Feminicidio Diana Russell

      UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE

MÉXICO.

Facultad de Derecho

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Alumna: Segovia García Claudia Lisset.

Grupo: 0014.

Materia: Teoría General del Estado.

Profesor: José Dávalos Torres.

Fecha de Entrega: 25/11/15.

Feminicidio

En los últimos años, los asesinatos en contra mujeres en México han sido una alerta para todo el país y a nivel internacional. La  idea de que las mujeres jóvenes por su condición de género, clase social, edad, raza y otras características, están siendo exterminadas violenta y sistemáticamente por violadores de género. Este fenómeno es objeto de estudio de muchos organismos y personas comprometidas con la causa de la mujer y los derechos humanos.

La violencia contra las mujeres  representa una violación a los derechos humanos y constituye uno de los principales obstáculos para lograr una sociedad igualitaria y plenamente democrática. El concepto y el potencial alcance de la figura de feminicidio es complejo, ya que engloba una serie de fenómenos que van desde la violencia sistémica y la impunidad, hasta el “homicidio de mujeres por el simple hecho de ser mujeres” 1.

Analizar los crímenes en contra de mujeres, desde una perspectiva de género, necesariamente remite al constructo teórico del feminicidio. La práctica femicida, producto del sistema patriarcal, comprende toda una serie de acciones y procesos de violencia sexual, que van desde el maltrato emocional, psicológico, golpes, insultos, tortura, violación, la prostitución, acoso sexual, abuso infantil, el infanticidio de niñas, mutilaciones genitales, violencia doméstica, privación de alimentos, pornografía y toda política tanto personal como institucional, que derive en la muerte de las mujeres. Todo esto tolerado y minimizado por el Estado y las instituciones religiosas.

Para poder entender cómo surge el feminicidio es necesario que entendamos la política de la sexualidad en el sistema patriarcal. La política de la sexualidad se localiza, notablemente en la división sexual del trabajo y en las concepciones prevalecientes de masculinidad y feminidad. La sexualidad como modelo nuclear de todas las construcciones sociales que surgen de ella es en sí misma el prototipo de la inequidad institucionalizada en nuestra sociedad por la división que se hace de dos grupos, en el cual uno de ellos -los hombres- está considerado que debe mandar sobre el otro - las mujeres - por derecho de nacimiento y ratificación de la sociedad. La propiedad de género es exclusiva de los hombres y las mujeres son dependientes desiguales y asimétricas de tal dominio injusto.

Las instituciones sociales y políticas están en manos de los poderes patriarcales. El gobierno, las instituciones religiosas, el ejército, los clubes, las mafias, etc. todo es masculino y al evaluar las actividades que el sistema patriarcal considera propio de ellas "se jerarquiza a las mujeres entre sí ?unas son más inferiores que otras- " y se ejerce violencia contra ellas precisamente por ser mujeres y por no serlo de la manera adecuada. Esta dominación de género se interrelaciona y converge también con las formas de dominio nacional, clasista, étnico y racista que se dan en períodos históricos específicos.

Por eso, no se puede comprender el quehacer cotidiano, ni la violencia en contra de las mujeres si no se analiza la construcción social del mundo en el cual se encuentran inmersos/as. Ya que las manifestaciones sexuales no se realizan en el vacío, dentro del contexto de actividades y valores de nuestra sociedad pareciera que éste es un acto íntimamente privado.

Diana Russell

Escogí a Diana Russel como teórica principal sobre este tema porque considero que es de suma importancia su opinión ya que es ella la autora del término “feminicidio”. Diana Russell nació en Sudáfrica en 1938 en una familia blanca angloparlante, participó junto con su hermano en la Resistencia Africana. Se gradúa en 1956 en la universidad Cape Town y un posgrado en Ciencias Sociales y Administración en London School of Economics, la autora a lo largo de su vida juega un papel fundamental en la introducción de la perspectiva feminista. Su libro “The Politics of Rape” (1975) es una de las primeras obras feministas en apuntar la relación entre las nociones aceptadas de masculinidad y la perpetración de las violaciones. Su negativa a aceptar la concepción patriarcal de que el acto de la violación es un acto desviado, más que un acto conforme con los ideales de masculinidad, ayuda a revolucionar la comprensión social de este tipo traumático y misógino de crimen.

Su trabajo se basó en materia de violación y abusos en contra de mujeres y niñas por lo que publicó una serie de libros de gran impacto respecto al tema. Tiene una amplia historia de activismo en los EEUU, Sudáfrica y muchos otros países. En 1974 logra movilizar a otras feministas para la organización del Tribunal Internacional sobre Crímenes contra Mujeres. Su obra sigue siendo motor de fuerza para la lucha de otras mujeres a lo largo y ancho del mundo que abogan por la erradicación de la violencia contra las mujeres. En este sentido, renombradas teóricas y activistas en materia de feminicidio como las mexicanas Marcela Lagarde o Julia Monárrez o las costarricenses Ana Carcedo y Montserrat Sagot, han basado su trabajo en la línea creada por Russell. Si bien el término ha sido adoptado por movimientos de otros países donde el clima de violencia es también extremo como Guatemala, Costa Rica, Chile, El Salvador y otros muchos países latinoamericanos. Algunos de los cuales recoge la autora en su obra Femicide in a Global Perspective (2001).

Me parece que como feminista, autora y activista desarrolló un muy buen trabajo en alzar la voz por todas aquellas mujeres que no lo hacen, su trabajo es de suma importancia ya que repercute en la ideología de una sociedad, en como percibimos los derechos humanos y el concepto que la misma tiene de las mujeres. La considero la principal precursora de la no violencia hacia la mujer, ya que bajo sus argumentos se puede hacer una crítica hacia la sociedad y fomentar los derechos de la mujer y defenderlos a toda costa.

Estadísticas

Según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Historia (INEGI), entre los años 2000 y 2009 fueron asesinadas 12.636 mujeres. La organización de la sociedad civil Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), que ha documentado estos asesinatos en 17 de las 32 entidades federativas, señala también la alarmante tendencia a la alza de este delito. Así, según datos de la organización, entre enero de 2007 y diciembre de 2008 fueron asesinadas violentamente 1.221 mujeres; en el período comparativo más breve de enero de 2009 a junio de 2010 eran ya 1.728. En Ciudad Juárez, al norte del país, ya en 1993 una mujer era asesinada cada 12 días. En la actualidad, en ese lugar se asesina a una mujer cada 20 horas.

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