ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

MODELOS DE INTEGRACIÓN EN UN MUNDO GLOBALIZADO


Enviado por   •  19 de Septiembre de 2014  •  2.477 Palabras (10 Páginas)  •  199 Visitas

Página 1 de 10

INTRODUCCIÓN

En las últimos años asistimos a un conjunto de transformaciones económicas sociales y culturales, cuya vertiginosidad y complejidad no admite precedente y nuestro hemisferio no se encuentra ajeno a ello. Caen rápidamente todo tipo de muros y barreras entre las naciones, al mismo tiempo que se amplía la brecha en el nivel de desarrollo humano al que acceden los distintos pueblos. La Globalización como proceso es una realidad del mundo de hoy, un hecho ineludible que repercute en la vida de todas las personas y promete llegar con más fuerza, por lo que provoca muchas reacciones, controversias y debates. El tiempo ha transcurrido, el problema se ha agravado y el nuevo modelo de desarrollo basado en: la apertura de mercados, la integración económica, la búsqueda de competitividad y la racionalización del papel del Estado; ha constituido más que una opción, una necesidad para la mayoría de los países envías de desarrollo. La Globalización, ha dado pie a que prácticamente todas las sociedades y Estados del planeta hayan sido afectados aceleradamente por una serie de transformaciones económicas, políticas y sociales, dando lugar a la configuración actual de un solo mundo como un todo en esencia. En este escenario la gran mayoría de intelectuales, dirigentes, políticos y funcionarios gubernamentales vuelven su atención a los planteamientos y promesas de la globalización.

EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LAS DISTINTAS FORMAS DE INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA.

La Historia de la Integración económica latinoamericana: de la sustitución de importaciones al modelo neoliberal. El pensamiento de la integración latinoamericana fue fermentado por las ideas ilustradas desde fines del siglo XVIII, pero ante todo, por la necesidad de la independencia política. La historia de América Latina y el Caribe demuestran que se han realizado varios intentos integracionistas en la región desde la época en que los próceres de la independencia latinoamericana, Bolívar y Martí luchaban por ella. La idea de la integración en la región viene sustentada por favorables puntos en común que se presentan entre los distintos países latinoamericanos por compartir similitudes en cuanto al idioma, en cuanto a la estructura socio económica relativamente común que presentan producto de ser colonias de España y Portugal, así como por la posterior acción imperialista que dejó relaciones de dependencia y explotación similares. Sin embargo en el periodo posterior a la segunda mitad del siglo XX esta problemática alcanza real protagonismo, a tenor con las nuevas exigencias y necesidades de la vida económica, social y política del mundo y la región, así como de la aparición y desarrollo de un sistema de instituciones supranacionales en cuyo centro se encuentra la Organización de Naciones Unidas (ONU). En ese contexto, la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) se convirtió no sólo en el principal centro generador de teorías sobre el desarrollo de la región, sino además en plataforma para la implementación de políticas económicas encaminadas al mismo fin.

LOS MODELOS DE INTEGRACIÓN EN UN MUNDO GLOBALIZADO

Los procesos de integración y exclusión social están estrechamente ligados a lo que suceda en el plano del desarrollo. Cuando las sociedades pasan por etapas de crecimiento, predominan los procesos de integración, la exclusión disminuye, aumentan las oportunidades para todos y se aceleran las dinámicas de movilidad social ascendente. Al contrario, cuando las sociedades viven procesos de estancamiento, se produce un aumento de la exclusión y la movilidad social sede tiene, iniciándose un proceso descendente.

Los diferentes modelos históricos de desarrollo han producido diferentes modelos de integración social. Nosotros venimos de una sociedad en la que la integración por la uniformidad fue una característica central. Esto se manifestó tanto en las orientaciones que dominaron el modo de desarrollo, como en las formas de producir. La noción de desarrollo ha sido objeto durante los últimos cuarenta años de innumerables reflexiones, estudios, precisiones, críticas. Pero aun teniendo en cuenta estos aportes, la noción sigue fuertemente marcada por su origen.

Los que propusieron la utilización de la noción de desarrollo, se consideraron a sí mismo como «desarrollados», es decir como perteneciendo a sociedades que habían alcanzado la madurez. Era necesario entonces ex- tender de manera uniforme los beneficios de la madurez a todo el planeta. El sociólogo egipcio Anouar Abdel-Malek expresa esto con gran elocuencia: «Esta concepción histórica, comprendiendo sus variantes dialécticas, percibe naturalmente la historia a través de la Weltanschaung común a Europa, al Occidente. Una ascensión, un proceso de advenimiento, un avance ineluctable que tiene como meta el progreso, la perfección, la realización del proyecto de civilización de Occidente, desde su renacimiento: el hombre verdadero demiurgo, dueño de sí mismo, de la naturaleza y del universo, capaz, gracias al sometimiento de los recursos que lo rodean, de realizar un crecimiento exponencial de la producción, del con- sumo, de los placeres de la vida, hacia un horizonte sin límites, no cerrado. De alguna manera, la uniformidad de un modelo sigue invadiendo nuestras formas de actuar.

Sigue pesando la forma de producción industrial basada en productos concebidos para ser consumidos por grandes masas, que tendieron a uniformizar el consumo. Esta forma de producir vivió y se desarrolló con pocos sobresaltos hasta la década del setenta. Todavía en Europa se hablado los treinta gloriosos años del crecimiento que van de 1945 a 1975. Esta formada producir se caracterizó por La construcción uniforme de grandes plantas, la concentración masificarte de los hombres alrededor de las máquinas, la descomposición despersonalizante del acto de producción, la destrucción de la biodiversidad en nombre de una forma de crecimiento única. Cuando nos referimos a la integración y a la exclusión, no podemos olvidar esta herencia. Sin duda este modelo uniformizante constituyó un modelo de integración de nivel planetario. En el curso del siglo, casi todas las naciones se fueron incorporando des- de distintas posiciones a ese modelo. El progreso apareció como un proceso sin límites, fuertemente atractivo, nadie podía quedar albarde del camino.

FRACASO DEL MODELO INTEGRADOR EN UN CONTEXTO IMPERIAL Y NEOLIBERAL.

Al concluir el año 2002 cabe pasar un ligero balance respecto al desastre global y nacional que ha traído aparejado el neoliberalismo con sus fórmulas de privatización y la eliminación

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (16 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com