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La Pequeña Princesa


Enviado por   •  29 de Agosto de 2012  •  2.981 Palabras (12 Páginas)  •  368 Visitas

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En un reino lejano ubicado entre valles y montañas había un rey que tenia una hermosa hija. La esposa del rey había muerto al nacer la niña y esto hacia que el rey se sintiese muy triste. El tiempo pasaba y la pequeña princesa crecía y cada día se ponía más y más bella. Un día la princesa le preguntó a su padre. - ¿Padre, y cómo era mi madre? Y él le respondió….era una mujer muy bella como tu y muy buena también. ¿Y podrías encontrar otra mujer así como ella para que sea mi madre? El rey respondió…por supuesto que si, lo que tu me pidas hija mía. Así el rey quedó pensando donde encontraría una mujer tan bella y buena como su esposa y al final del día tuvo una idea…enviaría emisarios a los reinos vecinos para informar que necesitaba encontrar una esposa para que sea su reina. Los emisarios del rey partieron a cumplir sus órdenes y así los otros reinos se interesaron en la propuesta del rey. En uno de los reinos vecinos existía una bruja malvada y ambiciosa que cuando supo de esto pensó…yo seré la nueva reina y ese reino será solamente mío. Así los días pasaron y el rey anunció que daría un baile para que las princesas de los otros reinos asistan y así ese día escoger a su nueva esposa.

Cuando el día del baile llegó, varias princesas estuvieron allí, ansiosas de ser elegidas por el rey y así convertirse en la nueva reina. Como era de esperarse la bruja también estuvo ese día en el baile y al momento de saludar al rey le puso un encantamiento para que él la elija a ella y no a otra.

Una vez bajo el hechizo de la bruja, el rey anunció su matrimonio con la hechicera sin saber la clase de mujer que era. El tiempo pasaba y la hija del rey también crecía. Un día mientras montaba su caballo por los prados del palacio, se encontró con un joven campesino quien la saludo muy amablemente.

Ambos jóvenes quedaron impresionados el uno con el otro. El joven quedó maravillado con la belleza de la joven princesa y ella estaba encantada con la fuerza e inteligencia del joven. Estuvieron conversando por horas hasta que la joven princesa se dio cuenta de lo tarde que era y se despidió. El joven le pidió acompañarla hasta el palacio a lo cual la joven princesa accedió. La caminata fue algo larga y a pesar de estar con su caballo la princesa prefirió caminar junto al joven. Una vez en el palacio el joven le preguntó a la princesa si la podía ver nuevamente y ella le dijo que también le gustaría verlo otra vez.

Los jóvenes quedaron en encontrarse al día siguiente en el mismo lugar donde se conocieron. El día siguiente llegó y los jóvenes se encontraron como habían quedado. En el prado ambos conversaban sobre las cosas que les gustaba hacer y se dieron cuenta de lo mucho que tenían en común. Cuando la tarde llegó, el joven acompañó a la princesa nuevamente al palacio y nuevamente quedaron en verse al día siguiente.

Esta rutina se repetía día a día sin que los jóvenes se aburran. Así un día de esos, el joven campesino confesó a la princesa que estaba enamorado de ella y que la quería. ¿Te gustaría ser mi esposa algún día? Le preguntó a la joven princesa y ella respondió…si, me gustaría. Ambos jóvenes estaban enamorados y su amor no les hacia ver las diferencias que existían entre ellos. Un día en que la joven princesa, mientras almorzaba con su padre, y su madrastra, se enteró de algo que el destino tenía reservado para ella como pasaba en cualquier reino en esos tiempos.

Hija mía -le dijo su padre- en un par de años ya serás mayor de edad y tienes que tener un esposo y una familia, además como futura reina debes asegurar

un heredero al trono. Yo ya soy mayor y tu eres mi única heredera es tu deber seguir con nuestro linaje. Cuando la reina escuchó esto del rey se enfureció.

Ella estaba segura que a la muerte del rey ella seria la única reina en el palacio pero cuando supo que la heredera al trono era la princesa empezó a pensar en un plan para eliminarla. Al igual que la princesa, en los otros reinos también había jóvenes príncipes que estaban en edad de casarse, entonces la bruja pensó que si casaba a la princesa con uno de ellos esta se iría a su nuevo reino dejándole el camino libre para que ella se convierta en reina.

Mandó a varios emisarios a los reinos vecinos ofreciendo la mano de su hijastra. Varios reyes estaban interesados, pero entre uno de ellos había uno en especial pues era también un hechicero que tenia planes malvados al igual que la reina. Un día la reina y el hechicero se reunieron en secreto y acordaron unir en matrimonio a los jóvenes. La reina comentó sus planes con el rey, quien le respondió que estaba bien pero que él dejaría que la princesa escoja a su futuro esposo.

Esto enfureció a la reina quien se retiró a una habitación secreta que tenia en el palacio para preparar una poción mágica para dársela al rey y que éste haga lo que ella quisiera. Una vez que tuvo lista la poción. Se la dio a beber al rey y este cayó bajo su embrujo. En la noche mientras cenaban la reina le dijo al rey, esposo mío, ¿por qué no anuncias de una vez a la princesa lo que has decidido? ¿De qué habla vuestra esposa, padre mío? Preguntó la princesa.

- Hija mía, te comunico que ya he elegido un esposo para ti. Se casarán y ambos viajaran a su reino donde vivirás con el y tendrás tu familia y acá mi esposa cuando yo muera será la única reina. Pero padre mío, pensé que yo elegiría a mi esposo, yo quiero casarme por amor y no por conveniencia. Además ya hay alguien en mi vida, es un buen hombre, me ama y yo lo amo y es con él con quien me quiero casar. ¿Y quién es ese príncipe? Preguntó la reina. No es ningún príncipe, pero lo importante es que es bueno y me hace muy feliz. Ya lo conozco hace varios años y quiero que el sea mi esposo. Por favor, padre apóyame. ¡Jamás! Dijo la reina. Te casarás con la persona que ya elegí para ti y las cosas se harán como yo diga. Dijo la reina. La princesa, triste empezó a llorar y salió corriendo del salón donde estaban.

Cogió su caballo y cabalgo hasta unos acantilados donde a veces salía a pasear con el joven campesino. Una vez ahí, la princesa empezó a caminar por la orilla del mar, desconsolada por lo que le hacían su padre y la reina empezó a hablar en voz alta. Mar, dijo si escuchas lo que te digo, dime ¿Qué puedo hacer? Entonces se escuchó un gemido que se hacia cada vez mas fuerte. De pronto la princesa escuchó una voz que desde lo lejos la llamaba. Princesa, camina y entra al mar. No tengas miedo, estoy aquí para ayudarte. La princesa obedeció a la voz que le llamaba y entro al mar.

Una vez ahí, sintió algo que se movía cerca de ella. A ver con atención se dio cuenta que era un delfín. El delfín sacó su cabeza del agua y le dijo: joven princesa, yo puedo ayudarte.

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