La Contaminacion
esmeralda09812 de Marzo de 2015
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Contaminación
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Calidad del aire
¿Es limpio el aire que respiramos?
Si vives en alguna ciudad es posible que en
ocasiones se te irriten los ojos o la garganta.
También seguramente has escuchado a las
personas mayores comentar que cuando eran
niños se respiraba un aire más limpio y que era
posible ver lugares muy alejados, ya que el aire
era más transparente. Independientemente de
la nostalgia por los tiempos pasados, hoy es una
realidad que la contaminación del aire es un
problema en las grandes ciudades y en las zonas
con actividades industriales, ya que es en estos
lugares donde se liberan grandes cantidades de
contaminantes a la atmósfera. Precisamente son
estos contaminantes los que nos causan molestias
en los ojos, piel y vías respiratorias y forman esas
“brumas” que en la Ciudad de México nos impiden
ver los cerros y volcanes que la rodean.
Pero, ¿cuándo se iniciaron los problemas de
contaminación del aire? Desde sus orígenes el ser
humano ha emitido contaminantes al aire, pero
esto se incrementó de manera dramática a partir
de la Revolución Industrial iniciada en el Reino
Unido a finales del siglo XVII. En esa época, el
trabajo manual fue reemplazado por maquinaria,
básicamente por la introducción de tecnologías
que empleaban el vapor y que hacían posible tener
altos niveles de producción. Todos estos avances
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llegaron a Europa continental y América del Norte
a finales del siglo XIX, y durante el siglo XX, al
resto del mundo. Además de los beneficios de la
Revolución Industrial también se incrementó el
uso de combustibles, tal como el carbón mineral y
el petróleo, indispensables para el funcionamiento
de la nueva maquinaria, y que al consumirse
emitían grandes cantidades de contaminantes a
la atmósfera.
Desde entonces el problema de la contaminación
del aire se ha convertido en una constante
en muchas ciudades industriales de todo el
mundo, lo que ha causado problemas de salud a
la población. Los casos más dramáticos y graves
son la famosa niebla tóxica londinense de 1952,
el deterioro de los bosques europeos por la “lluvia
ácida” en los años cincuenta y sesenta del siglo
XX, y la grave situación de la calidad del aire en
la Ciudad de México, Tokio y Sao Paulo durante
las últimas décadas del siglo anterior. Esto ha
obligado a tomar conciencia de la importancia
de una atmósfera limpia para el bienestar de la
población y del medio ambiente.
RECUADRO
En Londres, capital del Reino Unido, del viernes
5 al martes 9 de diciembre de 1952 murieron
cerca de 4 mil personas al cubrirse la ciudad con
una intensa niebla que se estacionó y atrapó los
contaminantes emitidos por las chimeneas y los
automóviles de la ciudad. A lo largo de esos días,
las concentraciones de partículas suspendidas en
la niebla alcanzaron en algunas zonas 40 veces
los niveles normales, mientras que el bióxido de
azufre (SO2) aumentó su concentración cerca de
7 veces.
La niebla londinense del 52
A partir de esta situación se promulgaron en el
Reino Unido las Leyes del Aire Limpio –en 1956 y
1968- que prohibieron a los residentes de las áreas
urbanas y a los operadores de fábricas el empleo
de combustibles generadores de humos que
pudieran poner de nuevo en riesgo la salud de la
población ante un nuevo fenómeno climatológico
de este tipo.
Concentración de contaminantes
atmosféricos en Londres, 1952
microgramos por metro cúbico
partes por millón
El volcán Popocatépetl, exhalando una nube de ceniza
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¿Cuáles son los contaminantes y
qué efectos tienen?
La contaminación de la atmósfera no sólo tiene
su origen en la industria o nuestros hogares o
carros. Los fenómenos naturales que se producen
en la superficie o en el interior de la Tierra –como
el caso de las erupciones volcánicas, que produce
emisiones de gases, vapores, polvos y aerosoles-,
también contribuyen a la contaminación del
aire (Figura 5.1). Afortunadamente la naturaleza
tiene la capacidad de depurar en cierta medida la
presencia de contaminantes. La lluvia, el viento y
la vegetación pueden remover los contaminantes,
transformarlos o inmovilizarlos, haciendo que
no sean nocivos a los organismos; sin embargo,
es natural que esta capacidad de limpieza
tenga límites, por lo que los problemas reales
de contaminación surgen cuando las emisiones
contaminantes son excesivas y sobrepasan dicha
capacidad.
Los principales contaminantes relacionados
con la calidad del aire son el bióxido de azufre
(SO2), el monóxido de carbono (CO), los óxidos
de nitrógeno (NOx), las partículas suspendidas,
compuestos orgánicos volátiles (COV) y el ozono
(O3). Es probable que hayas escuchado que hace
algunos años el plomo (Pb) también representó un
grave problema en nuestras ciudades, pero debido
a que dicho elemento químico se eliminó de las
gasolinas, su concentración actual en la atmósfera
se encuentra controlada y por debajo de valores
que dañen la salud de la población. Como podrás
observar en la Figura 5.2, los contaminantes
tienen diversos efectos sobre nuestra salud y
pueden afectar en mayor medida a las personas
más vulnerables, es decir, a niños, adultos mayores
y personas con enfermedades respiratorias.
A veces podemos pensar que los efectos de la
contaminación del aire los resentimos solamente
nosotros, pero no es así, también los monumentos
históricos, los edificios y los ecosistemas naturales
pueden sufrir daños. Si has paseado por las calles
del centro de la Ciudad de México o alguna otra
ciudad con problemas de contaminación del
aire, es posible que hayas notado que algunos
monumentos o edificios se ven deteriorados, sus
materiales pueden estar manchados o desgastados
Los géiseres emiten
compuestos de azufre y
vapor de agua a la atmósfera
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Frijol Uva Papa
y esto se debe, además del desgaste natural por
el agua y el viento, a la llamada lluvia ácida que
abordamos en el recuadro de la siguiente página.
También las plantas, animales y otros organismos
resienten los efectos de contaminantes como el
ozono. Los primeros efectos se observaron en
cultivos de uva y en los bosques de pino, pero
actualmente se sabe que afecta a muchas especies
silvestres y de cultivos comerciales como la
cebolla, la sandía, la papa, el frijol, el maíz y el
tabaco, entre otros (Figura 5.3). Además de las
consecuencias directas, el ozono puede generar
que los árboles sean más vulnerables al ataque de
hongos e insectos que los debilitan o matan.
Daños causados por el ozono troposférico en hojas de algunos cultivos
Efectos de los contaminantes en la salud humana
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Ácido de batería
Jugos gástricos
Jugo de limón
Vinagre
Cerveza
Café
Leche
Agua de mar
Agua mineral
Rango normal de la lluvia
Antiácidos estomacales
Amoniaco
Sosa cáustica
Lluvia ácida
Escala de pH
RECUADRO ¿Qué es la lluvia ácida?
Este término suena casi a ciencia ficción pero
no es así. Desafortunadamente, la lluvia ácida
realmente existe y es un término que se ha usado
para describir el proceso por el cual ciertos ácidos se
forman en la atmósfera a partir de contaminantes
y luego se precipitan a la tierra. Los científicos
saben que el dióxido de azufre (SO2) y los óxidos
de nitrógeno (NOx), resultado de la quema de
combustibles fósiles, causan la lluvia ácida. Estas
sustancias, en presencia de agua, oxígeno y otros
compuestos químicos forman ácidos –como el
ácido sulfúrico y el nítrico- que se precipitan a
tierra ya sea acompañados por agua –en el caso
de lluvia, nieve o niebla ácidas- o en forma seca
–es decir, como gases o partículas-. El pH -escala
que mide que tan ácida o básica es una sustanciade
la lluvia normal es de alrededor de 6, mientras
que la lluvia ácida oscila entre 4.0 y 4.5. Para
ilustrar que tan ácida es la lluvia ácida nos puede
ayudar la siguiente figura.
Como imaginarás, la lluvia ácida tiene distintos
efectos en el medio ambiente. Produce daños
directos e indirectos a los ecosistemas, e incluso,
a la salud humana. Cuando no llueve también
es posible que caigan partículas sólidas con
La acidez de la lluvia provoca la
pérdida de fertilidad del suelo.
En plantas provoca la pérdida
de hojas y debilita su tallo.
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moléculas de ácidos adheridas (deposición seca),
lo cual puede obstruir y acidificar los diminutos
poros de las hojas por los que las plantas toman el
aire que necesitan para
...