Durkheim El Suicidiio

Importante mencionar que para Durkheim; el número de suicidios no tiene relación alguna con la herencia o con alguna forma de contagio. Para él, el suicidio es un acto que está íntimamente relacionado con la vida social y que repercute y se manifiesta en un acto individual.

Durkheim habla de la división social de trabajo como uno de los fenómenos que más peso tiene en cuanto al aumento en el número de suicidios. Él señala que a mayor división social de trabajo, mayor debilidad de la consciencia colectiva, dando como resultado anomia, es decir, pérdida de identidad, valores y creencias con los demás. En el momento en que estos valores se rompen, hay aislamiento, soledad y pérdida del sentido de pertenencia.

En esta obra, Durkheim pretende demostrar que la sociedad hace al individuo, y que el suicidio es un fenómeno social, puesto que las causas de este son sociales.

Después de la lectura, puedo darme cuenta que son muchos los factores que intervienen para que un ser humano tome la seria decisión de quitarse la vida. Suicidarse implica más que un conjunto de sentimientos negativos, confusiones mentales y depresiones dentro del individuo. Estos sentimientos, son solamente avatares de algo más grande que los dirige; la sociedad.

Hoy en día, nuestras sociedades se encuentran sumergidas en un mar de competencia, donde las condiciones económicas se han convertido en la base para una vida plena y feliz. Le hemos dado al dinero y a todo lo que emana de él, un valor absoluto, como si de este (el dinero), dependiera la felicidad del hombre. En consecuencia, los seres humanos se han ido desconectando poco a poco de su propia fuente de luz, de su propio ser, trayendo consigo; frustración, rencor, odio, violencia, egoísmo… los unos hacia los otros e incluso hacia uno mismo. La presión social por “ser alguien en la vida” ha adquirido tanta fuerza, que poco a poco, nuestros hombres, mujeres y jóvenes, buscan solución a sus problemas al quitarse el último soplo.

Nuestra sociedad actual, es el resultado de una conciencia colectiva desmoralizada y desvalorizada, influyendo drásticamente en las conciencias individuales de nuestra sociedad.

El uso de las estadísticas sobre la tasa de suicidios, muestra el nivel de “avance” que hemos alcanzado. Aún nos falta mucho por hacer. ¡Que el sufrimiento de todo individuo no tenga que cesar a costa de su propia vida.

...