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Ciudades Modelo No, Sociedad Modelo Si


Enviado por   •  14 de Diciembre de 2011  •  2.521 Palabras (11 Páginas)  •  794 Visitas

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CIUDADES MODELO NO, SOCIEDAD MODELO SI

Por Tomas Andino Mencia

Cada vez se va revelando la verdadera dimensión del Golpe de Estado en Honduras.

Los hechos van demostrando que no solo hubo un Golpe político, consistente en el derrocamiento de un gobierno constitucional, sino que simultáneamente se está dando un proceso golpista más profundo, que abarca otras dimensiones de la realidad.

Estamos sufriendo un “Golpe Social” con el cercenamiento de las más caras conquistas sociales de la clase trabajadora, como la pérdida del derecho al empleo permanente (Ley de Empleo Temporal); la castración del Estatuto del Docente con la eliminación de su clausula de actualización salarial; la “suspensión” del Salario Mínimo; la inminente aprobación de la nueva Ley General de Educación; y ahora la derogación del Decreto 18-2008 que quita las tierras a los campesinos que fueron otorgadas por el Presidente Zelaya.

También somos testigos de un artero “Golpe Económico-Ambiental” con la puesta en venta de las más lucrativas instituciones de servicios públicos del Estado a través de la Ley de Inversión Publica Privada, y con el concesionamiento por treinta años (prorrogable) de la cuencas de los ríos de nuestro país a las familias de la oligarquía golpista, entre otras lacras.

Ahora viene el tiro de gracia; el “Golpe a la Soberanía del Estado de Honduras”, con la introducción del decreto que crea las “Regiones Especiales de Desarrollo”, mal llamadas “ciudades modelo”.

Las RED o Ciudades-Estado Empresariales

Según el Proyecto de Decreto, las Regiones Especiales de Desarrollo (RED):

“son entes del Estado de Honduras creadas con el propósito de acelerar la adopción de tecnologías que permiten producir con alto valor agregado…” (Numeral 1 del artículo 329 constitucional reformado)

Aunque se las declara ser “entes del Estado de Honduras”, tienen un nivel de autonomía tan elevado que en dichas zonas no serán aplicables la mayoría de las leyes de Honduras, incluso la mayoría de disposiciones constitucionales, salvo en los temas relacionados a “soberanía, defensa nacional, relaciones exteriores, temas electorales, emisión de documentos de identidad y pasaportes” (numeral 5), o sea; salvo para entrar y salir del país, identificarse, votar y someterse a la política exterior y de defensa.

En otras palabras, en esos territorios queda en suspenso su calidad de ciudadanos(as) y están bajo amenaza sus derechos humanos y civiles, en especial los derechos laborales, garantizados desde la Constitución de 1957, incluidas las convenciones internacionales que son aplicables al Estado de Honduras, ya que ni siquiera se las menciona. En su lugar, el Decreto en cuestión establece que esos complejos industriales-habitacionales tendrán una mini Constitución elaborada por los diputiteres de los empresarios:

“Los sistemas que se instituyan en las Regiones Especiales de Desarrollo deben ser fijados por un Estatuto Constitucional aprobado por el Congreso Nacional con una mayoría calificada de dos terceras partes de la totalidad de sus miembros” (numeral 2)

Para asegurarse que ningún gobierno posterior cambiara ese Estatuto, introducen una clausula aparentemente “democrática” pero que se presta a la manipulación en la que son maestros los grandes empresarios:

“Una vez promulgado ese Estatuto Constitucional solo podrá ser modificado, reformado, interpretado o derogado con la misma mayoría antes indicada, previo referéndum a la población que habite la Región Especial de Desarrollo de que se trate.” (Numeral 2)

Y sigue:

“Las RED tienen personalidad jurídica, deben contar con su propio sistema de administración pública, emitir su propia normativa legal, deben contar con su propio fuero jurisdiccional, pueden firmar tratados y convenios internacionales en temas relacionados con el comercio u cooperación en materias de su competencia, mismos que deben ser ratificados por el Congreso Nacional; y tendrán la atribución contenida en el Articulo 297 de esta Constitución” (numeral 3). Esto último significa por analogía con las municipalidades, que también podrán nombrar libremente a sus empleados públicos incluyendo a los agentes de la policía, los que serán costeados con sus propios fondos.

Además, sigue diciendo el Proyecto de Decreto:

“Las Regiones Especiales de Desarrollo deben tener su propio presupuesto, el derecho a recaudar y administrar sus tributos, celebrar todo tipo de contratos que se extiendan al siguiente periodo de gobierno y contratar sus propias deudas internas o externas siempre que sean sin el aval del Estado de Honduras. Al momento de su creación, deberá garantizarse que se respete todo lo dispuesto en el Artículo 12 de esta misma Constitución. ”

(Los subrayados son míos.-TA)

En buen romance, lo anterior significa que las Regiones Especiales de Desarrollo serán pequeños enclaves o ciudades-estados empresariales que se organizaran dentro del Estado de Honduras y al amparo de este, pero que serán prácticamente intocables una vez creadas. Además no se establece ningún límite de tiempo, por lo que se les concibe permanentes.

¿No es esto una pérdida de Soberanía del Estado de Honduras sobre esas partes de su territorio? ¿No es esta una alteración a la “Forma de gobierno” que tanto dicen defender?

El proyecto comenzara con la asignación de 33 Kilómetros cuadrados, en zonas como el Valle de Agalta y la desembocadura del Rio Sico Paulaya; no obstante, en sus planes esta conceder aproximadamente 1000 kilómetros cuadrados a empresarios extranjeros y nacionales ¡y quién sabe si a futuro se les ocurre extenderlas a regiones más vastas del país!

De esa forma, se cumplirá el sueño de las transnacionales y de los oligarcas criollos de subastar nuestro territorio y contar con espacios en los cual puedan hacer lo que se les antoje, sometiendo a sus habitantes a sus leyes.

La teoría del “desarrollo” de Paul Romer

Para algunos sectores, estos “inconvenientes” se justificarían a cambio de los beneficios que tendrán esos enclaves, según sus promotores. Veamos que tan cierto es a partir de una mirada critica de su propuesta.

El promotor de este adefesio es el economista Paul Romer, profesor de la Universidad de Stamford, traído a Honduras

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