Casas De Dia

CAPITULO 1.

HISTORIA Y CONCEPTUALIZACION DE LAS CASAS DE DIA.

1.1. DIFERENCIA ENTRE CASA DE DIA Y ASILO DE ANCIANOS.

Los asilos hoy en día son centros donde se atienden necesidades sociales, sanitarias y de cuidados a numerosos ancianos, que por diversas circunstancias, fundamentalmente soledad o pérdida de autonomía, precisan de asegurar dichos cuidados fuera del domicilio. Dicha atención se presta en ocasiones de forma temporal o de forma permanente hasta el final de la vida del residente. En estos centros, los cuidados son proporcionados por parte de un grupo cada vez más amplio y diverso de profesionales, teniendo cada vez más un enfoque no estrictamente custodial del anciano (Hernandez, 2009, págs. 19-20).

Algunos asilos están equipados como un hospital. El personal presta cuidados médicos, así como fisioterapia y terapia del habla y ocupacional. Puede haber un puesto de enfermería en cada piso. Otros centros procuran aparentar ser más un hogar y tratan de brindar una sensación de vecindario. Con frecuencia, no tienen un cronograma diario fijo y pueden contar con cocinas abiertas para los residentes y se les fomenta a los integrantes del personal a establecer relaciones con los ocupantes (Envejecimiento, 2013).

1.2. EVOLUCION DE LAS CASAS DE DIA EN MEXICO.

En costumbres de pueblos prehispánicos, en México, el anciano dominaba el aspecto familiar y político. Si había sido funcionario o parte del ejército, recibía alojamiento, incluso era tomado en cuenta si era campesino, hay indicios de actividades de beneficencia en Tenochtitlán, dirigidas por religiosos. En el siglo XVI, Bernardino Álvarez (fraile español que desarrolló diversas actividades humanitarias en hospitales de América durante el siglo XVI), fundó el Hospital de Convalecientes y Desamparados.

Hacia el año de 1763, Fernando Ortiz Cortez percibiendo el problema que representaba en la Nueva España el gran número de indigentes existentes en la capital del virreinato, pensó en proporcionar un lugar que diera asistencia durante el día, a todos aquellos niños, adultos y ancianos indigentes de la calle, así que construyó la casa de necesitados que asistía hasta 250 ancianos (Sanchez, 2009, pág. 45).

En su publicación, Sánchez (2009), menciona que la asistencia diurna de las casas de necesitados, quedó paralizada en el siglo XIX con la guerra de independencia y la reforma. La atención pasa a quedar a cargo del estado y nace la Asistencia Pública que se prolonga durante el porfiriato. En la constitución pública de 1911, creándose el IMSS, se asegura la jubilación para la vejez, y la asistencia de los ancianos se separa de la del necesitado en 1934, por un edificio construido a cargo del filántropo Vicente García Torres, y que posteriormente fue inaugurado en 1938, y que dio asistencia durante gran parte del día.

En ese mismo año, José Villagrán García proyecto en una ex hacienda en San Miguel, la construcción de un espacio, a la que podemos llamar una de las primeras casas de día de su tipo.

Para 1945, se construye la casa de día de San Miguel de Belén en Guadalajara, y los usuarios de esta casa, eran personas de escasos recursos y sin posibilidades de que se les atendiera en sus hogares, como era costumbre en las personas adineradas (MORA, 2006, pág. 186).

Hoy en día existen numerosos espacios dedicados a la asistencia diurna de los adultos mayores, son tantas las casas de días que muchas de ellas no se encuentran registradas ante alguna institución o programa social, y es por esto que no se conoce exactamente una cifra sobre la existencia de estos centros asistenciales.

Existen instituciones que prestan el servicio diurno asistencial para los adultos mayores y que cuentan con programas que desarrollan fielmente para una mejor atención; algunas de las principales instituciones son: el INAPAM, DIF, INSEN.

1.3. CONCEPTO DE CASA DE DIA.

“Una Casa de Día para Adultos Mayores es un valioso apoyo

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