DONDE COMIENZA EL BULLYING.

CUÁLES SON LAS RAÍCES DEL BULLYING

  Cada vez es más usual hablar de bullying en las escuelas, hoy denominado hostigamiento escolar.  Debemos enfrentar la realidad de que nuestros niños, alumnos o hijos, pueden ser víctimas de dicho hostigamiento o en algún caso, ser el causante del mismo.  Cada vez es más frecuente observar agresiones verbales, acoso, golpes y amenazas, y es sumamente necesario que el docente intervenga tomando las medidas necesarias.  Uno de los interrogantes sería entonces: ¿están preparados los docentes para enfrentar dichas situaciones?

  Kas^[1]sen y sus colaboradores (2004) en un estudio longitudinal encontraron que el clima escolar está significativamente relacionado con el fenómeno del bullying que se produce en los salones de clases.  Es decir, entre más atención a los aprendizajes académicos y menos caos y desorden, hay significativamente menos actos de intimidación.

  La neurociencia nos revela hoy que para enseñar debe tenerse en cuenta el binomio emoción-cognición la cual es indisoluble.  Los seres humanos no somos seres racionales a secas, sino más bien seres primero emocionales y luego racionales.  Es decir que un enfoque emocional es primordial para aprender y memorizar y desde luego enseñar.

  Una metodología para que haya un buen ambiente en los salones de clases sería que los docentes utilicen este nuevo binomio que nos ofrece la neurociencia, donde se considera que al tener clases que movilicen las emociones de los alumnos primeramente, se obtienen mejores resultados de aprendizajes y la convivencia en el aula es más armoniosa.

  Sin embargo, es de total conocimiento que la mayoría de los padres se enorgullecen de las buenas calificaciones obtenidas por sus hijos.  Pero, es difícil ver a los mismos orgullosos porque su hijo defendió a un compañero, por que comparte o es solidario con sus pares, todo lo contrario podemos ver muchas veces a los mismos adultos, dando ejemplos de egoísmo y falta de solidaridad, donde es importante recolectar cosas para gente carenciada o necesitada del norte de nuestro país (solo por dar un ejemplo) pero, permitimos que nuestros vecinos pasen frío o hambre sin siquiera mirarlos.

  ¿Dónde empieza el hostigamiento? El social, el cotidiano el que vemos día a día en la calle.  ¿Es posible enseñarle a nuestros niños a ser buenas personas cuando no educamos con el ejemplo?, ¿es posible que, respete al docente cuando escucha a sus padres referirse al mismo de manera despectiva?, ¿es posible enseñarles a nuestros niños a ser tolerantes cuando insultamos a quien se atraviesa en nuestro camino, si vamos manejando el auto?, ¿es posible enseñarles a nuestros hijos a ser honestos cuando nos quedamos con un vuelto?, ¿es posible enseñarle a nuestros hijos a no ser violentos cuando todas estas actitudes violentan nuestra propia imagen como padres, como referentes, como ejemplo a seguir?

  Vivimos en una sociedad, que espera siempre que el cambio lo haga el otro:

- que salude amablemente el otro primero, no voy a quedar yo pegado,

- que ayude a un vecino necesitado “alguien más” yo estoy ocupado,

- que respete las leyes de tránsito el otro, yo estoy ocupado

- que mantenga la ciudad limpia otro, para eso pago los impuestos (y tiro la envoltorios de cosas en la calle),

- que se ocupe de esa señora golpeada otro, yo no quiero líos,

- de ese niño que siempre está triste y todos tratan mal (compañero de hijo/a) que se ocupe otro, no es mi tema.

  Y así sucesivamente vamos siempre mirado para otro lado, como quien dice pateándole el problema a otro, que quien sabe si aparece en algún momento.  Cuando no hacemos nada, también estamos siendo parte de ese hostigamiento, estamos siendo parte de esa violencia que crece enormemente en nuestra sociedad, la estamos aceptando a través del silencio.  

  Nuestro país es el país con mayor cantidad de casos en la región, se calcula que uno de cada cuatro chicos tiene miedo de ir a clases.

   "Le pegaron porque es linda", es una de las frases más escuchadas luego de algún incidente escolar entre alumnas. Es que en ocasiones la belleza es causante del bullying: en los últimos seis años se duplicaron los casos de peleas entre chicas en el ámbito educativo. Diario Popular “Se duplicaron las pelean entre chicas en escuela” 13/09/2014.

Infobae, 2 de agosto de 2012, “Dramático caso de bullying en Mendoza: "Si vuelvo a la escuela me mato"

…"Esa nena tiene un gran problema: su mamá es rubia y su papá de raza oscura, ella es morochita", se defendió la directora del colegio”… “La protagonista de este nuevo caso de abuso escolar tiene apenas 10 años y asistía a la escuela Patricias Mendocinas. Su madre relató el dramático caso y dijo que su pequeña hija era discriminada por su color de piel y su ascendencia marroquí. Según dijo, le decían en forma despectiva "negra", "extranjera", "adoptada", "tu pelo es como virulana"…  La menor concurrió al establecimiento educativo hasta junio, cuando un día, entre lágrimas y frente a su mamá, dijo: "Si vuelvo a la escuela, me mato".

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