La crisis del fútbol venezolano

LA CRISIS DEL FÚTBOL NACIONAL

Venezuela es un país que vive y ama los deportes, pero en especial el béisbol, como si estuviera en su adn. Respiramos este afable ambiente deportivo. Pero existe un deporte que ha venido de menos a más, cosechando éxitos a lo largo de los años, la única que hace unir a todo un país cuando se encuentra dividida por la política, donde un grito de “Gol” nos une como hermanos, una pasión que tiene color “Vinotinto”. La Vinotinto pasó de ser la “Cenicienta de Suramérica” a ser una de las selecciones más importantes en el continente, con una única deuda pendiente que es clasificar a un mundial. Esta selección supera a esa Venezuela que dirigía el Dr. Richard Páez en el año 2002, pero ese no es el caso, la generación de futbolistas venezolanos que juegan en las mejores ligas del mundo surgieron fue por garra, corazón y entrega hacia este lindo deporte, pero olvidamos una cosa, para ellos llegar tan lejos tenían que pertenecer a un club de nuestro Fútbol Nacional.  Ahora, bien es cierto que nuestra liga no es la más competitiva de nuestro continente, pero aquellos jugadores que dejan el nombre de su país en alto hacen hablar muy bien de la base que tienen de su Fútbol Nacional, pero de qué vale tener una buena base si nuestro fútbol no crece.

El Fútbol Nacional vive una crisis que se hace más grave con el pasar del tiempo, pues en los últimos años se ha notado la corrupción por parte de la Federación Venezolana de Fútbol (FVF), corrupción de un presidente que duró más de 20 años al poder y que como logro destacado fue hacer un Centro de Alto rendimiento que tardó más de 10 años en construirse. Pero como dice el dicho “No hay mal que dure mil años”. Se hizo justicia cuando la Federal Bureau of Investigation ( la Oficina Federal de Investigación) mejor conocido por sus siglas en inglés, FBI, lo encerró a él y a otros dirigentes de la Federación Internacional de Fútbol Asociados( FIFA). Sin embargo, después de lo sucedido, el sucesor del cargo fue el VicePresidente Laureano González a partir del 2014. Nadie se hubiese imaginado que con él empeorarían las cosas, las mentiras que decía públicamente a los medios de comunicación, culpando a los patrocinadores que “nunca” le pagaban a la FVF. Tales declaraciones trajeron mucha polémica. Pero aunque hizo que hubiera mucha controversia no podía ocultar el grave estado de las canchas, la deuda a los clubes, y la paga que deben tener los jugadores de la selección al ser convocados. No esta demás decir que los jugadores no sentían apoyo por parte de su Federación, hablaba mal de sus jugadores haciendo que en los vestuarios se sintiera la tensión e incomodidad de los atletas. Cómo los clubes pueden jugar en canchas de mal estado sabiendo que están poniendo en peligro a sus deportistas. Pareciera que esta crisis no podrán resolverla hasta que no se logre revocar esta corrupción que le hace mal a nuestro querido Fútbol Nacional.

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