El fracaso de un docente

                                                           El fracaso de un docente

Los problemas de lectura, escritura, o la falta de aprendizaje de los estudiantes, no es un motivo de renuncia para un buen docente que tiene en cuenta  los principios fundamentales de su vocación, considerando que su fin es enseñar e impartir  conocimientos, así mismo  asegurarse  de un correcto aprendizaje. Dicho lo anterior se redacta la carta dirigida al señor camilo Jiménez en respuesta a su carta de renuncia donde se evidencian declaraciones poco comprensibles para su renuncia, y tras este acto su poco compromiso para la vocación.

Un saludo señor Camilo Jiménez, mi  nombre es Daniel Mejía Ríos, y he  leído su emotiva carta de renuncia. Encontré en su declaración una serie de inconsistencias en los motivos que sustentan su renuncia y quiero contarle que es la primera vez que leo tan grande barbaridad, hice un recorrido similar al suyo y he pasado por una cantidad de  profesores, pocos profesores  me han enseñado algo, otros han perdido su tiempo y otros me han acompañado en mi proceso profesión y me han alentado en mi superación personal.

También recuerdo que en el trascurso de mi vida he tenido momentos de color rosa, pero también he tenido momentos que opacan con sus colores grises como a usted le pasó con los párrafos de sus alumnos, pareciera que estos momentos grises los tuve en mi vida personal, y sí. Pero en esta carta me refiero a los profesores que han pasado por mi vida y perdieron su tiempo, ellos parecían zombis, unos no  preparaban clase, otros regalaban su tiempo como hora libre y otros confundían su clase de ética con la de español.

En mi recorrido como alumno he contado con profesores que consideran su profesión emocionalmente apasionante, que han llevado al alumno a un crecimiento  de conocimientos notorios y cuyo crecimiento solo lo logra aquel que pone el cuerpo y el alma en el aula de clase, que  sus preocupaciones no son los avances o la cantidad de trabajos que recopilan sino la satisfacción de saber hacer su trabajo y de dejar un aprendizaje plasmado. Tanto así que la docencia es la única profesión que crea todas las otras profesiones.

Me queda en duda en realidad el motivo de sus declaraciones y esperaba que en su carta  hablara de una misión realizada, unos actos de satisfacción plena u otras cosas positivas con las que finaliza un héroe, como haber realizado una hazaña extraordinaria, o triunfar a pesar del miedo. Dicho lo anterior se puede mencionar que el principal objetivo del docente es ser guía y orientador del proceso de enseñanza y como profesional saber cuáles son las herramientas y habilidades para llevar al alumno a un nivel superior

Las despedidas suelen ser tristes cuando las personas son importantes o marcan la diferencia pero en este caso le agradezco señor camilo  por su renuncia, espero que pueda encontrar su verdadera vocación y  agradezco por haber considerado sus debilidades  con los nativos digitales. Espero que algún día se  pude comunicar con ellos, también espero que  pueda comprender cuál es el principal objetivo de la docencia y que algún día los pueda poner en práctica, con mucho respeto agradezco su renuncia y deseo que goce de salud

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