¿Cómo se ha ido formando la relación entre el narcotráfico y la sociedad, y de qué manera esta se ve afectada?

México es actualmente abordado por enumeradas problemáticas tanto sociales como políticas, económicas, o de seguridad. Dentro de dichas problemáticas se expande el crecimiento de un tema en particular, me refiero al narcotráfico.

¿Cómo se ha ido formando la relación entre el narcotráfico y la sociedad, y de qué manera esta se ve afectada?

Tomando en cuenta la interrogante antes mencionada, quisiera hacer énfasis en el objetivo principal de este ensayo, pues tiene la finalidad de mostrar el vínculo central de la delincuencia organizada con la sociedad y su comportamiento, es decir, la interacción con el gobierno, las organizaciones, jóvenes, niños y adultos. Para comenzar me parece fundamental mencionar que quizá el crecimiento del narcotráfico se deba a la poca importancia que en ocasiones damos como ciudadanos para contrarrestar los daños, me refiero a que pensamos que a nosotros nunca nos va a pasar, y solo es hasta que nos ocurre que pensamos poner cartas en el asunto y hacer caso a las alertas que se dan día con día.

A pesar de que en muchas comunidades rurales, alejadas de la urbanización, son muy claros los trabajos de apoyo brindados por los narcos a sus pueblos como pavimentación, reconstrucción de escuelas, centros de salud entre otros, fuera de ese entorno se ve una realidad muy distinta llena de guerras y heridos inocentes que tienen la mala fortuna de cruzarse en un enfrentamiento desagradable; lo que quiero recalcar es que a pesar de todo el apoyo que puedan brindar a comunidades pequeñas y vulnerables no dejan de ser mayores los daños que causan, y no solo a unas cuantas comunidades sino a cada región del país apoderándose de la tranquilidad de los mexicanos.

El narcotráfico, como organización criminal y cultura, ha afectado la forma de vida de todo el país en cuestiones de seguridad, estilo de vida y comportamiento.

El narcotráfico consiste en la producción, distribución y venta de drogas, pero no se limita a esto. En primer lugar está lo más evidente: lo que se ve en las noticias, escuchas y sueles ser advertido. El peligro por el narcotráfico es de los aspectos más violentos, atroces y aterradores del país, teniendo millones de víctimas en medio de encuentros en más de veinte años de narcotráfico.

Otra consecuencia fácil de apreciar en la sociedad actual es la drogadicción. Tan solo en el mismo instituto o en grupos de amigos o conocidos es fácil darse cuenta de que las drogas están más cerca de lo que pensamos y cada consumidor no solo financia la producción de más drogas, sino también financia la violencia y, a mayor escala, la pérdida de la democracia actual. La razón de esta pérdida de la democracia radica en la desconfianza de la población que mucho ha perdido ya en la guerra contra el narcotráfico a causa de los lasos existentes entre el gobierno y el narcotráfico. Incluso la principal razón de la alternancia en el gobierno en las votaciones del 2012 no fue porque el pueblo buscara realmente una mejora en la política y economía del país, sino una solución a la inseguridad. Después de más de 70 años de gobierno del PRI y 12 años de gobierno panista que se enfocaba en apoyar a la economía, México regresó a su antiguo gobierno, sacrificando el apoyo a la democracia en búsqueda de seguridad.

Actualmente, en una sociedad en la que la influencia del narcotráfico llega tanto a representantes del mismo gobierno y policía, es inmenso el alcance que tiene esta organización criminal en la que los miembros son temidos y respetados, lo que dificulta aún más que se les haga frente.

Como habitantes de la zona centro de México, nos hemos dado cuenta de la violencia de organizaciones criminales, pero para habitantes de la zona norte, la influencia de estas organizaciones es mucho mayor. Por un lado está la parte de la población que vive con miedo y ha visto de frente los enormes daños del narcotráfico, viviendo en balaceras e incluso con familiares y amigos muertos por estas organizaciones. Por el otro lado están los que viven admirando al narco y son ejemplo de cómo es esta cultura: los buchones, también conocidos como narcojuniors, que viven atraídos por los lujos, excesos, armas y dinero del narcotráfico y siguen desde jóvenes su estilo de vida. Los buchones también son un excelente arma de la mercadotecnia y promoción para el narcotráfico: ¿quién (yo no) no se ve atraído a una vida de narcotráfico cuando un joven de nuestra edad, financiado por sus padres, sube una foto a Instagram de un reloj de 20,000 pesos e incluso zapatos y playera más costosa que lo que muchos pueden ambicionar a nuestra edad? Lo preocupante del hecho no está solo en su potencial de convencimiento, sino que por razones obvias, solo muestran el lado atractivo del narcotráfico y no los daños que lo provocan.

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