Construcción De La Cuidadanía

Fundamentos

El aula y otras instancias escolares deben permitir un trabajo reflexivo acerca de las experiencias reales y las prácticas juveniles que son fundantes de sus identidades individuales y colectivas.

La tarea de formar ciudadanos desde la concepción de ciudadanía participativa y responsable que sustentamos es algo más compleja porque no se trata sólo de abordar los principales instrumentos de derechos humanos y las condiciones para ejercer su defensa en situaciones en que son vulnerados. Se trata de formar a los estudiantes en el ejercicio mismo de una práctica real de participación en lo público. En este sentido, la experiencia escolar constituye una oportunidad para que los estudiantes, acompañados por sus docentes y otros referentes adultos, encuentren espacios de progresiva toma de decisiones y asunción de responsabilidades.

Es interesante preguntarnos en qué medida el derecho a participar es efectivamente garantizado en las escuelas –sea en el aula como en otros espacios institucionales–, si el hecho de que se respete produce algún tipo de diferencia en el día a día escolar y qué condiciones de trabajo hacen más o menos posible la salvaguarda del derecho de participación.

Los medios de información y comunicación son espacios donde se disputa el fortalecimiento de uno u otro paradigma de concepción de los niños y jóvenes. Alineándonos en el paradigma de la protección integral del niño, donde la salvaguarda de los derechos se hace cuestión primordial, cabe destacar que la introducción de las nuevas tecnologías en la escuela pone a la institución en el desafío de promover los derechos de participación en un territorio novedoso.

En síntesis, al darles lugar a niños y jóvenes para que sean partícipes de estos procesos, se aceptan sus posibilidades de autonomía creciente en el desarrollo de propuestas. En este sentido, los adultos de la escuela debemos promover este tipo de iniciativas y hacer un seguimiento de los proyectos, del modo en que se integran los estudiantes y, fundamentalmente, de los aportes que representan a la escolaridad de cada uno de ellos, teniendo en cuenta la singularidad de las propuestas.

Objetivos

 Provocar intercambios grupales interviniendo con preguntas que permitan a los/las alumnos/as tener en cuenta las dimensiones que están involucradas en la situación planteada.

 Indagar los saberes de los/las alumnos/as, sus familias, comunidades o grupos de pertenencia para tomarlos y trabajar con ellos en la escuela.

 Fomentar la discusión, la contrastación de ideas y puntos de vista, la argumentación, el respeto por la diferencia, el derecho a decir y a que sean escuchadas las opiniones de todas/os los que participen.

 Organizar el trabajo colectivo en el marco de relaciones de reciprocidad, respeto mutuo y compromiso.

 Elaborar

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