Nutrición y Enfermedades cardiovasculares y Alimentación en la discapacidad

Nutrición y Enfermedades cardiovasculares.

Se ha calculado que de cada quince personas una tiene algún tipo de trastorno cardiaco o circulatorio. El 90% de las personas con estos problemas tienen cardiopatía reumática, cardiopatía hipertensiva o coronariopatía. La desnutrición afecta al corazón en tal extensión que el sujeto puede mostrar signos y síntomas de cardiopatía.
El principal objetivo en el cuidado del paciente cardiaco, es el reposo. Los objetivos del manejo dietético de estos pacientes son:

• Descanso máximo para el corazón.
• Prevenir o eliminar el edema.
• Mantener una buena nutrición.
• Aceptación del problema dietético por el paciente.

Hay 4 razones por las cuales el paciente cardiaco no debe ser obeso:

1. El corazón tiene que trabajar más duro ya que el organismo debe mover el peso extra.
2. Los depósitos de grasa en el miocardio reducen la eficiencia de este músculo.
3. La grasa abdominal interfiere en el movimiento del diafragma y, por lo tanto, en los movimientos cardiacos. La respiración es más difícil y la oxigenación sanguínea más deficiente.
4. A menudo la arteriosclerosis sigue a la obesidad; Es más difícil para el corazón impulsar la sangre a través de los vasos estrechados por la arteriosclerosis.

La terapéutica dietética para todos los tipos de trastornos cardiovasculares sigue estas 4 reglas sencillas:

• Dar al enfermo solo la cantidad de alimento que en realidad necesita. El paciente no debe comer en exceso porque puede soportar una dieta baja en calorías.
• Planear el menú utilizando aquellos alimentos que son más fáciles de digerir.
• Restringir los estimulantes como té, café, cocoa.
• Limitar el sodio; si hay edema, la ingestión de sodio debe ser muy restringida.

Es posible que el paciente cardiaco necesite aceptar nuevos alimentos y evitar otros que normalmente comía.
Los trastornos cardiacos pueden ser agudos o crónicos; Las cardiopatías agudas pueden ser causadas por una inflamación del revestimiento del miocardio (endocarditis) o por la pérdida de la función de los músculos debido a carencias de estímulo (insuficiencia cardiaca)
Las grasas en la alimentación del cardiaco deben ser de fácil digestión. Tanto las grasas como los carbohidratos deben reducirse cuando es necesario para limitar el número total de calorías en la dieta.

DIETA BAJO EN SODIO.
A menudo los pacientes cardiacos tienen edema o retención de lípidos debido a que no pueden manejar normalmente al sodio en su organismo. La restricción en la cantidad de sodio dependerá del grado del edema.

Se recomienda una alimentación naturalmente rica en sodio, los cuales son:

-Leche.                                     -Carne.

-Queso.                                    -Aves del corral.

-Huevo.                                    -Betabeles.

-Carne.                                     -Zanahorias.

-Pescados.                               -Espinacas.

Una dieta levemente restringida en sodio limita su ingestión a 1-2 gramos al día.

Una dieta moderada restringida en sodio, lo limita a un gramo por día; El paciente necesita recibir todos los alimentos preparados sin sal y tomará pan sin contenido de sodio.

La dieta baja en sodio tiene menos sabor y es muy difícil lograr que el enfermos la acepte; Los sustitutos para la sal sólo deben administrarse por orden del médico, ya que la mayoría son reales de potasio y de amonio que pueden ser nocivas para enfermos con trastorno renal o hepático.

DIETA KARELL.

El enfermo con insuficiencia cardiaca recibe la dieta Karell, esta dieta consiste de 800 ml de leche por día en cuatro raciones iguales; La dieta proporciona sólo 600 calorías y 1 gramo de sal de día; Es una alimentación muy deficiente y puede prescribirse sólo por 4-7 días continuos, Se administra leche porque es más fácil de digerir y tiene proteínas completas.

HIPERLIPIDEMIA.

Es una condición en la cual hay un exceso de lípidos (grasas) en la sangre, Las grasas se encuentran en formas muy diversas en la sangre. Algunas están en el suero como triglicéridos, otras se combinan con proteínas como lipoproteínas; Cuando el contenido lipídico de la sangre excede de la cantidad normal, aumenta el riesgo de problemas cardiovasculares. Las concentraciones de colesterol sanguíneo son altas y se depositan en placas en las paredes de los vasos sanguíneos.

La hiperlipidemia se produce cuando la persona ingiere una dieta rica en grasas (parcialmente rica en grasas saturadas), cuando toma habitualmente un exceso de alcohol o cuando no hace suficiente ejercicio.

ARTERIOSCLEROSIS.
Conocida también como aterosclerosis y la hipertensión  por lo general se encuentra juntas, aunque la hipertensión tenga su origen en otras causas; se caracteriza por un estrechamiento del lumen de los vasos sanguíneos y por la pérdida de elasticidad de sus paredes. El corazón debe trabajar más duro para impulsar la sangre a través de ellos; de este modo la presión sanguínea se eleva.

Aun cuando se desconoce la causa precisa de la arteriosclerosis, los factores siguientes parecen predisponer esa condición:
1.- Herencia.
2.- Una dieta rica en grasas, especialmente grasas saturadas.
3.- Concentraciones altas de colesterol en la sangre.
4.- Las hormonas sexuales. (Los estudios indican que las hormonas femeninas ofrecen protección contra la arteriosclerosis).
5.- Fumar en exceso.
6.- Obesidad.
7.- Ciertas enfermedades como la diabetes.

HIPERTENSION.
Muchos pacientes hipertensos tienen sobre peso y se les puede administrar una dieta baja en calorías; El sodio produce retención de líquidos y por lo tanto eleva la presión sanguínea; La urea, producto del metabolismo de las proteínas debe ser excretada por los riñones, los cuales a menudo están efectados por la arteriosclerosis; Además de los alimentos antihipertensivos, el médico puede prescribir agentes diuréticos para reducir el volumen sanguíneo y, así, la presión. Si hay deficiencia de potasio, se estimulará al paciente a incluir en su dieta diaria alimentos ricos en potasio.

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