¿Sabes que es la institución que se conoce con el nombre de MASONERÍA?.

¿Quieres ser masón?

¿Quieres pertenecer a la masonería?

¿Sabes lo que significa ser MASÓN?

¿Sabes que es la institución que se conoce con el nombre de MASONERÍA?

¿Eres hombre libre y de buenas costumbres?

¿Deseas perfeccionarte, cultivarte y ser mejor?

¿Eres un hombre de buenos principios morales?

¿Tienes cualidades y aptitudes evolutivas y de superación?

¿Practicas la bondad, la filantropía, la solidaridad, la caridad y la justicia?

¿Eres o deseas ser buen hijo, buen padre, buen hermano, buen ciudadano, buen patriota?

¿Deseas superarte y tener éxito en su vida?

¿Tienes sentimientos humanitarios?

¿Tienes un trabajo o profesión que te permite desarrollarte honestamente?

Si tus respuestas a estas interrogantes fueron “SI”, te felicito, podrías ser un buen candidato a ingresar a nuestra Augusta Institución.  

Sin duda alguna, te debe interesar el contenido de este documento, te suplico leerlo con detenimiento, estudiarlo y analizarlo, compararlo con otras organizaciones y al final, si deseas pertenecer a la Institución Masónica, adelante, las puertas de la masonería están abiertas para quienes como tu,  anhelan superarse y a la vez, ser hombres útiles a si mismos, a su familia, a su comunidad, a su estado,  a nuestra patria.

Deseo que lo expuesto en este escrito,  sea suficiente para que definas: algo, muy poco, solo lo necesario, de:

¿Que es la masonería?

Estimado amigo: deseo, que el Gran Arquitecto del Universo te ilumine.

A MANERA DE INTRODUCCIÓN

Para iniciar, es preciso señalar que es mentira que la masonería sea una orden secreta; los masones, somos ampliamente conocidos, también se conoce el lugar, la fecha y hora de nuestras reuniones. Nuestros únicos secretos consisten en ciertos signos y palabras que se utilizan para identificarnos y para ayudarnos mutuamente.

No son pocas las ideas erróneas y los prejuicios que se han difundido sobre la verdadera naturaleza de la Institución que lleva el nombre de Masonería. Esto se debe especialmente a su carácter oculto y -- según nuestros detractores--, misterioso.

Constituye para algunos un motivo de atracción, para otros, les llena de desconfianza, provocando que se convierta en blanco para las flechas de los  adversarios que aún cuando sean sinceros sus argumentos, desconocen de lo que hablan, razón por la que no se les puede dar ni ofrecer crédito a sus palabras.

No trataré de discutir combatiendo los errores y las diferentes objeciones que nos hacen, mejor dedico mis  esfuerzos en intentar hacerte ver con la mayor  claridad y sencillez,  lo que es realmente la masonería, sobre todo lo que es,  en su esencia más verdadera, Íntima, espiritual y universal, con especial atención a sus principios,  que descansan sobre las leyes del universo y de la evolución humana, en su finalidad constantemente progresista y constructora.

La Masonería es grandiosa como síntesis de la fraternidad universal, en su seno conviven y armonizan en íntima solidaridad, todos los hombres libres, biológica y espiritualmente normales, en ella se encuentran seres de todas las razas,  colores, de tendencias y orientaciones diferentes, de credos políticos, sociales y religiosos diversos, así como de actividades  labores y  profesionales diversas,  que van desde la mas sencilla hasta lo infinito en filosofía, ciencias y artes.

Toda esta amalgama de individuos insertos en la Augusta Institución, que es la Masonería, le imprime una vida activa, multiforme y palpitante,  cuya Luz Suprema es el trabajo para bien de la humanidad.

Este todo viviente armonioso y progresivo en marcha incontenible hacia su meta,  evoluciona dentro del triángulo en cuyos vértices resplandecen los principios de vinculación que son:  “LIBERTAD, IGUALDAD Y FRATERNIDAD”.

Ahora analizaremos algo de lo que SI SOMOS LOS MASONES y comentaremos en relación a QUE NO SOMOS.

A través de su historia la masonería ha tomado como norma el que los pretendientes a ingresar lo hagan por convicción y no por curiosidad, los que ingresan por esta última razón salen desilusionados.  

Es de vital importancia informarle que al ingresar a nuestra fraternidad contraes ciertas obligaciones monetarias, obligaciones que deberás estar en condiciones de cubrir sin afectar tus gastos familiares. También debo advertirte que en ocasiones se te asignarán trabajos de colaboración.

Colaboración y tiempo que dedicarás después de tus ocupaciones laborales y personales, desde luego, con el entendido de que ninguno de esos trabajos se hace en contra de algo, o de alguien, sino todo lo contrario, siempre son a favor de la sociedad, de la familia, de la comunidad, del estado, del país  y desde luego pudiera ser que a favor de algún Hermano Masón.

Espero que la información que te proporciono sea suficiente para darte cuenta que la masonería no es  contraria a la moral, a la religión o partido político alguno.

Es deseo Masón hacer ver el espíritu vivificante que nos anima  y que constituye nuestro principio y razón de ser;  “… Nuestra Institución es una escuela filosófica, ecléctica, impersonal y constructiva como camino individual hacia la verdad como arte de la vida, en su más alta y dilatada acepción, como doctrina y factor de armonía y de progreso para cada hombre, particularmente para la sociedad y el medio en que se encuentra y para toda la humanidad...” 

¿QUE ES LA MASONERIA?

En estas líneas,  se hará evidente el error en que incurren nuestros detractores,  de atribuirle un carácter político, antisocial y antirreligioso.

A pesar que la masonería es una Institución de respetable antigüedad y que la han estudiado ampliamente historiadores, filósofos y escritores, existe en muchas personas, desorientación y desconocimiento casi completos de lo que realmente es esta Augusta Institución, y eso surge debido a la selectividad de sus integrantes, selectividad que simplemente se debe a que quienes ingresamos a la masonería, SOMOS HOMBRES LIBRES Y DE BUENAS COSTUMBRES.

Es importante subrayar que para nosotros el ingreso a la institución masónica, se ofrece realmente a quienes han observado una conducta intachable, haciendo el bien, imprimiendo en su actuar los valores universales, conducta fácilmente comprobable por la sociedad en su conjunto, por  estas razones, se dice que somos libres; nos distinguimos debido a que  tenemos espíritu liberal. También expresamos en nuestro hacer, buenas costumbres debido a que respetamos la ley, las autoridades y por ende a la sociedad. Amamos a nuestra familia, apoyamos con nuestro ejercicio profesional a la comunidad y tenemos, en suma una forma honesta de vivir. Por eso, es que la masonería,  tiene presencia en  todo el mundo, porque hombres libres y de buenas costumbres, vivimos  diseminados por todo el orbe.

A lo largo  y ancho del planeta, hay personas que han escuchado en alguna ocasión referencias vagas hacia la Institución Masónica, ellos son,  los que resultan afectados por la labor de los enemigos de la Masonería, quienes con su labor insidiosa, propician que  conciban a nuestra Augusta Institución  como una especie de mafia tenebrosa que se dedica a incorporar en sus filas a los oportunistas, los cismáticos,  hombres sin credo ni religión, los politicastros sin escrúpulos y a los incautos, para sus conspiraciones secretas.

En forma equívoca de la misma manera, nuestros enemigos hacen suponer que el objetivo principal de la actividad masónica consiste en atacar a la religión, ahondando la creencia de que entre nuestros objetivos está el de  conseguir puestos lucrativos ya sea en el Gobierno, la Industria, el Comercio o donde quiera que puedan introducirse con maniobras encubiertas.

También alegan que la intimidación y el terror son las armas con que son manejados eficazmente los juramentos de esta sociedad según ellos secreta  y mas aún alientan el brote de leyendas que hablan de terribles y espeluznantes “venganzas masónicas”.

Esa es la labor que cumplen nuestros detractores y enemigos, que resultan a la vez ser detractores y enemigos de la libertad, de la igualdad y por ende de la fraternidad entre los hombres. Son los fundamentalistas de cualquier credo, de cualquier corriente conservadora, de cualquier organización pseudo progresista o centralista y principalmente, son los enemigos del progreso, de  la ciencia y de la verdad.

Muy distinta es la idea que se forman de la masonería quienes han tenido algún trato con miembros de la Institución. En muchos casos han creído descubrir que se trata de gente inofensiva, incapaz de “matar una mosca”, idealistas y hasta ingenuos, que se reúnen semana a semana en sus logias, tal y como otros lo hacen en el café o en la cantina, “para darle una arreglada al mundo”.

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