Noche Triste

NOCHE TRISTE

Zarpamos el 5 de marzo de 1520 con diecinueve embarcaciones, mil cuatrocientos hombres, ochenta caballos y veinte piezas de artillería en una expedición organizada por el entonces gobernador de cuba Diego de Velázquez para la captura de Hernán Cortes a cargo de Pánfilo Narváez debido a sus insubordinaciones. Arribamos a san Juan de Ulúa con una pequeña minoría debido a una tormenta que destruyo un navío, en este lugar nos reabastecimos para seguir el rastro de Cortes los tlaxcaltecas supuestos aliados de Hernán Cortes nos indicaron el camino para llegar hacia el algunos hombres de los tlaxcaltecas se nos unieron para guiarnos atreves de los caminos para llegar a la misteriosa ciudad conocida como la ciudad de los dioses Tenochtitlán. Pánfilo decidió esperar en Cempoal la llegada de noticias sobre cortes es por eso que envió algunos mensajeros pero salimos asombrados pues con una rápida y certera maniobra cortes nos había rodeado y estábamos sometidos, pidió que nos uniéramos a él y nos hablo de las grandes riquezas que nos esperaban así emprendimos una marcha a Tenochtitlán la llegada fue muy complicada y tardada tras semanas de larga y agonizante marcha debido al extenuante calor logramos vislumbra la majestuosidad de la ciudad, la vista desde el monte antes de llegar al valle de Tenochtitlán era majestuosa había validó cada gota de sudor se podía observar el majestuoso centro de la ciudad con sus 4 avenidas cada una apuntando hacia los puntos cardinales. A nuestra llegada recibimos una inesperada noticia Pedro de Alvarado uno de los comandantes que cortes había dejado a su mando mientras viajaba a cempoal había ordenado la matanza de cientos de mexicas desarmados que realizaban una ceremonia a uno de sus dioses por que temía una sublevación lo cual provoco que el pueblo se volcara en rabia. Mientras Hernán Cortes solucionaba el problema los demás caminábamos por el centro de la ciudad lo que veían mis ojos era indescriptible con palabras ni los más profesionales artistas pudieron alguna vez imaginado lo que veía.

Todo el ejército estaba agrupado en el palacio real donde a las pocas horas del suceso de Alvarado millares de indígenas empezaron a congregarse a las cercanías del palacio armados con piedras y palos pedían que abandonáramos las ciudad al ver esto cortes mando llamar a Cuauhtémoc para que calmara a la turba pero este resulto apedreado debido a esto Cortes llamo a un consejo de guerra inmediato junto con el mal herido de Cuauhtémoc tras varias horas de discusión resolvieron abandonar la ciudad pero como era necesario sacar el oro que teníamos, mediante algunos espías que lograron burlar el sitio del palacio nos enteramos de que los aztecas habían quitado los pasos elevado de las calzadas así que nuestra única manera de Salí de la ciudad era por medio del agua. Por este motivo

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