Pedagogia De La Ternura

PEDAGOGIA DE LA TERNURA

La pedagogía de la ternura es un estilo de ser docente tanto en el aula como fuera de ella, promueve el aprendizaje significativo necesario para vivir. No se puede ser educador si no tiene fe en lo que se le va impartir al educando. En muchas ocasiones los docentes juegan un papel paternal con los alumnos, ya que muchas veces los adolescentes buscan el afecto y comprensión que quizás no encuentran en sus padres.

Es muy importante educar con tacto ya que en el pasado se utilizaban técnicas como la de la letra entra con sangre, en la cual los alumnos eran agredidos al no ser capaces de entender algo, sin embargo con el paso del tiempo nos damos cuenta que esa técnica no genera más que violencia y que con violencia difícilmente se obtengan resultados positivos, al contrario generan temor y traumas que empobrecen la capacidad de los estudiantes para aprender.

El maestro se debe de preocupar por la calidad de la educación que se está dando en estos tiempos se quiere una educación donde el aprendizaje sea significativo, la función de la ternura es dejar al niño ser y así mismo uno aprenderá mas de los niños, y así será la pedagogía que se utilice con los niños y las niñas del mañana si uno como profesor se lo propone puede llegar a suceder, solo se necesita voluntad.

La educación es, un acto de amor y de ternura, por ello se ha querido que las educadoras piensen, sientan, reaccionen y apliquen, lo mejor que puedan, sus reflexiones y enseñanzas.

Sobre todo si consideramos que la tarea educativa consiste básicamente en preparar a los educandos para afrontar las condiciones que se presentan en la sociedad.

La escuela y la familia están ligadas puesto que las dos tienen la misma responsabilidad en la contribución de la educación de los valores y la formación de los pequeños jóvenes y por qué no adultos.

Y la mejor manera de que esto se lleve a cabo es con el amor ya que esto estimula a los pequeños a creer en ellos mismos, y puede ser todo lo contrario porque hay algunas de las veces en que se hace todo lo contrario le llamamos burros, flojos inútiles etc., y lo único que logramos con esto es que se lo crean y tomen ese papel que nosotros se lo impusimos y todo lo contrario que al niño hay que tratarlo con amor y tener respeto a sus ideas que hasta a veces suelen ser más razonables que la de una adulto.

...