LA DEMOCRACIA Y EL SISTEMA

LA DEMOCRACIA Y EL SISTEMA

En muchos lugares he escuchado algún comentario, critica o pregunta acerca de la democracia, unos exteriorizan que no existe en nuestro país, algunos comentan que no se aplica en su totalidad y otros simplemente nos sentimos ajenos o alejados de los procesos de aplicación de ella. Actualmente se cree saber mucho de la democracia pero a la vez se sabe que es como transitar en un sendero con niebla, desconoces lo que puedes llegar a encontrar. Como mexicanos tenemos derechos y responsabilidades, en base a esto se dice que la democracia aplica directamente tu libertad, pero ¿será cierto que tenemos libertad? ¿La democracia en verdad se aplica? ¿Se defienden nuestros derechos?  ¿Cuál es el control que ejerce el sistema en nosotros? ¿Lo sucedido con los jóvenes de Ayotzinapa es en verdad un motivo para una revolución? o ¿es culpa del sistema lo sucedido?

Hablar de democracia nos traslada a un sinfín de argumentos o ideas, tanto buenas como malas, pero la realidad es que así  fue  su historia, las etapas positivas y negativas son parte de su construcción. Es importante mencionar que la historia conocida sobre ella ha servido para resaltar aquellos sucesos que interesan y para silenciar o distorsionar aquellos hechos relacionados con los intentos de cambiar el sistema. Vivimos una democracia muy limitada y controlada por grupos dominantes, donde intervienen medios de comunicación, grupos, instituciones específicas y el consumismo, entre otros factores. No debemos conformarnos con la democracia actual porque es claramente insuficiente. Con esto no pretendo ser identificada como alguien que se resiste totalmente al sistema, por el contrario, considero que de todo sistema, nuevo o viejo, se pueden rescatar aspectos buenos. Sin embargo, si el sistema no cambia nosotros tampoco. Para entender de forma concreta y específica qué es la democracia, a continuación, mencionaré su definición.

La democracia es una forma de gobierno en la que los ciudadanos escogen a los gobernantes o dirigentes que los representarán en la conducción del país. Esta elección se hace a través del voto y los elegidos por mayoría deben actuar según lo indique la constitución política, procurando siempre lo mejor para país. Proviene del griego democratia, de demos: pueblo y cratos: autoridad, entonces, se define como la autoridad del pueblo o el poder del pueblo. Sabiendo lo que describe e implica la democracia, me queda claro que nosotros, como pueblo, no tenemos el poder, y en ese caso me atrevería a decir que la democracia no se aplica en nuestro país, ya que el poder se encuentra en manos de unos cuantos. La democracia se basa fundamentalmente en el dialogo, el respeto, en la participación del conjunto de la población en la toma de decisiones y debe buscar el bienestar de la población, situación que creo, no se da en México. Es muy triste saber que en nuestro país la aplicación de la democracia es cada vez menor, y no está de más decir que la actitud de las personas ante ella es de apatía a causa de todo lo que está sucediendo actualmente, la violencia y la corrupción son fuertes motivos para perder la fe en un país que ni ayuda, ni mejora.

Para conocer realmente la situación actual de la democracia en nuestro país es necesario  observar adecuadamente las acciones del sistema, abrir los ojos a la información que nos censuran u ocultan y prestar atención a los contenidos que están proporcionando a los estudiantes en todos los niveles. La democracia no sólo tiene su influencia en el voto de su presidente o representante, también tiene que ver con las reglas que determinan una convivencia política y social ordenada. Se puede decir que se trata de un estilo de vida cuyas bases se encuentran en el respeto a la dignidad humana, a la libertad y a los derechos de todos y cada uno de los miembros. La visión desde una parte u otra me hace pensar en lo mismo, que lamentablemente  lo que, en esencia, es la democracia, no se aplique verdaderamente, la falta de democracia es la madre de todas las causas de los problemas de una sociedad; esta expresión, podemos decir, es el reflejo de lo sucedido con los estudiantes normalistas, su desaparición ha traído muchas especulaciones y el despertar de movimientos dirigidos a pelear o defender nuestros derechos. Los que han tenido ese llamado de conciencia reconociendo e identificando todo lo que nos hace el país, las injusticias, toda la represión ante la libertad de expresión,  han sido los universitarios, ellos han podido ver con más claridad lo que el sistema nos hace y cómo nos perjudica día a día. El país visualiza dichos sucesos como una amenaza, no quiere personas despiertas de pensamiento, quiere títeres que pueda manejar, controlar y usar a su beneficio. El sistema tiene su apoyo y éste, principalmente, son los medios de comunicación, ellos maquillan o cubren acontecimientos importantes para los ciudadanos porque están del lado de los grupos dominantes, están manipulados y controlados por el poder económico. Actualmente, no es difícil expresar públicamente nuestra opinión, los medios aplican la censura. Realmente no todos tenemos derecho a  expresar nuestras ideas abiertamente en condiciones de igualdad. Para muestra, es evidente que al incidente de los estudiantes desaparecidos no se le ha dado el interés necesario, ya que lo que aparece en la televisión es solo lo conveniente para el gobierno. Está claro que lo sucedido daría mucho de qué hablar, pero como siempre, son los medios quienes muestran solo lo conveniente pues dicen poco y lo mismo. Esto podría terminar si tuviéramos la disposición para buscar información distinta, que nos abra los ojos y nos muestre o nos dé a conocer los hechos reales. Aun aunque los medios traten de cubrir información importante el sistema no se da cuenta de que mientras más cosas ocurren, la venda de los ojos se va desvaneciendo. Si deseo conocer la realidad debo evitar ver en exceso los medios oficiales, que solo sirven para conocer ciertos acontecimientos o sucesos, se debe tener prudencia al recibir la información, para llegar a la verdad de las cosas es imprescindible contrastar versiones distintas. Al ver todo esto creo que está de más cuestionarse si estamos en una democracia verdadera, la realidad respecto a ello es que estamos en una democracia falsa, por que se da entender que el ciudadano promedio tiene el poder, que tiene libertad, que es igual, pero siempre sabemos que el ciudadano promedio solo participa con su voto, más allá no tiene ningún poder, la persona es sólo un simple espectador, alguien desinformado que desconoce muchas veces los procesos políticos, alguien a quien no se le permite la libertad de expresión, que no se le permite hacer movimientos para defender situaciones, desde el momento en que esto falla, nos damos cuenta que es una democracia de baja intensidad. Los estudiantes desaparecidos lucharon por esa causa, buscaron que se les respetaran sus derechos y por ese motivo es posible que hayan perdido sus vidas; esta y otras situaciones son muy notorias no solamente en México si no en otros países, donde la mayoría del tiempo son los jóvenes quienes tienen resistencia al sistema, muchos de estos acontecimientos han terminado en desgracias, es tan lamentable que por expresarte puedas exponer tu vida, toda idea debería ser respetada, siempre y cuando se defienda de forma pacífica y respetuosa, la manera de combatir contra dichas ideas debe ser con la fuerza de la razón y no con la razón de la fuerza. Con la excusa de combatir actitudes “no democráticas” se está empezando a reprimir de forma cada vez más desproporcionada movimientos sociales indudablemente democráticos. En conclusión, el pueblo debe ser consciente de que hasta que no tenga el verdadero poder, no podrá aspirar a una vida mejor en justicia, paz  y libertad. Hay que estar informados, abrir bien lo ojos a lo que se está presentando y no pretender que no pasa nada. La democracia es controlada por poderes políticos y económicos cuya finalidad es evitar que el pueblo piense, que no se deje controlar. Lamentablemente ese lavado de cerebro comienza desde nuestra casa, donde se nos inculcan valores, creencias que van dirigidas a servir a los grupos dominantes, el sistema proporciona a la sociedad el consumismo, no dándole tiempo a hacer otra cosa más que casi sobrevivir, entreteniéndolo con actividades intrascendentes y muchas veces innecesarias. La base del control social es el control del pensamiento colectivo. La mejor forma de contrarrestar todo esto es contrarrestar la desinformación, manteniéndose alerta, desconfiado. El pensamiento crítico es el pasaporte al pensamiento libre. El sistema lo hacemos entre todos y por consecuencia nos afecta por igual, por lo tanto nos convierte en responsables de su estructura. Si queremos conseguir un mundo más justo y libre, un mundo en el que todos los seres humanos tengan las mismas posibilidades de sobrevivir y de ser felices, en el que cada individuo sea dueño de su propio destino, un mundo en el que el respeto sea la norma y no la excepción, un mundo en el que la paz sea universal, no basta con declaraciones de buenas intenciones, no es suficiente con desearlo, es necesario además, y sobre todo, luchar por conseguirlo en la práctica, construir formas de convivencia concretas que lo permitan y pasar de los discursos a los hechos. No basta tampoco con actos simbólicos basados en la caridad, los parches, aunque puedan suponer cierto alivio puntual, no solucionan los problemas de fondo. Es necesario combatir las causas del hambre, de la guerra, del paro, de la violencia, de las desigualdades exacerbadas, de las injusticias. Es imprescindible cambiar los cimientos de la sociedad. Los grandes males de la humanidad requieren soluciones globales que ataquen a las raíces de los mismos, no se pueden solucionar con medidas puntuales que apelen a la solidaridad más o menos individual. La Democracia, llevada hasta sus últimas consecuencias, aplicada a todos los ámbitos de la sociedad, puede ser la herramienta de convivencia que nos permita sobrevivir a nuestras peores tendencias.

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