El correcto ideal del feminismo.

El correcto ideal del feminismo

Cuando las personas traen puesta la venda de la ignorancia en los ojos, es imposible comprender un ideal de la forma que realmente es; la ignorancia nos encapricha en la incomprensión y nos convierte en auténticos testarudos de mentes cerradas. La ignorancia es un mal que se aferra con sutileza y susurra que nuestra opinión es la única correcta… y así abraza a tantas personas, las cega y limita.

Así pasa con quienes juzgan erróneamente el feminismo, con quienes lo tachan como una idea descabellada donde la mujer desea ser mejor que el hombre. Y es que, con la represión que la mujer ha recibido a través de la historia, y con ese ímpetu de ser reconocidos por su valor, no falta quien cruce la línea y caiga en la exageración y el dramatismo. Es entre tantos erróneos ideales y confusiones que el feminismo como como realmente es, se pierde.

El verdadero feminismo habla sobre equilibrio entre el hombre y mujer. Emma Watson, una reconocida actriz y activista británica, defensora de los derechos de la mujer, habló ante la ONU sobre este concepto de igualdad. Ella menciona que igualdad es tener los mismos derechos como oportunidades, no querer imponer algún sexo sobre otro (“El ovacionado discurso de Emma Watson sobre lo incómodo del feminismo”, 23 de septiembre 2014). Este ideal pide que  a la mujer se le reconozca por quién es y por las capacidades que realmente tiene, no como menos o mejor que el género masculino.

Es ahí dodne podemos decir que el feminismo es una tarea que incluye a todos; y  que esta larga lucha de desigualdad solo se ganará al quitarnos la venda de la ignorancia, al pensar en que todos los seres humanos valen lo mismo, y que uno no es mejor que otro. Si llegamos a este equilibrio de pensamiento, nos convertiremos en mejores personas y aportaremos a la paulatina creación de una sociedad tolerante. El feminismo bien practicado, junto con otros buenos ideales, podría llevarnos a estar no tan lejos de una sociedad utópica.

Sin embargo, nuestra realidad actual apenas comienza ese arduo camino. Mientras todos los seres humanos no comprendan esta real necesidad, existirá la desigualdad y se romperán esquemas ya definidos, como lo son los derechos humanos. Como menciona Angarita (2012) al negarle los derechos humanos a las mujeres en aras de la cultura, la religión o por razones de soberanía nacional, el concepto mismo de derechos humanos deja de ser universal, pues queda totalmente subestimado.

Por ello, para lograr un equilibrio en los derechos de hombres y mujeres  y lograr la práctica de un correcto feminismo, necesitamos comprender el valor y los derechos que el individuo posee desde el momento que nace. El cambio comienza al salir de nuestra zona de confort quitándonos la  pesada venda de la ignorancia.

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Bibliografía

BBC MUNDO, 2014. “El ovacionado discurso de Emma Watson sobre lo incómodo del feminismo”. http://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/09/140922_feminismo_emma_watson_en

Angarita, Ana, “Protección y promoción de los derechos de la mujer”; Mira Editores, 2002, p. 216.

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