La Cultura y las Sociedades en Emergencia

Resumen de la lectura

La Cultura y las Sociedades en Emergencia

Autor:Leopoldo Chiappo

La cultura es la morada de hombre ya que el hombre segrega cultura como la araña segrega la interminable sustancia con la que construye su morada.

Las formas culturales reflejan como en un espejo la realidad de la vida humana. Pues el hombre “cuenta” su vida ya sea la música, la religión, los hábitos sociales, etc. La cultura es posible porque el hombre es el único ser capaz de reconocerse a sí mismo; de tener conciencia reflexiva, de generar autoimagen.

La cultura se muestra en dos direcciones opuestas de acuerdo a leas relaciones sociales: la cultura predatoria y la cultura emergente. De la cultura predatoria se instala la dominación ya que estamos paralizados sin darnos cuenta; pues es allí donde se produce la sumisión y se mantiene una falsa vida; porque en la cultura vivimos.

Por lo tanto cuando hablamos de la cultura auténtica es cuando el hombre acciona sin imitar dentro del contexto social y la cultura inauténtica se define por su carácter deformante del ser, es decir por su carácter de “acaparamiento” ya que la clase alta trata de dominar a las sociedades que por decirlo así están en progreso; vale decir sociedades subdesarrolladas.

Cuando hablamos de la sociedad subdesarrollada, pues hay que tener en cuenta los beneficios y los servicios sociales ya que estos no se han extendido para la mayoría; y cuando hablamos de economía podemos decir que existe es pre-industrial y la dependencia externa.

Nuestra tradición cultural es la tradición de los países colonizados ya que nosotros hemos sido “conquistados”. A partir de la conquista se instala la visión dominadora, visión que adquieren los dominados a la fuerza y a la larga, como parte del proceso de alienación económica y cultural. Pues hubo extirpación de idolatrías y se tenía que acondicionarse al estilo de vida del conquistador. Cuando los invasores educaban con el único fin de hacerlo fiel al imperio.

Después de que los españoles nos han dejado esa herencia cultural podemos afirmar que aún no hemos mejorado porque la ignorancia, la mortalidad infantil, hambre crónico, la inseguridad y la multitud marginada son los panes de cada día por lo tanto nos encontramos en una sociedad de emergencia, vale decir en un país subdesarrollado de tercer mundo.

Por lo tanto necesitamos tomar conciencia clara y profunda de los valores propios que puedan orientar nuestra liberación y de darnos cuenta que los jóvenes de hoy no valoran nuestra tradición cultural.

Pero solamente esto se logrará con una buena educación, por consiguiente implica que el maestro actúe con eficaz en esta tarea que tenemos que cambiar.

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