El Poder En Las Organizaciones En Latinoamerica

EL PODER EN LAS ORGANIZACIONES EN LATINOAMERICA

El enfoque de las organizaciones venezolanas

Las organizaciones constituyen una parte importante de nuestra existencia. Generalmente nacemos en el seno de una familia y con la ayuda de una organización médica (hospital o clínica), transitamos gran parte de nuestra vida en instituciones educativas luego vamos al campo laboral y son en estas organizaciones en las que trabajamos las cuales absorben gran parte de nuestro tiempo, aquí interactuamos con otras personas, cumplimos tareas, programa o metas. En este sentido preguntar al venezolano sobre lo que es una organización, como la ve, la entiende y la siente es ir a lo profundo de las organizaciones como estructura jerárquicas, donde los niveles son bien definidos en poder y autoridad. La visión se encuentra en la mente de las personas y en los distintos sectores como la administración pública, donde está más acentuada, que en el sector industrial este puede ser más flexible y el sector servicios esta entre ambas. A veces nos preguntamos cómo piensa nuestro gerente sobre la autoridad y la jerarquía en comparación con gerentes de otros países.

Podría afirmarse que en los gerentes latinos prevalece una concepción más jerarquizada que en los anglosajones, debido a que los primeros tienen la autoridad y/o responsabilidad de coordinar o liderar al grupo y los segundos son menos jerárquicos y más orientados a los grupos de autogerenciados, donde se formalicen su atención en la tarea a realizar y en el tiempo y recursos disponibles para llevarla a cabo que cada quien es responsables de sus acciones y resultados.

Por lo tanto, conviene destacar la necesidad y el uso de poder en las organizaciones venezolanas. El poder es controversial, se relaciona con: manipulación, engaño, autoritarismo, abuso, para algunos puede ser instrumento efectivo para el ejercicio de la autoridad y la influencia y, con esto, el logro de resultados organizacionales, que pueden beneficiar a todos sus miembros.

A tal efecto, los gerentes parecen estar más motivados por el poder, que por el logro, en el caso venezolano se percibe con mayor intensidad en la administración pública debido a la serie de premisas o beneficios (Pens./Jub y otros) que ofrece este sector. En consecuencia al gerente venezolano se le identifica por ser temeroso y desconfiado, le cuesta delegar, y quiere tener el control bajo su dirección, haciéndose imprescindibles a través de la concentración o centralización de información. Por otra parte, la distribución de poder en Venezuela es desigual debido a las características en sus organizaciones, las mismas son piramidales, jerarquizadas, centralizadas y con relaciones de dependencia marcada entre los niveles de personal, donde se genera grandes diferencias sociales,

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