Estratificacion Social En Colombia

ESTRATIFICACIÓN SOCIAL EN COLOMBIA

LUZ ELENA PEREZ

OLINDA OROZCO

MANUEL ALEJANDRO DELGADO MARTÍNEZ

Presentado a la profesora:

Rosario Vanegas

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES

PROGRAMA DE CONTADURÍA PÚBLICA

CUARTO SEMESTRE

BARRANQUILLA

Mayo 03 de 2015

Texto argumentativo

Estratificación social en Colombia

INTRODUCCIÓN

En las siguientes líneas encontraremos como esta segmentada la sociedad en Colombia, como funciona este sistema, además de las desventajas y los problemas que genera dicha manera de estratificación social.

Por otro lado veremos las formas en que como ciudadanos podemos empezar a cambiar estas realidades a través de los instrumentos de revolución humanista como son la palabra, el antineoliberalismo económico y la educación.

SUSTENTACIÓN

La realidad de la población colombiana en donde se puede entrever por un lado, la pobreza que no es más que otra cosa que el producto del capitalismo salvaje que viene acabando con los bienes de las familias y por el otro lado, se puede ver la forma en que se alía el Estado con los empresarios que se llevan estos bienes haciéndose más ricos y los pobres cada vez más pobres.

Es precisamente a esto a lo que se le llama desigualdad social. “En todos los países hay diferencias sociales que condicionan las relaciones, pero en Colombia, el estrato viene claramente indicado en la factura de servicios públicos” (tomado de la revista Semana: “Los colombianos hablan de sí mismos por estratos” por ARTURO WALLACE, 2014/09/23). La sociedad colombiana está segmentada socialmente por algo mal llamado estratos sociales: La estratificación socioeconómica es una clasificación en estratos de los inmuebles residenciales que deben recibir servicios públicos. Se realiza principalmente para cobrar de manera diferencial por estratos los servicios públicos domiciliarios permitiendo asignar subsidios y cobrar contribuciones en esta área.

De esta manera, quienes tienen más capacidad económica pagan más por los servicios públicos y contribuyen para que los estratos bajos puedan pagar sus facturas. Se realiza porque Colombia es un Estado Social de Derecho fundado, entre otros principios constitucionales, en la solidaridad y en la redistribución del ingreso de las personas que lo integran.

En sentido estricto la clasificación no se aplica a las personas, sino a las viviendas. Para los colombianos ese número entre el uno y el seis que figura mensualmente en los recibos de agua, luz y gas no se limita a indicar la tarifa que le corresponde a cada casa. También es un recordatorio constante del lugar que cada uno ocupa –o se supone que debe ocupar– en la sociedad colombiana.

"El poder clasificatorio de la estratificación marca la identidad de los colombianos al punto de que, cuando se busca compañía, el estrato se coloca (en los anuncios personales) al lado del sexo, la contextura física o la edad", afirma la socióloga Consuelo Uribe Mallarino.

Precisamente por estas afirmaciones, el sistema presenta diversas desventajas. Segrega: al clasificar a la gente por la vivienda, ha fragmentado las ciudades en barrios de pobres y de ricos; estigmatiza: ser de estratos bajos se convirtió en un estigma para las personas, que son tratadas según el sitio donde habitan; excluye: personas que viven en estratos medios y altos y necesitan subsidios no reciben ninguna ayuda por vivir en esos sitios; inequidad: personas y familias que han superado problemas siguen recibiendo subsidios debido al sitio donde viven; frena proyectos: muchos proyectos se frenan porque implican subir el estrato, y la gente no quiere pues esto sube las tarifas.

Jorge Iván González, el autor del Informe de Desarrollo Humano de Bogotá, quien también viene trabajando en el estudio, explica que los estratos no necesariamente reflejan la situación real de las personas tomado de El Tiempo

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