ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Capacidad Argumentativa


Enviado por   •  2 de Agosto de 2011  •  2.837 Palabras (12 Páginas)  •  1.519 Visitas

Página 1 de 12

Capacidad Argumentativa

Para la sección de capacidad argumentativa, se incluirán preguntas como por ejemplo:

En cada grupo de palabras, seleccione la palabra que NO pertenece a ese grupo.

• mesa

• silla

• sofá

• cocina

Las frases siguientes están incompletas. Encuentre la pareja de palabras que deben ir en los espacios en blanco para que la frase tenga sentido lógico

Las personas caminan, ____________ tienen vehículos.

1. sin embargo

2. porque

3. en conclusión

4. aunque

Lectura Comprensiva

LEA CUIDADOSAMENTE ESTE TEXTO.

Comenzaré por contar en brevísimas palabras un hecho notable de la vida rural ocurrido en una aldea de los alrededores de Florencia hace más de cuatrocientos años. Me permito solicitar toda su atención para este importante acontecimiento histórico porque, al contrario de lo habitual, la moraleja que se puede extraer del episodio no tendrá que esperar al final del relato; no tardará nada en saltar a la vista. Estaban los habitantes en sus casas o trabajando los cultivos, entregado cada uno a sus quehaceres y cuidados, cuando de súbito se oyó sonar la campana de la Iglesia. En aquellos píos tiempos (hablamos de algo sucedido en el siglo XVI), las campanas tocaban varias veces a lo largo del día, y por ese lado no debería haber motivo de extrañeza, pero aquella campana tocaba melancólicamente a muerto, y eso si era sorprendente, puesto que no constaba que alguien de la aldea se encontrase en trance de fenecer.

Salieron por lo tanto las mujeres a la calle, se juntaron los niños, dejaron los hombres sus trabajos y menesteres, y en poco tiempo estaban todos congregados en el atrio de la iglesia, a la espera de que les dijesen por quien deberían llorar. La campana siguió sonado unos minutos más, y finalmente calló. Instantes después se abría la puerta y un campesino aparecía en el umbral. Pero, no siendo éste el hombre encargado de tocar habitualmente la campana, se comprende que los vecinos le preguntasen dónde se encontraba el campanero y quien era el muerto. “ El campanero no está aquí, soy yo quien ha hecho sonar la campana”, fue la respuesta del campesino. “Pero, entonces, ¿no ha muerto nadie?, replicaron los vecinos, y el campanero respondió: Nadie que tuviese nombre y figura de persona; he tocado a muerto por la Justicia, porque la Justicia está muerta”.

¿Qué había sucedido? Sucedió que el rico señor del lugar ( algún conde o marqués sin escrúpulos) andaba desde hacía tiempo cambiando de sitio los mojones de las lindes de sus tierras, metiéndolos en la pequeña parcela del campesino, que con cada avance se reducía más. El perjudicado empezó por protestar y reclamar, después imploró compasión y finalmente resolvió quejarse a las autoridades y acogerse a la protección de la justicia. Todo sin resultado; la expoliación continuó. Entonces, desesperado, decidió anunciar urbi et orbi (una aldea tiene el tamaño exacto del mundo para quien siempre ha vivido en ella) la muerte de la Justicia. Tal vez pensase que su gesto de exaltada indignación lograría conmover y hacer sonar todas las campanas del universo, sin diferencia de razas, credos y costumbres, que todas ellas sin excepción, le acompañarían en el toque a difuntos por la muerte de la Justicia, y no callarían hasta que fuese resucitada. Un clamor tal que volara de casa en casa, de ciudad en ciudad, saltando por encima de las fronteras, lanzando puentes sonoros sobre los ríos y mares, por fuerza tendría que despertar al mundo adormecido…. No sé lo que sucedió después, no sé si el brazo popular acudió a ayudar al campesino a volver a poner sus lindes en su sitio. O si los vecinos una vez declarada difunta la Justicia, volvieron resignados, cabizbajos y con el alma rendida, a la triste vida de todos los días. Es bien cierto que la historia nunca nos lo cuenta todo… Supongo que ésta ha sido la única vez, en cualquier parte del mundo, en que una campana, una inerte campana de bronce, después de tanto tocar por la muerte de seres humanos, lloró la muerte de la Justicia. Nunca más ha vuelto a oírse aquel fúnebre sonido de la aldea de Florencia mas la Justicia siguió y sigue muriendo todos los días. Ahora mismo, en este instante en que les hablo, lejos o aquí al lado, a la puerta de nuestra casa alguien la está matando. Cada vez que muere, al final es como si nunca hubiese existido para aquellos que habían confiado en ella, para aquellos que esperaban de ella lo que todos tenemos derecho a esperar de la Justicia: justicia, simplemente justicia. No la que se envuelve en túnicas de teatro y nos confunde con flores de vana retórica judicial, no la que permitió que le vendasen los ojos y le maleasen las pesas de la balanza, no la de la espada que siempre corta más hacia un lado que hacia otro, sino una justicia pedestre, una justicia compañera cotidiana de los hombres, una para la cual lo justo sería el sinónimo más exacto y riguroso de lo ético. Una justicia que llegase a ser tan indispensable para la felicidad del espíritu como indispensable para la vida es el alimento del cuerpo. Una justicia ejercida por los tribunales, sin duda, siempre que a elloslos determinase la ley, más también, y sobre todo, una justicia que fuese emanación espontánea de la propia sociedad en acción, una justicia en la que se manifestase, como ineludible imperativo moral, el respeto por el derecho a ser que asiste a cada ser humano.

Texto: José Saramago

2. MARQUE CON UNA X LA RESPUESTA QUE CONSIDERE CORRECTA. (Responda de acuerdo con lo que el texto dice y no de acuerdo con sus opiniones personales sobre el tema)

1. La idea principal del texto es:

A) En el Siglo XVI los hombres se comunicaban por medio de campanas.

B) Los campesinos son explotados por los terratenientes.

C) El Poder Judicial debe ser independiente del Poder Ejecutivo.

D) La justicia ha muerto.

2. La expresión “aquellos píos tiempos” significa:

A) Aquellos tiempos remotos.

B) Aquellos tiempos en que la religión tenía

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (16.7 Kb)  
Leer 11 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com