Salud Materno Infantil

La salud materno infantil es la relación que hay entre la madre y el hijo, antes y después del embarazo, así como las condiciones de salud de la mujer durante las fases del embarazo.

Comprende una conjunto de actividades destinadas a fomentar la adquisición de hábitos de salud e higiene durante el embarazo, la preparación al parto y el puerperio, así como para el cuidado del recién nacido y la porción de la lactancia materna, aportando consejos de educación sanitaria a través de soportes didácticos. Estos materiales complementan y refuerzan los contenidos sanitarios incluidos en los protocolos de salud infantil.

La salud materno infantil comienza desde el periodo que se extiende el inicio del embarazo hasta que el niño finaliza su tercer año de vida. Lo cual es un periodo nuevo de vida de la mujer en el que hay muchas ilusiones, esperanzas y cambios tanto físicos como psicológicos. Esta nueva situación es precisa de adaptación y de un control sanitario adecuado.

Con el paso del tiempo la madre sentirá esa emoción que sintió al enterarse que iba a hacer mamá por lo que ira encariñándose más y más con el niño debido al tiempo que paso dentro de su vientre, una vez que salga tendrá que acudir a un especialista para que se le informe los cuidados que tendrá a partir de ahora su hijo. De tal manera que el especialista le dirá a la madre los cuidados que debe de tener él bebé así como su alimentación y también la alimentación de la madre. Con forme va creciendo tendrá que educarlo y forjando hasta que el niño ya no depende en su totalidad de la madre.

Equidad de género en la salud materno infantil

La equidad de género desde hace tiempo ha tenido una serie de cambios ya que las mujeres han aportado significativamente a los procesos de producción de la sociedad. A partir de la evolución de nuestra sociedad y ante el empoderamiento progresivo del rol que le corresponde a la mujer ante ella misma, la familia y su entorno social, es necesario dentro de estos mismos cambios , el facilitar el papel al hombre y a la mujer en este nuevo engranaje social y personal dentro de

los procesos que se desarrollan incluyendo el de la toma de decisiones en la salud y reproductiva de la pareja.

Tal es caso de que antes las mujeres no podían tomar decisiones en la casa solo el hombre, por eso es que había muchos hijos en los hogares por que la mujer tenía miedo a decir que no al hombre, a la hora de tener relaciones.

Con el paso del tiempo eso fue cambiando y la mujer hoy por hoy tiene voz y está obligada a opinar, expresar y decir si quiere o no tener hijos o cuantos desea tener.

Hoy la mujer y el hombre si quieren deben hablar acerca de si quieren tener hijos o no, si el tenerlos les genera gastos, cuidado, tiempo, si tienen la posibilidad de darles un hogar, alimento y más que nada una familia.

La mujer como el hombre deben de tomar decisiones a la hora de cuidar al bebé organizarse, tomar sus tiempos y cuidarlo por roles. Debe de haber un ambiente en el hogar de amor para que el niño no presencie un ambiente de conflictos entre sus padres.

A la hora de ir a consulta médica ambos deben de cargar partes iguales, si el hombre carga la pañalera y el carrito, la mamá debe de cargar al niño o viceversa para que haya esa equidad entre ambos.

El hombre no debe de exigir a la mujer el sexo del niño ya que si la mujer desea niña y el hombre un varón deben de acudir al médico antes de especular y que les diga que vendrá si niño o niña.

La pareja tendrá que sentarse a platicar e intercambiar puntos sobre como llevaran la vida de su hijo de una manera adecuada y responsable.

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