El análisis de la fábula Fish

Fish! es una excelente fábula que mediante la narración de la historia de Mary Jane y su encuentro con la pescadería Pike Place nos demuestra que la mejor forma de obtener resultados favorables es disfrutando el trabajo que se realiza.

Una gran parte de la población dedica aproximadamente el 75% su vida adulta a realizar actividades laborales. Todo este tiempo invertido puede potencializarse aún más si el trabajo que realizamos es algo que disfrutamos y nos satisface no sólo a nivel profesional sino también a nivel personal produciéndonos felicidad.

En Fish! se nos comparte la idea de que cuando eres capaz de hacer que tus empleados estén dispuestos a todo (o sean empleados Gung Ho! como los llaman los autores) estarás facilitando la satisfacción personal y laboral al mismo tiempo que potencializas tu fuerza de trabajo. Con ello generas no sólo empleados sino “Raving Fans” que se convierten en trabajadores leales y entusiastas que brindarán todo su esfuerzo por obtener los mejores resultados posibles.

Todas las empresas buscan ser más productivas, entonces ¿por qué no se motiva a los empleados para convertirlos en admiradores entusiastas?. En Fish! se nos presentan algunos de los posibles orígenes de este problema entre los que se encuentran la falta de interés de las personas en continuar creciendo y aprendiendo, el miedo a arriesgarse y la falta de motivación. Los líderes sienten que no es su trabajo motivar a los empleados pero como se menciona en el libro: el riesgo de no hacer nada, seguramente es mayor que el riesgo de actuar.

Los autores nos brindan 4 herramientas básicas para que los empleados se sientan entusiasmados de realizar sus actividades laborales y por lo tanto brinden resultados sobresalientes que impulsen las ventas de la empresa. Las 4 herramientas o ingredientes que se proponen en Fish! son:

• Elegir tu actitud: es cierto que en ocasiones no tenemos control sobre las situaciones pero siempre tendremos control sobre nuestra forma de reaccionar a ellas. La actitud es completamente responsabilidad de cada uno y si deseamos disfrutar de nuestro trabajo entonces debemos presentar una actitud positiva que refleje este disfrute. Las actitudes pueden contagiarse por lo que mostrarnos comprensivos, solidarios y positivos generará que nuestros compañeros se comporten de la misma forma con nosotros.

• Jugar: el trabajo puede ser divertido sin dejar de ser eficiente. La gente que se divierte en su trabajo y que tiene la posibilidad de salir de la rutina es gente feliz que trabajará mejor en equipo y que obtendrá mejores resultados. La creatividad se potencializa en un ambiente divertido además de que el tiempo se pasa mucho más rápido generando una percepción de que el esfuerzo invertido es menor y convirtiendo al trabajo en una recompensa en sí mismo.

• Alegrarles el día: sacar una sonrisa a otro definitivamente tiene un impacto en nuestro estado de ánimo. Motivar a la gente con comentarios alentadores es una forma de alegrarles el día e impulsar su desarrollo profesional al mismo tiempo. Este ingrediente se enfoca también a la atención al cliente; una atención de calidad genera orgullo en quienes la brindan además de que fomenta un interés genuino en buscar distintas maneras de crear nuevas soluciones. Hacer que los clientes se

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