ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Mapa Mental


Enviado por   •  26 de Agosto de 2011  •  1.395 Palabras (6 Páginas)  •  1.383 Visitas

Página 1 de 6

ENSAYO:

TEMA ETICA Y DOCENCIA

LA ETICA EN LA ENSEÑANZA DE LA PRACTICA MEDICA

Introducción

El marco para la buena enseñanza supone que los profesionales que se desempeñan en las aulas, antes que nada, son educadores comprometidos con la formación de sus estudiantes. Supone que para lograrla, se involucran como personas en la tarea, con todas sus capacidades y sus valores. De otra manera, no se lograría la interrelación empática con sus alumnos, que hace insustituible la tarea docente. Junto al orden médico se desarrolla la conciencia y la autoridad morales de la medicina; el nacimiento de la profesión es también el de la deontología y la aparición terminológica y conceptual de la "ética médica".

Desarrollo

Debemos reconocer la complejidad de los procesos de enseñanza y aprendizaje y los variados contextos culturales en que éstos ocurren, tomando en cuenta las necesidades para el desarrollo adecuado de conocimientos y competencias por parte de los docentes, tanto en materias a ser aprendidas como en estrategias para enseñarlas; la generación de ambientes propicios para el aprendizaje de todos sus alumnos; como la responsabilidad de los docentes sobre el mejoramiento de los logros estudiantiles.

La educación es uno de los ámbitos que puede contribuir a través de una formación ética, al desarrollo de una formación moral autónoma, con el objeto que a través de ella el ser humano pueda racionalizar sus opciones y no aceptar imposiciones argumentando sus propias razones, escuchando y buscando consensos racionales así como proyectos comunes que se basen en los principios básicos de convivencia.

La dimensión moral es inherente a la práctica de las profesiones sanitarias. Una de las actividades casi inseparables de la propia actividad profesional del médico es la contribución al aprendizaje de otros médicos en las distintas fases de su formación: estudiantes de medicina, especialización médica, formación continuada de otros compañeros, etc. Es importante la preocupación por la reflexión y mejora de la moralidad de las acciones profesionales de los médicos, dando muestra de ello el aumento de la literatura que hace referencia a la ética médica o a la bioética, no sólo en las revistas especializadas en este campo, sino también en las revistas generales de difusión de conocimientos científicos médicos o las específicas de las distintas especialidades médico-quirúrgicas. Existen tres dimensiones que se imbrican en la práctica de la medicina: la asistencia, la investigación y la docencia; ésta última es la que ha permanecido más al margen de la preocupación por su dimensión ética. Sin embargo esta dimensión profesional también se ha visto inmersa en los cambios que hemos referido como origen de los conflictos bioéticos, y por tanto han surgido también los problemas morales. Además esta actividad se ha visto sometida a una reflexión, no sólo para la adaptación de la formación a los rápidos cambios profesionales, sino para adaptarse a nuevos conceptos pedagógicos. De una forma esquemática este último punto podríamos resumirlo en el paso de una enseñanza centrada en el docente a un aprendizaje centrado en el alumno (en este caso el estudiante de medicina o el residente).

LA PRACTICA DOCENTE ¿ES INHERENTE A NUESTRA ACTIVIDAD PROFESIONAL?

El compromiso con la formación de otros médicos, con las limitaciones y restricciones marcadas por la época para mantener controlado el acceso a la profesión, con claro corporativismo, está ligado al mismo acto de compromiso necesario para empezar a ejercer la profesión. Otra argumentación para responder a la pregunta la encontramos en el mismo significado de la palabra doctor ("docere": enseñar). Creo que la obligación de contribuir a formar a otros como médicos y a médicos como especialistas es inherente al ejercicio de nuestra profesión. Como dicen Stone y cols., "la identidad del médico contiene implícitamente la identidad del maestro" (1).

En el caso de los residentes, la responsabilidad va desde los tutores, máximos responsables de la formación especializada, a los médicos responsables de las rotaciones u otros médicos que coinciden en una "oportunidad docente" puntual con el residente. Aunque no todos participen en la evaluación final o sumativa, todos deberían participar en mayor o menor grado en la evaluación formativa. Uno de los problemas del actual sistema de formación de residentes es

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (8.8 Kb)  
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com