Hace 4000 años

Hace aproximadamente 4 600 millones de años, en un lugar de la Vía Láctea se formó el Sistema Solar, que, como sabes, está formado por el Sol y nueve planetas, uno de loscuales es la Tierra, donde habitamos nosotros. A diferencia de otros planetas, en la Tierra no hace demasiado calor ni demasiado frío y en su superficie se encuentran las cantidades necesarias de gases y agua que requieren los seres vivos. Pero esto no siempre fue así. Como ya dijimos, miles de millones de años antes que la Tierra, se formaron las galaxias. En éstas, las estrellas nacen, existen por millones de años y mueren. Muchas de ellas terminan sus ciclos de existencia explotando, por lo que dispersan en el Universo los materiales que las forman, como el oxígeno, el agua, algunos minerales y metales. Posteriormente, debido a la fuerza de gravedad que atrae a las sustancias, se formaron los planetas.

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Sería Arthur Holmes, uno de los más acérrimos detractores de Wegener, quien daría con la clave de cómo se mueven los continentes. El estudio del interior de la Tierra revelaba que sus rocas, por la temperatura que tenían, podían comportarse como un fluido denso, es decir podían tener corrientes convectivas como las de la atmósfera. La discontinuidad de Moho se comportaría como la de latropopausa. Las rocas del manto se comportan como un fluido porque debido a sus altas temperaturas están muy cercanas a su punto de fusión, y por lo tanto tienen un comportamiento plástico.

Las corrientes convectivas ascienden en un punto porque están más calientes que su entorno, al llegar a la discontinuidad de Moho se dispersa horizontalmente enfriándose a medida que se alejan. Cuando están suficientemente frías descienden hasta el núcleo donde se vuelven a dispersar horizontalmente alimentando de nuevo las corrientes ascendentes. En este ciclo, semejante a una cinta sin fin, las corrientes horizontales superiores son las que trasladan sobre sí los continentes.

Si el flujo ascendía en medio de un continente, el calor suplementario era capaz de romperlo y tras ello separarlo, y la brecha se inundaría formando las cuencas oceánicas. Recuperaba así el continente de Pangea.

El único problema era en dónde nacían las corrientes. Con un núcleo terrestre muy pequeño sólo podría haber dos células convectivas, pero con un núcleo grande puede haber muchas y el núcleo de la Tierra es grande, y demás las corrientes convectivas son más activas en el manto superior.

Para entender cómo se forman los volcanes, necesitas saber acerca de las capas dentro de la Tierra. La corteza exterior está formada por dos capas. La capa superior es granito, el cual es roca de color claro con cristales grandes. El nivel inferior es basalto. La roca más común en la Tierra, es una roca negra, muy dura. La corteza terrestre mide aproximadamente 25 millas de grueso debajo de los continentes y 4 millas de grueso bajo los océanos.

2 Debajo de la corteza está el manto. Mientras más nos adentramos en la profundidad de la Tierra, más caliente se vuelve. El manto es donde encontramos roca derretida, llamado magma. Nadie ha estado nunca ahí; ¡no podrían sobrevivir al calor!

3 Debajo del manto está el núcleo de la Tierra. Los científicos creen que está hecho de hierro, un poco derretido y otro poco sólido. No hay forma de saber de seguro. ¡Estaría aún más caliente que el magma en el manto!

Los fenómenos climáticos inician la erosión de los suelos y causan alteraciones en la superficie de sus estratos. En climas secos, el estrato superior de la roca se expande debido al calor del sol y acaba resquebrajándose, ya que si la roca está compuesta por varios minerales, éstos sufren diferentes grados de expansión y la tensión que se genera conduce a su fragmentación. El viento puede arrastrar diversos fragmentos y

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