LA PRINCESA MARTINA Y LA GUERRA ENTRE DOS REINOS

LA PRINCESA MARTINA

Y LA GUERRA ENTRE DOS REINOS

Había una mujer muy hermosa, hija de los reyes del reino de Viena, ella llevaba por nombre Martina y le gustaba mucho las aventuras, sus padres la protegían demasiado porque en los pueblos cercanos ya se había corrido el rumor de una guerra y que el reino de Montecristo  la quería raptar, así que los reyes de Viena por temor decidieron que la princesa Martina se casaría con el príncipe Enrique del reino de Britania (aliado) cuando cumpliera los 18 años y ese rumor llego a oídos de la princesa quien sintió una sensación de sentimientos mezclados entre enojo, tristeza y decepción, así que decidió fugar al pueblo de Santa Catalina y ahí encontrar su propio destino pero no sabía que tenía que pasar por el bosque  Villa Barbosa, la cual estaba siendo vigilada por un orate. Ya estaba anocheciendo y la princesa no llegaba a su destino, mientras tanto los reyes de Viena estaban llamando a todos los guardias para que partieran a su búsqueda, ella al escuchar el paso de los caballos se escondió entre los arboles hasta que ellos se fueran, después  siguió caminando y se encontró con el orate y ella corrió asustada pero despertó en una pequeña casa con muchos animales, ella no sabía dónde estaba y pensó que el orate la había atrapado pero observo a una hermosa mujer alta de ojos claros y de cabello castaño que se llamaba Ninfa, quien se hizo su amiga y se quedó unos días con ella. Posteriormente la princesa  construyo una pequeña cabaña entre los árboles y arbustos y el orate siempre la merodeaba. Martina desempacando encontró una nota en su mochila que decía “Te espero a las 11 en la entrada del parque” y ella pensó que Ninfa le había escrito así que se alisto pero al llegar al lugar se dio con la sorpresa que no era Ninfa sino el orate e intento correr pero el orate la agarro y la llevo a su cueva y le conto que él era el príncipe Santiago del reino de Montecristo, que se refugiaba en el bosque para que no lo reconozcan ni lo intenten matar por culpa de la codicia de su padre por querer invadir Viena.

La princesa Martina y Santiago conforme pasaban los días se enamoraron perdidamente pero su padre el rey de Montecristo al enterarse que su hijo tenía a Martina dio la orden para que vayan en su búsqueda y que incendien el bosque pero después se enteró muy tarde que su hijo amaba a Martina e intento cancelar la orden, pero era demasiado tarde, los guardias ya habían salido en busca de Martina, pero no la encontraron por ningún lado ya que el príncipe Santiago se había enterado de las pretensiones de su padre y la tenía a salvo pero no sabía de  la orden de incendiar el bosque y cuando el príncipe se dio cuenta ya era tarde, una parte del bosque Villa Barbosa estaba ardiendo en llamas, ellos corrieron lo más rápido posible pero  se escuchó un disparo Martina miro al príncipe y él tenía un disparo en el corazón, quiso agacharse y cargarlo para llevarlo a un lugar seguro  pero un disparo en la cabeza la sorprendió muriendo los dos al instante.

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