Asamblea General de las Naciones Unidas. Tópico único: “Día cero: Sudáfrica”

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Tópico único: “Día cero: Sudáfrica”

Delegación: República de Zimbabue

Rafael Ernesto Maita Rivero

                             SAVIMUN

Ante todo un cordial saludo a la Mesa directiva de la Asamblea General.

En el 2019, el gran continente africano continua siendo débil en su capacidad de adaptación, lo que lo hace particularmente vulnerable y más aún cuando es expuesto a las altas tasas de pobreza, limitaciones financieras y tecnológicas; así como una gran dependencia de la agricultura, por lo cual cualquier tipo de evento catastrófico significaría un tiempo de respuesta y financiamiento ineficaz. En el caso de la sequía o el infame Día cero, era un destino incierto al cual se enfrentaban diversos países del continente, sin embargo, el día ha llegado en Sudáfrica; más específicamente Ciudad del Cabo, dónde los cambios climáticos dañinos, como sequías extremas, han derivado a una situación que requiere la ayuda internacional para ser solventada. El no disponer de recursos hídricos figura el inicio de una crisis humanitaria, que podría extenderse de no resolverse a tiempo, con medidas inmediata y que brinden una estabilidad a Sudáfrica, nuevamente. El panorama general que enfrenta Ciudad del Cabo y la Comunidad internacional es preocupante, más aún para naciones que se encuentran en alertas de Día cero o en largos días de sequía, lo cual también es un objetivo de carácter crítico en su discusión.

La República Zimbabue, siendo una adyacente hermana soberana de la nación en crisis, viendo la decadencia económica, el revuelo social y la insalubridad que se ha comenzado a sufrir y que se viene acarreando desde 2018; cuestiona la precaria situación, donde Sudáfrica está en el ojo de la tormenta, esto se debe en parte a factores sociales y económicos. Además África cada vez se ve más endeble a la inestabilidad acuífera, y la peligrosidad que representa para el pueblo africano. Actualmente, en pleno 2019 más de medio billón de personas se enfrenta a una grave escasez de agua, y Sudáfrica el máximo exponente de esto. A través de las extracciones de agua, el mal uso de la tierra y el uso de químicos en el cielo, los países están alterando el ciclo global del agua. Si bien dentro de algunas de las naciones existe un cierto manejo sobre los retos del agua, hay otros como Sudáfrica en la cual se ha perdido el control sobre el mismo, en el siglo XXI es necesaria una transformación en las políticas de gestión del agua si se quiere alimentar a una población de 9 mil millones de personas para el 2050.

En términos generales, Sudáfrica (sirviendo como una muestra de lo que podría ocurrir en el mundo) se afronta a varios desafíos relacionados con el agua, los cuales han empeorado en las últimas décadas. El agua dulce del mundo está distribuida de manera muy desigual; lo que significa que el aumento de la producción agrícola la cual conlleva a la decadencia hídrica gradual. Debido a que la población mundial está creciendo y agrupándose cada vez más en Ciudad del Cabo, es más difícil encontrar suficiente agua para abastecer, esto ocasiona la sobreexplotación de muchos ríos importantes y acuíferos subterránea en la región, y por último el alterado ciclo hidrológico, causante de la mayor sequía que podría conducir a que el Día cero se extienda en el continente africano.

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