Ensayo DIE WELLE

“DIE WELLE”
Dennis Gansel (2008)
ENSAYO CINEMATOGRÁFICO

Esta película, sin duda, despierta esa curiosidad en el espectador para pertenecer a un grupo. Comenzamos a pensar en los casos que marcan la historia, movimientos socialistas que buscan hacernos a todos iguales, y que terminan siendo no sólo un fracaso, sino un embrollo de proporciones impresionantes, como el nazismo, que hasta nuestros días sigue teniendo sus fieles seguidores.  En este caso un grupo de jóvenes estudiantes de preparatoria, gracias a un experimento académico y educativo, terminan comprometidos con una causa mayor, en la que no miden su participación ni las consecuencias de la misma.

Traduzcamos este embrollo a la participación que tenemos como ciudadanos y como partícipes de la política pública de nuestro país. Desde que nos plantean un caso como el de la película, pensamos ¿Cómo alguien podría ser tan tonto? Pues es más fácil de lo que creímos, con fenómenos como la globalización, que nos afecta directa y cotidianamente, no estamos tan lejos de que ese control se vuelva una realidad. Desde políticos tiranos, dictadores, populistas, que llaman a la población con mentiras, con recompensas que jamás serán entregadas, y sólo utilizan para subir al poder para enriquecerse ellos. Se aprovechan de la ingenuidad de las personas en necesidad, y sin más ni más, los abandonan a su suerte, dejando de lado todo aquello que prometieron para llegar ahí, y aún así sigue habiendo gente que los apoya fervientemente, a pesar de observar un deterioro en la sociedad y en sus vidas.

Todo esto me llevó a pensar en lo delicada que es la capacidad humana, tanto que terminamos haciendo cosas fuera de nuestros originales principios, llevando no sólo a nosotros mismos, sino a otros, a un destino que no conocemos ni prevemos explorar. “La Ola” resulta un proyecto muy interesante en un principio, me parece un ejercicio bueno para demostrar cómo podemos ser manipulados y llevados a una “igualdad”. Desde luego que a mí no me gustaría utilizar un solo color de ropa, ni tener una rutina, ni tener lo mismo que todos los demás, esto retira la identidad que tenemos como individuos, y pasamos a ser simples números o miembros genéricos de la sociedad. Debemos ser conscientes de que podemos romper con ese control y mantener esta individualidad que nos identifica como miembros de la sociedad a la que pertenecemos.

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