Hablamos de “opinión pública”, refiriéndonos a un concepto multidisciplinar

Hablamos de “opinión pública”, refiriéndonos a un concepto multidisciplinar en cuya formación participan multitud de condicionantes. Las dificultades para establecer una definición plausible del término son notorias. Hasta el momento la investigación no ha podido presentar una conceptualización que abarque todas las perspectivas desde las que se puede estudiar el fenómeno.

El estudio de la opinión pública puede dedicarse a muchos fenómenos relacionados con ella. Las perspectivas de estudio de la opinión pública son:

⁃ Psicológica: Esta perspectiva adopta una visión de la OP observada como la suma de la opiniones y actitudes individuales. Las opiniones expresadas en público no serían sino el reflejo del pensamiento de los individuos que la sostienen.

⁃ Cultural: Opinión pública se estudia como reflejo de una serie de pensamientos, comportamientos y costumbres colectivas que juegan el papel de referente de las opiniones sostenidas por los individuos.

⁃ Racional: Este concepto de OP enlaza con la tradición liberal, según la cual la OP es el fenómeno por el cual el público (ilustrado y racional) debate los asuntos propios de la esfera pública hasta llegar a algún tipo de consenso

⁃ Publicística: Aqui se destaca la relación del concepto “ opinión pública” con la acción de dar publicidad, “publicar”, los asuntos públicos en algún soporte que permita mediar entre las élites y los ciudadanos. La función de la prensa y otros medios de comunicación está en el centro del interés de este acercamiento a la opinón pública.

⁃ Elitista: Esta perspectiva destaca el hecho objetivo de que no todas las opiniones tienen el mismo peso e indaga en la relaciones entre el público – masa y las élites. Discrimina entre una opinión racional y iluestrada de las minorías y una pseudo.

⁃ Institucional: Pone en relación la OP con el funcionamiento del sistema democrático. La OP es vista como un elemento fundamental de la estructura de las instituciones políticas.

⁃ Cándido Monzón destaca el acercamiento de la teoría de la tematización de Niklas Luhann, que desarolla un concepto de la OP en el que son los medios que se encargan de fijar los temas de debate de los ciudadanos; pero estos temas están ya predeterminandos y su solución sugerida e incluso impuesta por los medios, de forma que se reduce el debate a su mínima expresión.

Con unas visiones tan variadas de la OP no resulta extraño que el concepto se estudie en relación con multitud de condicionantes. Se puede comentar lo siguiente: 
 
a) La sociología de la comunicación de masas estudia las caracteríticas particulares del nuevo sistema comunicativo de la sociedad industrializada. Se centra en los usos y efectos de los medios de comunicación.

b) La comunicación política pone en relación el proceso de formación de la OP con cuestiones propias del mundo de la política. OP estudiada en el debate político es donde tiene mayor relevancia.

c) La idea de espacio público opuesto a la privacidad. En la sociedad de masas, son los medios de comunicación los principales encargados de definir el espacio público.

d) El estudio de corrientes de opinión, fundamentados en la investigación empírica a partir de las encuestas.

e) El estudio de las instituciones, los grupos, los líderes de opinión y las élites como poderosos condicionantes de la OP. 
f) La opinión pública internacional o existencia de un proceso de formación de opiniones que trasciende las fronteras y afecta a un nuevo concepto de ciudadano.

Aunque la idea de “opinión del público” aparece ya en los textos de los filósofos griegos, la opinión pública es un concepto emanado de la Ilustración del siglo XVIII, donde se configuran dos definiciones posibles, en primer lugar, de lo que significa “opinión”:

a) Se usa para distinguirla del concepto de “hecho”

b) Se refiere al concepto del público sobre los demás, la moral pública y las costumbres que se consideran adecuadas.

Con la difusión de la imprenta, la llegada de una alfabetización más amplia y el desarrollo de una filosofía liberal que afirma las libertades del individuo; la opinión divina del rey absoluto es sustituida por la opinión de la masa como instrumento de presión.Tenemos que tener presente que el concepto de “opinión pública” había de aplicarse más bien a la burguesía ilustrada que triunfaría sobre el Antiguo Régimen. Esta opinión pública, sin embargo, se apoya desde el principio en la prensa como “voz” de la opinión frente al poder, por un lado, y en la idea de democracia como expresión clara de la opinión.

Kimball Young : Importante tesis sobre la opinión pública deriva de la creencia en que el hombre es racional y objetivo. Esta escuela dice que la opinión pública es un juicio de grupo más o menos racional, cuidadosamente distinguida de las emociones y sentimientos públicos. Supone además que tal juicio racional surge de una consideración fría y desinteresada del asunto. Un punto de vista opuesto sostiene que el hombre es sobre todo irracional y emotivo, y que la opinión pública se forma principalmente en el proceso por el cual los políticos astutos y maquiavélicos engañan a las masas. Esta interpretación descansa sobre la tesis de que la racionalidad está limitada a unos pocos selectos, y lo que en las masas parece pensamiento inteligente es el resultado de la obediencia que prestan al líder, o bien una hábil racionalización que las masas elaboran para engañarse a sí mismas.

Elisabeth Noelle – Neumann indica que la práctica totalidad de definiciones de la opinión pública puede articularse en torno al eje racional /irracional:

1) La opinión pública como racionalidad que contribuye al proceso de formación de la

opinión y de toma de decisiones en una democracia.

2) La opinión pública como control social. Su papel consiste en promover la integración

social y garantizar que haya un nivel suficiente de consenso en el que puedan basarse las

acciones y las decisiones.

En el lado opuesto, Jürgen Habermas considera el estudio de la opinión pública desde la base de que esta adopta una actitud crítica frente al poder político, en cuanto está compuesta por individuos racionales. La opinión pública surge en el ámbito de la publicidad burguesa.

En cuanto a la relación entre opiniones individuales y colectivas en el proceso de formación de la opinión pública, indica Irving Crespi:

Un problema relacionado al término opinión pública es la forma de diferenciar entre sus aspectos individuales y colectivos, para reconciliarlos posteriormente. Un impedimento para la resolución satisfactoria de este problema ha sido la tendencia a cosificar el concepto de opinión pública. Siempre existe una sensación de que el proceso tiene que ver con algo más que el pensamiento y la conducta de los individuos.

Se asume que si bien la opinión pública se forma a partir de opiniones individuales, éstas son mediadas por una serie de factores de índole social de tal forma que la opinión pública acaba siendo un proceso colectivo con entidad propia, creado a partir de la interactuación de una serie de actores individuales que se influyen mutuamente a lo largo de un proceso determinado.

La afinidad entre opinión pública y democracia es destacada por Vincent Price en su definición de la opinión pública: Existe una íntima conexión de la opinión pública con los procesos de discusión, debate y toma de decisiones colectiva. Las decisiones que se apoyan en la OP se hacen por medio de publicidad y comunicación, pero la comunicación es una herramienta tanto para la persuasión como para la recogida de información, potencialmente útil tanto para controlar las opiniones como para solicitarlas.

Lo que define a la opinión pública en las sociedades desarrolladas es la influencia que tienen los medios de comunicación de masas en su formación. Los medios se constituyen en auténticos mediadores entre los líderes y el público.

Los medios los que se encargan de transmitir las opiniones de las élites al público; son los medios los que interactúan entre los miembros del público y marcan las opiniones socialmente relevantes y las opiniones socialmente provistas de una carga positiva. El estudio de la OP no puede disociarse del estudio de los medios de comunicación y sus relaciones con el público. Según el acercamiento que hagamos al estudio de los medios se dice que estos crean una pseudorrealidad que aleja al público del auténtico debate, incidiremos en el papel central de los medios de comunicación en cuanto prolongación y representante efectivo de los intereses del público.

La aparición de la sociedad de masas comporta un cambio en el funcionamiento de la opinión pública: El público racional es sustituido por la masa, compuesta por individuos aislados y sin la suficiente capacidad crítica para responder de otra forma que con la mera aceptación a los mensajes de los medios; el debate público en las condiciones que exigía el modelo clásico se antoja poco menos que imposible. 


Entre los principales problemas de la opinión pública, destacaríamos, siguiendo a Vincent Price, los siguientes:

- Falta de competencia: se exige demasiada responsabilidad y conocimiento a los ciudadanos en comparación con sus capacidades reales.

- Falta de recursos: Los sistemas democráticos no disponen de métodos suficientes para ofrecer una comunicación eficaz al público, que, por otra parte,

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