RESUMEN DEL LIBRO “¿QUIÉN SE HA LLEVADO MI QUESO?”

Introducción

El libro comienza con una breve explicación sobre el poder literario que tiene, aplicado a las problemáticas de la vida cotidiana de cualquier persona en el mundo. Principalmente referidas a situaciones dentro de una empresa, de un círculo familiar, etc.

Habla sobre el poder efectivo que tiene el contenido del libro sobre los lectores. A pesar de ser una lectura relativamente corta, su contenido es tan sustancial que ha sido capaz de cambiarles la vida a muchas personas que se han dado la oportunidad y el tiempo para leerlo. Dichas personas aseguran haber transformado su visión gracias a la reflexión que les deja la lectura, personas que laboran dentro de una empresa, o simplemente para utilizarlo en cualquier situación estudiantil o incluso en la vida cotidiana de cada uno de ellos.

Contenido

Posteriormente entra en la parte titulada “una reunión” en donde un grupo de amigos de la escuela se reúnen después de varios años; algunos trabajaban, otros se dedicaban a otras actividades, pero todos coincidieron en que las cosas habían cambiado de manera sobresaliente.

Entre la plática, surgió el tema de un libro que había cambiado por completo la vida de uno de ellos, les platicó sobre los efectos inmediatos que tiene el libro en la vida de una persona y les sugirió lo leyeran. Después de eso, Michael se ofreció a narrar esa historia que cambió por completo su vida y mostró ser la clave de su éxito.

Dentro de “la narración”, surgen cuatro personajes, de los cuales, dos de ellos son ratones, llamados fisgón y escurridizo y los otros dos eran seres de casi el mismo tamaño pero con formas de actuar muy similar a la de la gente actual, llamados liliputienses, Hem y Haw. Todos los días salían en busca del queso dentro de un laberinto, dicho queso los alimentaría y daría felicidad. Cada uno haciendo uso de sus capacidades intelectuales y aprovechando sus capacidades físicas para poder lograr su objetivo.

Finalmente, los cuatro lograron encontrar un queso, el que más les gustó y los hizo felices. De esta manera, cada mañana iban hasta ese lugar y disfrutaban del queso, lo cual se convirtió en una rutina programada. Los liliputienses optaron por construir su casa cerca del queso para facilitar su alcance y hacer su vida más cómoda. Llegaron a tal grado que concluyeron en uno de sus rótulos: tener queso te hace feliz.

Por otro lado, los ratones comenzaron a notar que el queso empezaba a terminarse, situación que no les sorprendió, de manera que se propusieron encontrar otro queso del cual pudieran alimentarse y seguir sintiendo bienestar.

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