EL METODO EN LA “CIENCIA”

VERA JUDITH BLANCO

EL METODO EN LA “CIENCIA”

Resulta muy complejo y a veces controversial hablar sobre si la economía es una ciencia social o no, y si estas aplican como ciencia o si los distintos métodos expuestos a lo largo de la evolución de la ciencia económica representan en realidad una evolución o simplemente se trata de distintas concepciones estructurales en su aplicabilidad. Una de las razones que hacen controversial este tema son los distintos paradigmas que utilizan las diferentes corrientes, doctrinas, escuelas o pensamientos económicos que han aportado al desarrollo de la ciencia como tal.

Más controversial aún resulta ser, particularmente en el campo de las ciencias sociales, la metodología de la ciencia, específicamente marcada en el marco cronológico  desde la postura de Popper que pone en cuestionamiento el método precursor llamado inductivo aplicado por el empirismo.

Cuando Popper propone para la investigación científica el método de contrastación deductiva o contrastación empírica, según el cual una hipótesis debe ser formulada y después sometida a un proceso de contratación. Además frente a la verificación positiva como criterio de validación de teorías propone el criterio de falsabilidad, que consiste en aceptar una proposición como científica sólo cuando es empíricamente refutable, a mi manera de ver, dividió la historia del  pensamiento económico en dos grupos: inductivistas y deductivistas. La metodología en la aplicación del método popperiano a la economía es ampliamente aceptada por un gran grupo de economistas, sin embargo, también cuenta con sus detractores surgidos como consecuencia de la negación a la aplicación del criterio falsacionista, pero considero como un gran logro para Popper el respaldo metodológico que le dio Friedman a su percepción del método.

La tesis de Friedman constituye una nueva aplicación del método popperiano a la economía en donde su objetivo  no es encontrar supuestos realistas para una teoría, sino aproximaciones simplificadas, que proporcionen predicciones suficientemente ajustadas. Quiero  resumir su posición diciendo que si la predicción de una teoría resulta ser verdadera, puedo concluir que la teoría era verdadera como si sus supuestos fueran verdaderos. Además, en palabras del propio Friedman: el hecho de contar con supuestos realistas no basta para que la teoría sea aceptable, pues una teoría no puede probarse comparando sus supuestos con la realidad.

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