El Hombre En Busca De Sentido

"El hombre en busca del sentido"

Este relato nos lo narra un doctor que vive en carne propia la peor experiencia de su vida. La manera en que fue tratado el y sus compañeros en un campo de concentración.

Hay tres etapas en que este doctor divide su historia y la de sus compañeros la primera es la de "El intercambio", la segunda "La vida en el campo" y la tercera en La liberación".

La característica del intercambio en si fue el shock que tuvieron estas personas. Esto nos informa en la manera en que empezó esta tragedia, cuando los engañaron, creyéndoles que irían de viaje para así poder trabajar. En este viaje iban miles de prisioneros destinados a viajar demasiados días.

Al llegar al campo de concentración les dieron la orden de que se desnudaran se despojaran de todas sus propiedades y las colocaran en mantas. De ahí los militares al mando los tatuaban para grabarles un numero especial, era la forma en que los identificarían y así no habría ningún problema en saber quien era quien.

Unas de las cosas más seguras e incomodas era en el momento en que eligieran a un grupo de hombres para colocarlos en camiones y trasladarlos a otro lugar, Esto quería decir que de no ser elegido tal hombre se sabía que de alguna otra manera seria elegido otro prisionero así que nadie se salvaría de la cámara de gases o cremación. Para esto se seleccionaban a los más enfermos y a los que no podían trabajar de manera eficiente.

Dormían en camas pequeñas y bastante apretados, duraban tiempo sin bañarse, no se lavaban los dientes, no tenían cuidado alguno de su persona.

Para alimentarse tenían que hacer fila para obtener un pedazo de pan. Los insultos seguían de manera continua, una de ellas era el de estar trabajando a temperaturas bajas. Todo prisionero añoraba en alimentarse, el bañarse, el fumar sus propios cigarrillos, en lo que menos le daban importancia era a la sexualidad.

En una ocasión la forma en ganarse "cupones de premio" con ellos se podían canjear para así obtener cigarrillos, en una parte de esta historia este prisionero decide intercambiar sus cigarrillos por algo de alimento. Mientras cuando se observaba que un prisionero fumara sus propios cigarrillos era por que había renunciado a seguir adelante.

En el punto de la política se permitía hablar de ella ya que era muy respetada y en la religión la tomaban como en sentido desconocido. El humor era un arma para luchar por la supervivencia. Estas personas inventaban historias divertidas era como el arte de vivir.

A este prisionero numero 119.104 se le asigno ser voluntario de tareas sanitarias en otro campo de enfermos de tifus a el no lo tomaba como u n sacrificio si no como un sentido a su vida, el que de alguna manera se moriría.

En general todos les agradaba tener su soledad, es decir alejarse y meditar un poco de todo. Cada cosa que pensaban solos se la contestaban. Lo disfrutaban tanto que no necesitaban nada más.

Los prisioneros a lo que le temían era el pensar y mucho mas el realizar un plan de fuga, esta decisión era la consecuencia de salvar su propia vida o morir en el intento. Hubo una oportunidad en la cual este prisionero mediante sus consultas con la ayuda de su colega lo ayudaría escapar de ese lugar, peor desafortunadamente el reto fue difícil y no logro escapar.

Duro demasiado tiempo para que este hombre y su colega pudieran escapar de ese campo de concentración, estuvieron esperando varios días, una vez más miraban en la forma en la forma en que se llevaban a sus compañeros y después se enteraban que habían muerto carbonizados. Era desagradable esta situación ya que fueron engañados diciéndoles que serian libres. El sufrimiento era muy grande el tiempo era ilimitado, pero a pesar de todo no se daba por vencido

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