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ACCIDENTES DE TRANSITO


Enviado por   •  26 de Noviembre de 2012  •  2.481 Palabras (10 Páginas)  •  630 Visitas

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ACCIDENTES DE TRANSITO

ATROPELLAMIENTO AUTOMOVILISTICO.

El atropellamiento puede definirse como un tipo especial de violencia que se origina en el encuentro entre un cuerpo humano y un vehículo o animal en movimiento (Royo-Villanova).

 Los vehículos atropelladores pueden distinguirse en dos tipos: Vehículos con ruedas no provistas de neumáticos. Estos son de tracción animal: se caracterizan por desarrollar poca velocidad y por observar una relación inversa entre peso y velocidad. J De trayecto obligado: son los ferrocarriles y los tranvías, con ruedas metálicas y deslizamiento sobre rieles. Tienen gran peso y desarrollan alta velocidad.

Vehículos de ruedas neumáticas son los siguientes: a) Bicicletas: tienen poca estabilidad, poco peso 5, desarrollan escasa velocidad. b) Motocicletas: son de moderado peso, pero de gran velocidad. c) Automóviles: se caracterizan por su elevado peso y la gran velocidad que desarrollan, y por tener neumáticos en sus ruedas. d) Auto vehículos de gran mole: son los camiones y tráileres, con enorme peso, gran velocidad y neumáticos en sus ruedas

FASES DEL ATROPELLAMIENTO

En el atropellamiento pueden observarse cuatro fases. Todas ellas están presentes en el atropello completo, y falta alguna en el incompleto. En el orden en que se suceden en el atropellamiento completo, estas fases son: a) de choque; b) de caída; c) de arrastre, y d)de aplastamiento.

FASE DE CHOQUE

Es el encuentro entre la víctima y el vehículo. La localización de las lesiones depende de la altura de la parte del vehículo que entra en contacto con la víctima. La extensión varía de acuerdo con la velocidad y la estructura del frente del vehículo. Esta fase se divide en: a) subfase de impacto primario, y b) subfase de impacto secundario.

a. Subfase de impacto primario. Corresponde al golpe que el vehículo asesta al peatón. La víctima puede ser lanzada hacia adelante (movimiento de traslación) y también rotor alrededor de su centro de gravedad (movimiento de rotación).Cuando el impacto tiene lugar por debajo del centro de gravedad del peatón, sufrirá tanto movimiento de traslación como de rotación, y la cabeza se moverá en dirección al vehículo. Cuando el impacto ocurre a nivel del centro de gravedad, el peatón sólo experimenta el movimiento de traslación. Si el contacto se produce por encima del citado centro, se trasmitirán igualmente los movimientos de traslación y de rotación, y la cabeza de la víctima tenderá a alejarse del vehículo. La lesión característica del impacto primario consiste en una contusión producida por el parachoques del vehículo. Lo común es que sea una fractura transversa u oblicua -cerrada o expuesta- de la tibia debido a angulación o por rotación de la pierna, o ambos mecanismos a la vez. Se le conoce como fractura por parachoques (bumper fracture). Por lo regular, las fracturas en la diáfisis de tibia y fíbula son simples, y las causadas por impacto en la epífisis superior o partes proximales de la diáfisis suelen ser con minutas. Una modalidad de fractura muy útil para reconstruir el mecanismo del impacto, es la fractura triangular de la tibia. Tiene forma de triángulo, cuya base corresponde al sitio de impacto y el vértice a la dirección que llevaba el vehículo atropellador. Si la fractura es expuesta, la herida contusa estará en el lado opuesto al sitio del impacto.

En estudios de Patrick y cols. se ha demostrado que en adultos jóvenes y sanos se producen fracturas simples a velocidades de 25 Km./h, y fracturas múltiples a 40 Km./h. Es de suponer que en individuos seniles con fragilidad ósea, esas fracturas pueden ocurrirá velocidades menores. De una manera general, en el atropellamiento más frecuente, que es el causado por automóvil, la lesión de impacto primario se encuentra en la mitad inferior del cuerpo y, por lo común, en las piernas. El perito médico debe medir la distancia entre el talón y la lesión en cada pierna. En aquella que estaba apoyada en el suelo en el momento del impacto, la lesión estará a mayor altura que en la otra, que se hallaba levantada cuando el peatón fue atropellado. La altura promedio de un parachoques es de 50 cm en automóviles americanos y de 40cm en automóviles europeos y japoneses. A menudo, al aplicarse bruscamente los frenos el vehículo tiende a descender.

Debe tenerse presente que en ocasiones la lesión de impacto primario es solamente un hematoma o una herida contusa. b. Subfase de impacto secundario Se produce cuando la velocidad del vehículo atropellador es superior a los 20 Km./h. Aquí, de cierto modo, puede decirse que la víctima golpea al vehículo. El movimiento de un adulto atropellado por un automóvil común suele ser del tipo traslación y rotación, con inclinación de la cabeza hacia el vehículo. En cambio, si la velocidad es inferior a 19 Km./h, el peatón cae al suelo después del impacto primario. Las lesiones de impacto secundario se deben al impacto sobre la cubierta del motor, el marco del parabrisas, los guardafangos y los focos delanteros. Se localizan en el muslo, la pelvis, la espalda y la cabeza; por lo común, consisten en las llamadas lesiones patrón, es decir, lesiones que reproducen el agente que las causa. Así, puede tratarse de una equimosis que reproduce la forma de un emblema o de una bisagra del vehículo o de una herida contusa por el reborde de un espejo retrovisor.

Las lesiones en la cabeza dependen del área del contacto. Dos tercios de los impactos de la cabeza sobre la cubierta del motor no causan lesión alguna o sólo la producen de carácter leve. Por el contrario, dos tercios de los golpes contra el marco del para brisas originan lesiones graves o mortales. El impacto sobre el radiador o el guardafangos puede ocasionar extensas fracturas de la pelvis. Por lo general se localizan en la rama del pubis opuesta a la nalga o cadera golpeada. El íleon, particularmente la articulación sacroiliaca en el mismo lado del impacto, raramente se salva de ser lesionada. La forma de la fractura de la pelvis recuerda el estallido de un anillo de madera, cuando se comprimen lados opuestos. El impacto sobre los focos delanteros puede causar una lesión en la nalga o en la cara lateral del muslo, que los franceses llaman décolement o despegamiento. Sus signos externos son mínimos (escoriación o equimosis). A la palpación, se percibe fluctuación subcutánea. Una incisión demostrará una bolsa de sangre entre la piel y la aponeurosis. A veces, esa bolsa se abre y aloja fragmentos de vidrio y escamas de pintura de gran valor identificador. También puede ser el origen de embolismo graso.

2. FASE DE CAÍDA.

Después del

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