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Ultimo Gigante


Enviado por   •  1 de Agosto de 2012  •  900 Palabras (4 Páginas)  •  773 Visitas

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Tu Último Gigante

Israel derrota a Og rey de Basán

Deuteronomio 3: 1-2; 11

1 Volvimos, pues, y subimos camino de Basán, y nos salió al encuentro Og rey de Basán para pelear, él y todo su pueblo, en Edrei. 2 Y me dijo Jehová: No tengas temor de él, porque en tu mano he entregado a él y a todo su pueblo, con su tierra; y harás con él como hiciste con Sehón rey amorreo, que habitaba en Hesbón.

11 Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de nueve codos, y su anchura de cuatro codos, según el codo de un hombre.

Notemos la última parte del verso 11, este era el último gigante

Habían muchos gigantes en aquellos días, el reporte de los espías que envió Moisés en aquellos tiempos era: la tierra está llena de gigantes y nosotros somos como langostas al lado de ellos.

Ejemplo los hijos de Anac, que eran de una raza de gigantes.

El reporte fue lo que produjo miedo, Esto intimido a los hijos de Israel.

Ahora es otro tiempo, porque todos los gigantes que se habían encontrado en el camino los habían derrotados, excepto uno, y los sueños que habían soñado la ilusión de algún día tomar posesión de esa tierra se hallaban eclipsadas únicamente por este último gigante.

Y creo que este mensaje es preciso para este tiempo y para la iglesia del señor y para todo aquel que quiera ser algo significante para Dios.

Quiero decir que nos encontramos más cerca de nuestra tierra prometida de lo que nos imaginamos, hoy estamos más cerca que nunca no nos hayamos lejos, ahora estamos cerca de entrar en una dimensión nueva de avivamiento a una dimensión nueva de pasión por la almas y los perdidos, nos encontramos cerca de tener una cosecha de almas como nunca antes, yo creo que este es nuestro día, yo creo que esta es nuestra oportunidad, es nuestro tiempo, no estamos lejos de experimentar que al igual que Isaac en tiempo de sequía el sembró y cosecho al ciento por uno, no estamos muy lejos y el enemigo lo sabe esta iglesia está quemando al rojo vivo, aquí hay creyentes que quieren hacer algo para la gloria de Dios.

El pueblo de Israel era experimentado en matar gigantes y ahora llegan al final de su peregrinaje, después de ser testigos de muchos milagros. Numeral algunos.

Ahora podían contemplar el horizonte de la tierra prometida. Pero cuando de repente apareció el último gigante que se interponía en su camino, solo un gigante era lo que se hallaba entre ellos y las promesas de Dios.

Hay bendiciones que una vez que Dios nos las de nadie no los podrá quitar, ni el diablo ni nadie,

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