La Gran Piramide

LA GRAN PIRAMIDE

No hay en el mundo monumento más conocido, y sobre el que se hayan vertido teorías tan dispares como sobre la Gran Pirámide de Gizah.

Las obras del hombre siempre han sido concebidas con el propósito de perdurar. De todas ellas, de todas las creaciones del hombre a través de los siglos sólo unas pocas han conseguido ese propósito. Una de estas pocas afortunadas es la misteriosa y extraordinaria Gran Pirámide de Gizah.

Sobre ella ha volado la imaginación de millones de personas, aficionados, investigadores, científicos, paracientíficos, arqueólogos, pseudoarqueólogos y gente de la calle en general. Quizás este sea, con poco margen de duda, el monumento más célebre y sobre el que más tinta y papel se ha gastado, y sobre el que existen más opiniones acerca de su función.

Este monumento, que es el paradigma de los logros del hombre antiguo, unifica por sí misma todos los enigmas, y toda la grandeza del Antiguo Egipto, de un conjunto de hombres, al fin y al cabo, que construyeron un edificio para perdurar, y que con herramientas primitivas y métodos tan primarios como rampas de madera o instrumentos de bronce, como defiende la Arqueología, lo consiguieron.

Un desafio para la mente humana

Perfilándose sobre el horizonte de Gizah la Gran Pirámide justifica con una imagen casi todo lo que un visitante espera de ella: belleza, sortilegio y misterio. No en vano el hombre vive enamorado de esa imagen desde hace milenios, siempre le ha rememorado su historia, sus logros, quizá hasta su propio interior. Pero aparte de esta iconización, la Gran Pirámide presenta su primer desafío, que es mucho más simple que cualquier otro que se pueda formular y cuya respuesta es mucho más compleja y mucho más incierta que las que se pueden realizar acerca de los demás misterios que rodean este monumento.

Esta pregunta es: ¿Cómo podían los antiguos egipcios tallar la piedra, la dura piedra granítica y de diorita con simples herramientas de bronce, alcanzando tal grado de perfección en el trabajo que hoy en día, con herramientas y métodos mucho más perfeccionados costaría alcanzar? ¿y cómo explicar esa perfección, de tallado y de colocación, en ni más ni menos que 2.300.000 bloques de piedra, hasta alcanzar la altura de 146, 61 metros, y con una diferencia de longitud entre lado y lado apenas insignificante, ridícula, y de nuevo, muy difícil de reproducir hoy en día?

Ante estas preguntas, que surgen al examinar las dimensiones y peculiares dadas por Flinders Petrie en su obra Pirámides y templos de Gizah, los arqueólogos no dan una explicación satisfactoria, se agarran a los textos de Heródoto en el que los sacerdotes egipcios le explican al historiador heleno como se construyeron estos monumentos, y apenas sí han variado mucho su versión desde hace casi doscientos años.

La arqueología también sostiene que la Gran Pirámide fue realizada en tiempos del faraón Juffu, llamado Keops por Herodoto en sus textos, que reinó durante la IV dinastía en los años 2579 a 2556 a.C. También explica la arqueología que su función fue ser el lugar de enterramiento, o real, o simbólico, de este faraón.

Para ello, se basan en el hallazgo de un sarcófago de piedra, abierto y completamente vacío hallado en la llamada Cámara del Rey, en el hallazgo de una barca real en un subterráneo cerca de la pirámide en 1956, en los textos del ya citado Herodoto, y de un cartucho con el nombre de este faraón que aparece dibujado con tiza sobre un contrafuerte.

Estos datos y la estela llamada del Inventario que encontró Mariette a los pies de la pirámide, en el que se vincula el nombre de Keops con la pirámide es casi todo en lo que la arqueología se sostiene para defender su afirmación.

Sin embargo, dicha estela puede constituir un arma de doble filo ya que en su contenido afirma que Keops "encontró" una pirámide consagrada a Isis, y un templo con la esfinge, lo que si se utiliza para justificar la antigüedad de la pirámide, debería utilizarse para hacer lo mismo con las múltiples interpretaciones que el resto del texto puede originar.

Una multitud de teorías y ensoñaciones

1. Para J.J Benítez, y otros investigadores más vinculados a la ufología, la Gran Pirámide fue construida mucho antes de lo que la Arqueología afirma y su construcción fue inspirada y quizás asistida por seres extraterrestres

2. Robert Bauval en su libro El misterio de Orión manifiesta que las tres pirámides de Gizah fueron construidas en correlación con la constelación de Orión en una disposición que se debió producir en el cielo aldrededor del año 12000 a.c.

3. Según algunos investigadores la pirámide pudo ser un templo donde los faraones realizaban la fiesta del jubileo o fiesta sed, donde los faraones renovaban su energía y su poder.

4. El Dr. Fernando Jiménez del Oso,.. Hoy en día, con la tecnología y los medios que disponemos, no seriamos capaces de construir semejante monumento, siendo la Gran Pirámide todavía un desafío para nuestra soberbia civilización y puede ser una puerta hacia nuestro verdadero pasado.

Sea cual sea su antigüedad, y su auténtica función, la Gran Pirámide seguirá siendo un símbolo y un icono, de esplendor y de misterio, para las generaciones venideras, igual que lo ha sido durante cinco mil años.

La Gran Pirámide de Giza, Egipto, es uno de los grandes misterios de la Humanidad. Acompañada de otras dos que no hacen sino acrecentar el enorme enigma, es el monumento más impresionante jamás construido y eso que ya tiene casi 5.000 años... pero esa edad es lo oficial, como su construcción con técnicas y obreros que dan risa en cuanto se conocen las enormes dificultades arquitectónicas que supone y la exacta orientación y disposición que posee junto a sus compañeras. Hasta su nombre oficial, Pirámide de Keops, por ser este faraón el que supuestamente mandó hacerla, es simple especulación de la egiptología oficial basada en unas muy débiles pruebas.

El Dr. Fernando Jiménez del Oso,.. Hoy en día, con la tecnología y los medios que disponemos, no seriamos capaces de construir semejante monumento, siendo la Gran Pirámide todavía un desafío para nuestra soberbia civilización y puede ser una puerta hacia nuestro verdadero pasado.

LA PIRAMIDE

Fue construida con unos 2.300.000 bloques de piedra, cuyo peso medio es de dos toneladas y media por bloque, aunque algunos de ellos llegan a pesar hasta sesenta toneladas. Originalmente estaba recubierta por unos 27.000 bloques de piedra caliza blanca, pulidos, de varias toneladas cada uno. Mantuvo este aspecto hasta principios del siglo XIV, cuando un terremoto desprendió parte del revestimiento calizo. Posteriormente, los turcos otomanos utilizaron dicho revestimiento para la construcción de diversas edificaciones en El Cairo.

Gran pirámide de Guiza.

La pirámide se compone de tres cámaras principales, dos situadas en el interior de la pirámide, actualmente denominadas Cámara del rey y Cámara de la reina, y una en el subsuelo, la Cámara subterránea.

A las cámaras se accedía desde el lado norte, por un pasaje descendente, obstruido al final por grandes bloques de granito, que comunicaba con dos pasadizos, uno ascendente, que desemboca en la Gran galería, y otro descendente, que llega hasta la Cámara subterránea.

La Gran galería

La Gran galería es un gran pasaje ascendente de unos 47 metros de longitud y ocho metros de altura. Las paredes de la Gran galería son planas hasta una altura de dos metros y, a partir de ahí, escalonadas, conformando una falsa bóveda por aproximación de las hiladas.

La Cámara del rey

La Cámara del rey está conformada por losas de granito y es de planta rectangular, paredes y techo lisos, sin decoración, y únicamente contiene un sarcófago vacío de granito, sin inscripciones, depositado allí durante la construcción de la pirámide, puesto que es más ancho que los pasadizos; sobre el techo se encuentran las llamadas cámaras de descarga, y la más alta dispone su techo con grandes bloques inclinados, a dos aguas, para desviar la gran presión que ejercen los bloques superiores de la pirámide, evitando que todo el peso descargue sobre el techo de la cámara real. Se accede a ella por un pasaje horizontal llamado antecámara que parte del extremo superior de la Gran galería.

La Cámara de la reina

La Cámara de la reina, denominada así por los árabes, aunque según Mark Lehner3 y la gran mayoría de los egiptólogos,4 no se destinó a la esposa del rey sino a una estatua Ka del mismo5 (Serdab, habitáculo destinado a contener la representación espiritual del difunto: estatua Ka), está situada casi en el eje de la pirámide; tiene acceso mediante un pasaje horizontal, que comunica con la zona inferior de la Gran galería, inicialmente oculto por las losas del pavimento

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