Estancamiento Cronico

ESTANCAMIENTO CRONICO

El capitalismo monopolista es un sistema contradictorio en si mismo. Tiende a crear aun más excedentes, y sin embargo es incapaz de proporcionar al consumo y a la inversión las salidas necesarias para la absorción de los crecientes excedentes y por lo tanto para el funcionamiento uniforme del sistema. Como el excedente que no se puede absorber no será producido, la consecuencia es que el estado normal de la economía capitalista monopolista es el estancamiento. Con una existencia dada de capital y una estructura de costos y precios determinada, la tasa de operación del sistema no puede ascender por encima del punto en el cual la cantidad del excedente producido puede encontrar las salidas necesarias. Es decir, el sistema debe operar hasta un punto suficientemente bajo en su escala de rentabilidad para que no genere más excedentes de los que puedan ser absorbidos.

Solo bajo el capitalismo monopolista “producir demasiado” aparece como un problema que afecta a todos en todo momento. De aquí se origina toda una serie de actitudes e intereses de importancia decisiva para el carácter y funcionamiento de la sociedad capitalista monopolista.

La reacción mas primitiva frente a un exceso de oferta es simplemente la de reducirla. Durante los treinta, cuando la producción “excesiva” alcanzo dimensiones de desastre universal, el restriccionismo primitivo alcanzo, gracias a la National Industrial Recovery Act y a la Natinal Recovery Administration, el rango y la ratificación de la política nacional oficial.

Pero la reducción como un remedio para la “producción excesiva”, aun cuando resulta provechosa para grupos o para individuos en particular, solamente agrava la situación general, después surge una serie de actitudes y políticas secundarias mas sofisticadas; tentativa y lentamente al principio, aumentan en determinación e impulso a medida que el capitalismo monopolista se desarrolla. Su hipótesis se deriva del simple hecho de que el anverso de “producir demasiado” del lado de la oferta es “producir muy poco” del lado de la demanda; en lugar de reducir la oferta se tiende a estimular la demanda.

Al igual que la reducción de precios y el arte de vender, otras formas de estimular la demanda son o no compatibles con el patrón de intereses, la estructura del poder, la trama ideológica que constituyen la esencia de la sociedad capitalista monopolista. Las que sean compatibles serán alentadas y fomentadas; las que sean incompatibles serán ignoradas o prohibidas.

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