Demanda Familiar

Demanda Inicial

Se solicita el divorcio en virtud de una causal de divorcio consistente en la ausencia de debito carnal.

Hechos

Al tener problemas el matrimonio, el espero solicita a la esposa que se cambie de habitación, ella acudiendo a la solicitud se muda al cuarto de su hija y a partir del acontecimiento pasaron 8 meses sin tener debito carnal.

Contestación de la demanda

Señala que lo dicho por su esposo es mentira y reconviene al indicar que sufre maltrato por su esposo

Hechos

Viven en la casa de sus papas, tanto la hija como el matrimonio duermen en un mismo cuarto. Cuando la pareja desea tener debito carnal acuden a un hotel

Resolución del Tribunal

El tribunal resuelve que no le asiste la razón.

No se concede el divorcio

Razonamiento

Las causales del Código Familiar se advierte que no hay cumplimiento de las obligaciones

Recurso de apelación

La sala confirma que no hay causal especifica de debito

Razonamiento

El artículo 125 del Código Familiar es inconstitucional porque no se debe de comprobar la causal por resolución del acto tribunal colegiado en contradicción de tesis

Fundamento legal

ARTÍCULO 175.- CAUSALES DE DIVORCIO. Son causales de divorcio:

I.- El adulterio debidamente probado de uno de los cónyuges;

II.- La propuesta de un cónyuge para prostituir al otro, no sólo cuando lo haya hecho directamente sino cuando se pruebe que ha recibido dinero o cualquier remuneración con el objeto expreso de permitir que otro tenga relaciones carnales con su consorte;

III.- La incitación a la violencia o este mismo hecho por un cónyuge al otro para cometer algún delito, aunque no sea de incontinencia carnal;

IV.- Los actos inmorales ejecutados por el marido o por la mujer con el objeto de corromper a los hijos, de explotarlos o exponerlos al trabajo indigno, a riesgos urbanos, circenses o que generen la inducción a vivencias callejeras, así como la tolerancia en su corrupción y el ejercicio reiterado de la violencia familiar cometida contra los menores de edad por cualquiera de los cónyuges;

V.- Padecer cualquier enfermedad de tipo crónico, incurable y además contagiosa;

VI.- Las alteraciones conductuales en la práctica sexual que sobrevengan después de celebrado el matrimonio;

VII.- Encontrarse afectado por enfermedad mental incurable, que ponga en riesgo a su cónyuge e hijos

VIII.- La separación injustificada del domicilio conyugal por más de seis meses;

IX.- El incumplimiento grave y continuado de las obligaciones derivadas del matrimonio;

X.- La presunción de muerte, hecha conforme a la Ley;

XI.- La violencia familiar, las amenazas, la crueldad o las injurias de un cónyuge contra el otro;

XII.- La acusación formal hecha por un cónyuge contra el otro, por delito que merezca pena mayor de dos años de prisión;

XXIII.- El hecho de que la mujer dé a luz, durante el matrimonio, un hijo concebido antes de celebrarse el mismo, con persona distinta al cónyuge y que judicialmente así sea declarado.

XXIV.- El hecho que el cónyuge varón tenga conocimiento del nacimiento de un hijo suyo procreado antes del matrimonio y nacido dentro de él, con mujer distinta a su cónyuge y que judicialmente así sea declarado o que voluntariamente lo haya reconocido.

XV.- Haber cometido uno de los cónyuges contra la persona o bienes del otro, un delito intencional por el cual tenga que sufrir una pena privativa de libertad mayor de un año;

XVI.- Cuando un cónyuge haya pedido el divorcio o la nulidad del matrimonio por causa que no haya justificado o que haya resultado insuficiente, el demandado tiene a su vez el derecho de pedir el divorcio durante el plazo de 3 meses, una vez que haya causado ejecutoria la sentencia.

Durante esos tres meses a que hace referencia el párrafo anterior, los cónyuges no están obligados a vivir juntos;

XVII.-

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