Distopias

Un mundo indeseable

Cuando una sociedad no se puede mantener por sí sola, es necesario algo que pare ese estancamiento social. Esta es una de las razones por las cuales los gobiernos recurren a un totalitarismo, donde todos son controlados ya sea para bien o para mal, para que de esta manera la sociedad se mantenga en un “orden”. Los Estados, al controlar todas las acciones de los individuos, crean situaciones en las que muchos de los involucrados se sienten perjudicados ya que el Estado decidirá lo que considere bueno o malo. A estas sociedades se las denomina como distopías porque son realidades indeseables por si mismas para una sociedad.

En los libros "Un mundo Feliz" y "1984", de Aldous Huxley y George Orwell respectivamente, se plantean sociedades que viven bajo un régimen totalitarista en la que la vida de las personas es controlada mediante la modificación de la percepción de la realidad de las personas para que crean que viven en un mundo donde las cosas son mejores que en un pasado.

“Los artistas mienten para decir la verdad mientras que los políticos mienten para ocultarla.” (Hammond, 2006)

Esta realidad es aplicable a una realidad social, mas no al Derecho en sí porque al ser un régimen totalitario, que todo lo controla, vulnera muchos de los derechos de las personas involucradas ya que estas no tienen el libre albedrío de sus acciones y en cambio el Estado está en su libre albedrío de aplicar sanciones, sin importar que tan arbitrarias sean estas. De esta manera puedo decir que los regímenes planteados en estos libros, al dar viviendo la vida de toda la sociedad, no permiten un trato igualitario entre las personas y con esto, el planteamiento que se hace en estas obras no puede en ningún sentido ser aplicado al Derecho porque el Derecho es una herramienta que tiene como objetivo alcanzar la justicia, y en estos ideales de gobierno no existe la justicia.

En estos mundos distópicos presentados, el gobierno totalitarista trata de hacer que la gente se conforme con la sociedad, por lo que, en un caso, les lavan el cerebro para que crean que viven en un “mundo feliz” y, en el otro caso, modifican el pasado para que la sociedad crea que vive en un “mundo mejor, sin ningún problema”. Esto si afecta al contenido del Derecho y en especial lo perjudica, porque lo convierte en algo casi inalcanzable, pero además de esta modificación de la realidad, se ofrecen diferentes tipos de sustancias que ayudan a las personas a adaptarse a esa vida, para que no se sientan perjudicados o tristes. De esta manera nadie se atreve a cuestionar las decisiones de los gobiernos, permitiendo que sus derechos sean violados incansablemente por el interés del Estado.

“Tomó de un estante una botella de un líquido incoloro con una sencilla etiqueta que decía: Ginebra de la Victoria… se preparó los

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