrá lugar la creación o transformación de organizaciones, el adiestramiento de personal y la dedicación de considerables medios económicos. No cabe duda que la calidad del medio ambiente, de los productos alimenticios, farmacéuticos, industriales, de los servicios públicos y privados, es ya más una exigencia que un deseo.

Los laboratorios químico-analíticos no pueden sustraerse de la calidad, sino que esta característica debe ser primordial, si se desea que los resultados generados sean reconocidos, aceptados y que sean la base sólida para la toma correcta de decisiones.

La veracidad, rapidez, bajo precio, entre otros, son una serie de características de los resultados generados en los laboratorios analíticos, que sin duda tienen una amplia repercusión social y económica. Tal como se puede observar en la figura:

Los resultados generados por el laboratorio analítico son parte de la información, que se considera hoy un aspecto clave:

Como “cuarto poder” de la sociedad, además de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.

Como cuarto pilar básico de la economía moderna, además del capital, trabajo y materias primas.

CALIDAD

La Calidad considerada genéricamente es un concepto abstracto que tiene muchas implicaciones, por lo que presenta un sinfín de definiciones que hacen énfasis en distintos aspectos.

La primera aproximación es de tipo relativista-comparativa. La Real Academia de la Lengua define la Calidad (del latín “qualitas”) como “Propiedad o conjunto de propiedades inherentes a una cosa, que permiten apreciarla como igual, mejor o peor que las restantes de su especie”. Así un producto alimenticio A es de más calidad que otro B porque tiene menos aditivos o contaminantes. Un resultado analítico A será mejor que otro B (procedentes ambos de aplicar procesos analíticos diferentes al mismo analito en la misma muestra) si el primero se acerca más al verdadero valor y presenta menor dispersión (mayor precisión).

Otro grupo de definiciones de calidad se refieren a la totalidad de las características de unaentidad que la capacitan para satisfacer necesidades especificadas oimplícitas por el cliente o la legislación. La calidad se materializa en los denominados sistemas de calidad que pueden definirse como un conjunto de actividades planeadas y desarrolladas en un ente u organismo para satisfacer los requisitos del cliente o usuario.

Las propiedades analíticas pueden considerarse divididas en tres grupos según su importancia relativa. Las denominadas fundamentales como exactitud y representatividad; las básicas como precisión, sensibilidad y selectividad, y las complementarias como rapidez, costo, grado de participación humana (automatización), robustez-transferibilidad, seguridad del personal, y otras.

La calidad del los resultados está definida por dos propiedades básicas: la exactitud que es el grado de concordancia entre el resultado obtenido experimental y el verdadero valor o valor garantizado al máximo; y la representatividad que puede definirse como el grado de concordancia entre la muestra tomada y la definición del problema analítico a resolver.

La exactitud debe ir acompañada de un nivel adecuado de precisión, que es el grado de concordancia entre un resultado y un conjunto de ellos, obtenidos aplicando el mismo procedimiento analítico a la misma muestra en condiciones idénticas o muy distintas. No obstante puede darse la paradoja que un proceso analítico sea exacto y no preciso. Por otra parte no podrá alcanzarse el verdadero valor sino se garantiza la ausencia de todo tipo de interferencias y sin que se alcance el nivel de sensibilidad adecuado a la concentración de los analitos.

La representatividad se basa en un muestreo adecuado fundamentado en una buena definición de los objetivos, la existencia de un plan de muestreo y un control estadístico.

En resumen, la exactitud y la representatividad respecto al problema analítico son las propiedades analíticas definitorias de la calidad de los resultados y en definitiva de la calidad

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