El Valor De La Experiencia

EL VALOR DE LA EXPERIENCIA

BRYAN TESILLO TORRES

Asignatura: Etología y el Comportamiento Humano

Docente: Alberny Antonio Loaiza Valencia

UNIVERSIDAD DEL QUINDIO

ARMENIA - QUINDIO

2013

EL VALOR DE LA EXPERIENCIA

La experiencia es el hecho de haber presenciado, sentido o conocido algo. Es esa forma de conocimiento que se produce a partir de las vivencias u observaciones que cada persona ha pasado a lo largo de su vida. De igual manera la experiencia puede ser vista como una practicada prolongada que proporciona la habilidad necesaria y suficiente para desempeñar una determinada actividad o labor, es esa vivencia de algo en el pasado ya sea bueno o malo pero que nos brinda la oportunidad de reflexionar y que nos ayuda a sobrepasar situaciones similares que pudiesen presentarse en el futuro o en el presente. Es por esto que la experiencia debe ser vista como uno de los mayores conocimientos que el hombre pueda tener, un conocimiento que solo ha logrado adquirir de manera empírica y que solo podrá ser borrado de su cabeza con la muerte.

La palabra experiencia como tal, proviene del latín “experiri” palabra que en ese idioma significa comprobar y es desde el origen de la palabra y su significado en latín que puede dilucidarse claramente que la experiencia es aquello que debe ser adquirido a través de la comprobación, de las cosas que hacemos sin importar si el resultado sea bueno o malo. Cada acción realizada que de cierta manera afecte nuestra manera de actuar o de pensar que nos haga reflexionar acerca de la forma en que realizamos dicha acción puede ser catalogada como experiencia. La experiencia cuyo significado literal es “forma de conocimiento o habilidad derivados de la observación, de la participación y de la vivencia de un evento o proveniente de las cosas que suceden en la vida, es un conocimiento que se elabora colectivamente”1 es una palabra que encierra todas y cada uno de las cosas que han afectado de manera positiva o negativa nuestra manera de actuar.

La experiencia, cuyo valor es incalculable y que no podría ser comparado ni tan siquiera con la más fina y tallada presea del mundo, está ligada a nosotros desde el momento en que aprendemos a movernos de manera consciente. Por ejemplo, supongamos que un bebe cuyos movimientos están apenas empezando a desarrollarse de manera consciente, toca un tomacorriente o algo que le produzca algún tipo de dolor o molestia, inmediatamente y por acto reflejo, alejara su cuerpo de esa molestia y en un futuro evitara acercarse a este objeto que le produjo tal molestia. De esta manera, puede decirse que el niño aludirá estar en contacto nuevamente con lo que le causo dolor o molestia con el fin de evitar una sensación parecida o igual a la que le desagrado anteriormente y he ahí donde puede evidenciarse que la experiencia es algo que está presente en nosotros incluso desde nuestras etapas iniciales en la vida. Para continuar con los niños, imaginemos otra situación: Supongamos que un niño –A ve como otro niño –B toca un cactus con unos de sus dedos; al hacerlo el dedo de –B empieza sangrar y por consiguiente este se pone a llorar gracias al dolor que le causo el haber tocado el cactus. Ahora –A, que en un comienzo estaba tentado a hacer lo mismo que –B evitara realizar esta misma acción ya que vio lo que le ocurrió a este y de esta manera –A habrá adquirido una experiencia nueva a través de la observación. Por lo anterior es que puede ser dicho que la experiencia, aparte de ser adquirida de manera individual también puede ser adquirida de manera colectiva.

Algunas personas podrían argumentar que la acción de alejarse de un objeto que haya causado algún dolor con anterioridad en los bebes se debe al instinto de conservación. Esta afirmación tiene sin duda alguna, algo de verdad ya que él bebe al querer alejarse de lo que le causa molestia o dolor está velando instintivamente por su propia seguridad pero debe tenerse en cuenta que para enteresarse de que lo que le causa molestia o dolor es perjudicial, tuvo que haberlo vivido anteriormente u observar como esto causo una reacción desfavorable en alguien más y ahí es donde se hace presente la experiencia, ya que gracias a lo que vivió o vio anteriormente es que sabe que dicho objeto no es bueno o que es preferible estar alejado de este. Es así como puede decirse que si bien es cierto que el niño actúa bajo un instinto de conservación, lo hace basado en la experiencia que tuvo anteriormente.

Otras personas que no estén de acuerdo con que la experiencia tenga un valor incalculable, podrían decir que la experiencia es solamente el nombre que le damos a nuestros errores. Esta afirmación puede deberse a que usualmente asociamos la experiencia con intentos fallidos de algo, por ejemplo: al momento de declararnos ante la persona que nos gusta y

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