ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Caso Robin Hood


Enviado por   •  2 de Noviembre de 2012  •  1.682 Palabras (7 Páginas)  •  917 Visitas

Página 1 de 7

Caso 29

Robin Hood

En la primavera del segundo año después de su insurrección contra el Sheriff de Nottingham, Robín Hood fue a dar un paseo por el bosque de Sherwood. Mientras camina, cavila sobre qué hacer respecto a su cruzada contra el sheriff, el despliegue de sus fuerzas, sus movimientos más recientes y las opciones que tenía a su alcance.

La revuelta contra el Sheriff había comenzado como algo personal, pero el solo no podía hacer gran cosa. Por ello, busco aliados, hombres que se sintieran agraviados y con un gran sentido de Justicia. Más adelante, aceptó a todos lo que llegaban hasta el, sin hacerles muchas preguntas y exigiendo tan solo que estuvieran dispuestos a servirle. Pensaba que la cantidad hacia la fuerza.

Había dedicado el primer año a conformar un grupo que pudiera ser una banda disciplinada, unida por su animadversión al sheriff y su disposición a vivir fuera de la ley. La organización de la banda era muy simple. Robin era el comandante supremo, tomaba todas las decisiones importantes y delegaba tareas específicas a sus lugartenientes. Will Scarlet estaba a cargo de la inteligencia y las exploraciones. Su tarea principal era seguir como sombra al Sheriff y sus hombres, así como estar siempre atento a sus movimientos. También reunía información acerca de los planes de viaje de los comerciantes ricos y de los cobradores de impuestos. El pequeño Juan mantenía la disciplina de los hombres y se encargaba de que los arqueros estuvieran preparados para dar el máximo que su profesión exigía. Scarlock se ocupaba de las finanzas, de convertir los botines en dinero, de repartir las partes correspondientes de los robos y de encontrar escondites adecuados para lo que sobraba. Por último, Much, el hijo del Molinero, tenía la difícil tarea de conseguir provisiones para la siempre creciente banda de hombres felices.

Sin embargo, no todo era felicidad. Los problemas comenzaban a surgir y se multiplicaban. La fuente de ingresos principal está disminuyendo, ya que los viajeros empiezan a evitar cruzar por el bosque. Además, debido a que la fama de sus bandidos se está difundiendo, una gran cantidad de reclutas nuevos está llegando. El tamaño de su banda comienza a exceder la capacidad de alimento que les proporciona el bosque y es más fácil detectar su campamento, debido a que éste crece cada vez más. Se vuelve más difícil hacer cumplir la disciplina. Las fuerzas del sheriff están creciendo en tamaño y poder.

Robín consideraba que había llegado la hora de que los hombres felices dejaran su política de franca confiscación de los bienes y que optaran por cobrar un impuesto de tránsito de fijo. Sus lugartenientes se oponían decididamente a esta idea. Estaban orgullosos del famoso lema: “Robar a los ricos para dar a los pobres”. Decían: “Los Granjeros y la gente del pueblo son nuestros mejores aliados, cómo le vamos a cobrar un impuesto y, sin embargo, esperar que nos brinden su ayuda en nuestra lucha contra el Sheriff?”

Robin cree que debe llevar su campaña a una rápida conclusión. Se preguntaba cuánto tiempo más podrían sus hombres felices seguir actuando con los métodos de los primeros días. El Sheriff estaba cada vez más fuerte y mejor organizado. Había recurrido a sus contactos políticos para obtener refuerzos. Ahora tenía suficiente recursos y hombres y había empezado a acosar la banda y a incursionar en ella para conocer sus debilidades. Los hechos se estaban volviendo en contra de la banda y Robin cree que antes de que el Sheriff le propinara un golpe contundente y mortal, la batalla debía quedar decidida de forma rápida.

Robin frecuentemente había acariciado la idea de matar al Sheriff, pero las posibilidades parecían cada vez más remotas. Además, matar al Sheriff quizás consiga satisfacer su sed personal de venganza, pero Robin se cuestiona si esto ayudaría a mejorar la situación. El Sheriff tenía amigos muy poderosos en la corte y el Príncipe Juan le tenía en muy alta estima.

El Príncipe Juan era perverso y veleidoso. Le carcomía la poca popularidad que tenia entre la gente, que en su mayoría, quería que regresara el encarcelado Rey Ricardo. También vivía atemorizado de los barones que primero le habían dado la regencia del trono, pero que ahora dudaban de su derecho al mismo.

Varios de estos barones habían empezado a reunir dinero para el rescate que liberaría al rey Ricardo Corazón de León de su encarcelamiento en Austria. Habían invitado a Robin a unirse a una conspiración a cambio de amnistía en el futuro. La propuesta era peligrosa. Ser bandido de una provincia era una cosa, y las intrigas de la corte, otra muy diferente. El Príncipe Juan tenía espías por todas partes y era famoso por ser muy vengativo. Si el plan de los conspiradores fracasaba, la persecución seria implacable, con resultados inmediatos.

El sonido del enorme cuerno distrajo a Robin de sus pensamientos. Le llegaba el aroma de venado asado que flotaba en el aire. No había nada del todo resuelto ni decidido. Robin se dirigió al campamento para conversar del tema con su más confiable consejero….USTED!!

Como es el consejero más confiable de Robin Hood y el más informado sobre la construcción e implementación de estrategias eficaces, se le ha pedido que le aconseje cómo proceder en vista de la situación. En las horas siguientes, Robin Hood espera que le proporcione:

a) Un resumen de los problemas que necesita abordar

b) Un plan de acción apropiado que incluya:

□ una misión

□ una serie de objetivos de desempeño

□ una estrategia para resolver los problemas a los que se enfrenta y

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.5 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com