Decreto 3011

El decreto 3011 de de Diciembre 19 de 1997

Este decreto fue creado inicialmente con el fin de brindar educación a los adultos que de una u otra forma no han podido culminar sus estudios primarios y/o secundarios y así permitir su inclusión a la vida económica, política y social; por tal motivo se planteo el proceso de alfabetización en el país. Esto permite que jóvenes mayores de trece años y adultos que no hayan terminado sus estudios puedan proyectarse en procesos de formación para el trabajo, la participación ciudadana y que sean un puente para el cambio social.

Con el fin de lograr lo anteriormente mencionado, se crearon cuatro formas de prestación del servicio público educativo: presencial, semipresencial, abierta y a distancia. Esto con el fin de facilitar la educación de aquellos que muchas veces por cuestiones de trabajo no pueden incluirse en jornadas diurnas como se acostumbra normalmente; además por medio de estas presentaciones se ayuda de una forma rápida a quienes necesitan para sus trabajos el título de bachiller académico.

Sin embargo no todo es color de rosa, si bien la educación no ha sido uno de los principales puntos de partida del gobierno puesto que cada vez más la desmerita y le invierte menos conllevando a que se desmejore y que la calidad de los estudiantes disminuya a un punto fatal; este decreto que fue originalmente creado con el fin de brindarle la educación necesaria a quienes por diversos motivos no la han obtenido, ha sido malinterpretado por las instituciones a su favor. Pues en muchos casos, por el aumento de estudiantes muchos de ellos les tocaba inscribirse en jornadas nocturnas puesto que en el día no se encontraban cupos; en casos excepcionales muchos de los estudiantes que tenían problemas de disciplina y bajo rendimiento académico eran matriculados en estos horarios porque los rectores y profesores ya no sabían qué hacer con ellos y consideraban que de esta forma se “deshacían de ellos”. En mi opinión, considero que esto es una alcahuetería ya que esta es una forma de patrocinarles la pereza y la indisciplina porque al ser una enseñanza más reducida les están anulando su capacidad mental y el desarrollo de ideas y planteamientos así evitando el menor esfuerzo posible a la hora de hacer sus trabajos y tareas y de esta manera aumenta su mal comportamiento puesto que no ven la necesidad de esforzarse por hacer algo y prefieren incurrir en desordenes y demás cosas diferentes a su educación.

No obstante, como consecuencia del ingreso de jóvenes a las jornadas nocturnas y sabatinas, ocasionó que muchos adultos desistieran de la idea de retomar sus estudios pues el comportamiento de estos jóvenes en varias ocasiones no era soportado por los mayores; muchos se sentían intimidados y quizá avergonzados por el hecho de compartir un entorno de estudio con personas que fácilmente podrían ser sus hijos,

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