EB. FUNDAMENTOS DE CIENCIA POLÍTICA

Rodrigo López-Argüelles Ruiz

12/11/2020

EB. FUNDAMENTOS DE CIENCIA POLÍTICA.

• Un complejo cruce de influencias: 

Vallés quiere referirse, en cuanto a la socialización política, es que el tipo de creencias o qué juicios de valor activará cada individuo ante determinadas situaciones que le demandan una respuesta, puede preverse hasta cierto punto.

Y ello en gran parte porque el individuo crece y se desarrolla en un determinado entorno social del que recibe el bagaje mental para desenvolverse en el terreno político, el entorno social me influye mucho y si me he educado en ciertos entornos mi comportamiento puede tener algún grado de previsión. Si me educo en un entorno pacífico podremos ver nuestras creencias y valores que hemos adquirido.

Sin embargo, la que no está clara es la influencia que pueda establecerse entre determinada predisposición y un agente de socialización determinado, siendo difícil establecer a que agente corresponde cada influencia y la intensidad de la misma. A esto es lo que le llama Vallés es el “cruce de influencias”.

Sin embargo, la importancia de estos procesos se deduce fácilmente del interés que manifiestan quienes tienen –o aspiran a tener- poder político por controlar los mecanismos y los agentes de socialización. Hay una lucha por el verdadero interés de los poderes de control de los medios de comunicación.

De ello se deduce lo siguiente:

En la actualidad son los medios de comunicación, potenciados al máximo por las nuevas tecnologías, los que forman –o deforman- las características de los grupos de referencia y los que transmiten –ocultan o enmascaran- la imagen que nos llegan de los grandes acontecimientos y de los personajes políticos relevantes que actúan en los procesos de resocialización en la época adulta. Son los medios de comunicación los que nos ofrecen una imagen u otra dependiendo de su interés.

• Pero… estamos en democracia. Hasta el punto de que el problema que se plantea desde una perspectiva democrática no es el riesgo de un control de los medios de comunicación por parte de los poderes políticos, sino el peligro que se deriva de que sean los medios los que controlen a los políticos, en definitiva, el verdadero peligro es que unos medios controlen a unos poderes democráticos, es decir, la sujeción de los poderes públicos a los intereses de los grupos mundiales de la comunicación.

TEMA 3: Cultura política, Valores e Ideología. 

La Política como Proceso.

Cadena de acontecimientos, decisiones y conductas en las que intervienen actores individuales y colectivos. Estas actividades tienen lugar en un contexto cultural, en un entorno, que influirá mucho.  Este nos ayuda a interpretar el sentido de cada episodio y de la intervención en el mismo de cada sujeto.

Hay unas actitudes previas que orientan a cada sujeto en su recorrido por el paisaje político, nos ayudan a conocer cómo este entiende y practica la política. El objeto de mi estudio serían las actitudes.

Las actitudes individuales son comunes a un grupo más numerosos de personas.

• Una comunidad política.
• Un grupo social.
• Una confesión religiosa.

Cuando detectamos que hay actitudes compartidas en estos grupos estamos hablando de la existencia de una cultura política.

Las conductas individuales y colectivas vienen a ajustarse a ciertas reglas, lo que quiere decir que están organizadas en Instituciones. Esas Instituciones (política como estructura) te limitan y condicionan y la vez te posibilitan y garantizan estas conductas políticas. Ejemplo: Una red de carreteras.

El objetivo si quiero conocer comportamientos políticos individuales o colectivos, debo observar las posiciones y las actividades de los individuos y de grupos en relación a la práctica política, ese será mi objeto de estudio.

Las posiciones y actitudes frente a la práctica política que a la Ciencia Política le interesa descifrar para aproximarse al conocimiento del proceso son las siguientes preguntas:

• Por qué parecen ser pocos lo individuos que se preocupan por la política.
• Cuáles son las formas habituales que adopta la participación. Participo a título individual o colectivo, pertenezco a sindicatos, a partidos, a movimientos sociales, más o menos, formales y articulados.
• Qué factores influyen para que cada actor opte por una u otra forma de participación.
• Por qué en unas elecciones unos ciudadanos optan por una candidatura en lugar de otra.
• Por qué determinados grupos se organizan en partidos y asociaciones, y otros prefieren la acción individual.

Los ojos para conocer el proceso o dinámica del hecho político, la Ciencia Política, debe examinar sucesivamente:

1. Cómo se explica la posición que un individuo adopta ante la política, a partir del examen de sus actitudes, valores e ideologías y cultura.
2. Qué perfiles presentan los miembros de la comunidad política cuando se relacionan con la actividad política.
3. Qué formas de intervención política predominan en cada comunidad, en relación al marco institucional: convencional, al margen del marco institucional o contra el marco institucional.
4. Que actores colectivos, partidos, organizaciones de interés, ONGs, operan en el campo político y las características que tienen cada uno de ello.

¿POR QUÉ NO TODOS LOS SUJETOS RESPONDEN IGUAL ANTE UN HECHO POLÍTICO?

Cada sujeto experimenta un proceso de socialización política, y eso va a influir en la medida y forma de participación.

Otros, respecto a intereses diferentes.

Dos explicaciones a la diferencia de acción política:

1. Modelo económico: Cálculo.

Donde cada individuo es un actor racional con preferencia definidas que determinan su conducta en política.

A su vez, manejan información veraz sobre los costos y beneficios de cada decisión.

Además, el individuo trata de obtener la máxima utilidad de su conducta política, siguiendo un interés racional.

En este modelo se presupone que el individual solo se movilizará si deduce un efecto positivo de su actividad. Por tanto, el actor sería catalogado como “egoísta ilustrado”, según esta corriente de interpretación. Egoísta en el sentido de que busca el rendimiento directo de su acción y en sentido individual. E ilustrado porque cuenta con la información para valorar su acción o inhibición.

Estamos ante la teoría de la elección raciona, que dice que el comportamiento político individual se basa en la racionalización, voto por lo que deduzco, racionalmente lo que pienso que es más beneficioso para mí. Es una teoría bastante neoliberal y bastante individualista, metodológicamente, piensa que los individuos que forman parte de una colectividad, de manera individual, han tomado su decisión, en función de su interés y a través de su racionalización. Es una corriente norteamericana.

1. Modelo sociocultural: Norma, prejuicio.

El actor político ha incorporado previamente pautas de conducta mediante un proceso de socialización.  

Aquí el individuo se identifica con un grupo de referencia.

La acción política va a adquirir un carácter ritual, identitario y simbólico de una adhesión a una identidad colectiva que, a veces, incluso contradice el interés personal del sujeto. Te mueve la identidad colectiva, aunque eso contradiga los intereses individuales.

Entre el cálculo y la norma

Las dos interpretaciones de la conducta política contraponen entre:

1. El homo economicus. Movido por la perspectiva de compensaciones futuras.
2. El homo sociologicus. Movido por fuerzas preexistentes.

Vallés nos dice que si hay gente que diferencia entre A y B, hay otros que dicen que este contraste no tiene mucho sentid porque por un lado a la forma social no es más que una forma de cálculo, la norma sería utilizada para enmascarar el propio interés.

Por otro lado, hay quienes ven en la misma racionalidad una norma social, propia de las sociedades occidentales: quiénes se guían por el cálculo utilitario y en realidad, lo que están convirtiendo esa racionalidad en la norma dominante de nuestro entorno social.

Verdaderamente, los dos modelos resaltan cada una de las dos caras que toda acción política suele presentar, por un lado, es un instrumento para obtener determinados objetivos que el actor considera beneficiosos. Y por otro, puede ser un gesto simbólico que el actor hace en relación a un grupo de pertenencia, cuyas normas respeta de antemano.

Según los momentos y los individuos, prepondera una u otra de las dos caras de la acción política. La cara instrumental en unos momentos y la cara simbólica en otras, pero sí que sea siempre factible separarlas de modo tajante.

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