Ensayo Latapi

“…la tarea fundamental de cualquier docente no ha cambiado en absoluto, ni va a cambiar en el futuro; es la misma que tenía Sócrates, o cualquier magister medieval de primeras letras, o cualquier profesor que enseñe botánica en el año 3998, y que se resume en esta sencilla frase: producir aprendizajes que sean beneficiosos al desarrollo de la persona.”

Se habla mucho de la formación y actualización docente; pero todos los que se encuentran y nos encontramos por la causa que fuere en el área de la docencia debemos reflexionar sobre la gran responsabilidad que amerita ser maestro, por lo tanto poner los pies en la tierra y saber que nunca terminamos por aprender, de ahí por qué la necesidad de ir actualizándote en forma continua. Una de las formas de despertar en los docentes la necesidad de mejorar esa formación (creo yo) sería en el momento en que estemos en una constante competencia y saber que en cualquier momento podemos ser desplazados ´por alguien que está mejor preparado; pero sin embargo la influencia de algunas personas (sindicato por ejemplo) haría de esa competencia solo un apariencia. Pero este no sería problema, ya que si tienen esa oportunidad lo ideal es desempeñar esa actividad con ética y responsabilidad, y no solo por cuestión económica, o en el peor de los casos, saber que tienen asegurado su trabajo y por lo tanto olvidarse precisamente de esa actualización de mejora.

Ese lado obscuro que manifiesta el documento de latapí, el contexto mexicano, las condiciones laborales, etc., el buen maestro las podría superar haciendo resurgir de su interior esa vocación; pero en donde creo no podría hacer demasiado es en esa corrupción en el medio magisterial, como es posible la actitud de aquellos maestros que respaldándose de una “disque comisión” no se presenten a trabajar, pero eso sí su quincena puntual, y el asunto no se queda aquí ya que le cortan la posibilidad a aquellos maestros que cubren esos interinatos en donde realizan un trabajo que podría acarrear frutos después de cierto tiempo, de esta forma los docentes que quieren hacer un buen trabajo por el bien de los alumnos a largo plazo tienen que dejar esas bases porque el maestro titular posiblemente regrese y por lo tanto llega otro maestro que debe empezar de nuevo, echando por la borda el trabajo que el anterior maestro iniciaba.

Cómo puedes ver aprender si esa oportunidad te la restringen, y los que tienen la oportunidad de hacerlo no lo ven así, la parte humana del alumno pasa a segundo término, desafortunadamente muchos de los maestros que conozco tienen esa actitud.

Hoy me doy cuenta de por qué recuerdo a muchos de mis maestros que me dieron clases, precisamente porque no les importaba el contexto, las condiciones laborales, la falta de material, ellos sabían salir adelante con sus alumnos, eran respetados por la gente, era un privilegio ser maestro en pocas palabras, claro que

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