LA ESCOLARIZACIÓN Y DESIGUALDAD EN EL PERÚ

LA ESCOLARIZACIÓN Y DESIGUALDAD EN EL PERÚ

En la prueba Pisa 2018 el Perú ocupó en puesto 64 de 77 países, si bien logramos avanzar algunos puestos, esto pone en evidencia una serie de falencias que tiene el sistema educativo del Perú y la falta de iniciativa  de nuestros gobernantes  por iniciar reformas urgentes para cambiar nuestro modelo educativo, entonces ¿por qué no se implementan los cambios necesarios para avanzar hacia la mejora?

La educación peruana tiene muchas desigualdades que son del tipo económico, sociológicos, administrativo y pedagógico, esto pasa por no comprender que la educación es una inversión en el capital humano, tanto es así que Perú solo destina el 4.1 % del PIB  en educación de los cuales el 80% se gasta en personal.

A lo anterior  se   suman   la   escasez   y   el   manejo ineficiente de recursos, la notoria ausencia de políticas educativas de largo plazo, una gran mayoría de ellos insuficientemente formados, y ganados muchas veces por el tedio, los cuales eligen educación  generalmente no solo lo hacen por vocación ya que la docencia es una carrera considerada de bajo nivel,  eligen educación  generalmente no solo lo hacen por vocación; sino van por el codiciado nombramiento perpetuo.

Debemos tener claro que la educación presenta beneficios para toda la sociedad pues brinda mejores oportunidades de empleo a las personas y la posibilidad de afrontar las circunstancias adversas de manera acertada. Actualmente en el Perú la educación es ineficaz para constituir una generación de “sociedad de ciudadanos” y en donde solo se brindan materias o cursos acordes con una currícula educativa cuyo objetivo principal es preparar a los jóvenes de hoy para un posible examen de admisión a una universidad. Los jóvenes que logran terminar la secundaria a pesar de las dificultades económicas y deciden postular ya sea a una universidad estatal o una universidad privada, chocan contra una cruda realidad: la educación que recibieron en sus colegios no les sirve de mucho, por no decir nada, para lograr una admisión directa a un centro de educación superior.

Asimismo, según Minedu, se estima una tendencia a la deserción escolar del 1.3% a 3.5% en inicial y primaria. La tasa se mantiene en alza debido a factores como la discriminación de género, motivos familiares, motivos económicos, bajo nivel educativo, colegios no activos o una incorrecta implementación de servicios; prevaleciendo como una constante las zonas críticas de frontera y zonas rurales.

La tasa de deserción acumulada en los ámbitos rurales de la población entre 13 y 19 años de edad con educación básica incompleta alcanza el 13%, 4 puntos por encima del 9.2% en el ámbito urbano.

Además, bajo el contexto de pandemia, la brecha educativa se ha acrecentado por la implementación de las clases virtuales, debido a que en el país cuenta solo el 42.9% de peruanos tiene de acceso al internet.

Actualmente, el promedio de edad del magisterio peruano es de 51 años. Esto significa que, paulatinamente, en los próximos 15 años se jubilará el 50% de los docentes. Esta situación es una amenaza que podría convertirse en una oportunidad para transformar la educación del país si actuamos ¡ya!

...