Análisis personal del tema “Comunicación y su dimensión cultural”

Análisis personal del tema “Comunicación y su dimensión cultural”

Una de las grandes cosas del hombre es el poder que tiene para comunicarse. Esta cualidad mágica se comparte con el resto de los seres vivos, pero en hombres y mujeres es mucho más refinada y avanzada. Lo más evidente y lo que nos diferencia de los demás es la capacidad de utilizar el lenguaje, articular palabras o escribir para transmitir un mensaje al interlocutor.

La comunicación es producto de muchos siglos llenos de esfuerzos, desarrollos y nuestra propia necesidad de comunicarnos de la forma más sencilla y práctica. Hoy es fácil de entender. Sin embargo, no fue en la antigüedad cuando solo era posible comunicarse mediante la voz, los gestos o cualquier tipo de señal.

Nuestro desarrollo humano tuvo la comunicación como protagonista. Esto hizo posible enviar mensajes de todo tipo para que pudieran entenderse.

Todos tenemos la necesidad de interactuar con otros humanos. La comunicación puede entenderse como el proceso de comprender y compartir ideas. No solo transmitimos información a través de medios orales o escritos, sino también a través de nuestras expresiones. ¿Como seria nuestra vida si no te puedes comunicar, preguntar por tus propias necesidades o comprender las necesidades de los demás?

La falta de comunicación puede incluso significar perder parte de uno mismo de muchas maneras. Tus habilidades de comunicación son el núcleo de tu autoconcepto. Todo es comunicar, nuestra escritura, la marca que usamos, el lenguaje que usamos, el estado de nuestra ropa, las joyas que usamos, los tatuajes que tenemos, nuestras posturas y gestos, y más, al mismo tiempo, todos estos constituyen nuestro propio concepto.

Otro beneficio de la comunicación es que puede ayudarnos a difundir conocimientos e información entre las personas. Por ejemplo, los autores publican un libro para compartir sus experiencias con los lectores, los profesores comparten sus enseñanzas con estudiantes, amigos y colegas discuten sus ideas entre ellos y las empresas interactúan con los consumidores. Además, el auge de Internet no solo nos permite acceder a todo tipo de información, sino que también ayuda a conectarnos más estrechamente con personas de todo el mundo. No hay duda de que, sin comunicación, el proceso de compartir conocimientos e información será imposible.

No siempre somos capaces de encontrar palabras precisas, somos incapaces de hacernos entender o transmitir lo que queremos transmitir, e incluso somos incapaces de traducir nuestros pensamientos o sentimientos en palabras. Esto suele representar un desafío para nosotros. Incluso a veces, pensamos que no somos nosotros sino nuestros interlocutores los que estamos poniendo barreras para que nuestra información no pueda serles comunicada.

No entendemos todos los mecanismos involucrados en el proceso de comunicación. Olvidamos la importancia de comunicarnos de forma clara y sencilla con los demás, sin considerar el posible impacto de nuestras palabras y gestos.

La comunicación es absolutamente necesaria para insertarse en los ámbitos sociales que rodean nuestro entorno, y aun cuando parezca un concepto demasiado manido, sin embargo, resulta siempre original y complejo en función de las personas, de sus edades, de sus culturas, y especialmente cuando estas son niños o adolescentes, a los cuales hay que marcarles un camino de futuro que les conducirá probablemente a ser profesores, políticos, líderes destacados en cualquier aspecto, siendo la comunicación la facultad que les va a permitir obtener el éxito en aquellas funciones que ellos mismos o que la sociedad les demande.

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