LA TOMA DEL PALACIO DE JUSTICIA ES EL RESULTADO DE LA INEFECTIVIDAD DEL CONSEJO NACIONAL DE SEGURIDAD

LA TOMA DEL PALACIO DE JUSTICIA ES EL RESULTADO DE LA INEFECTIVIDAD DEL CONSEJO NACIONAL DE SEGURIDAD[pic 1][pic 2]

Tenemos un Consejo Nacional de Seguridad cuya única utilidad es decorar la plenaria en la que se suele debatir temas de seguridad inconcluyentes, que no solo entorpecieron las acciones a realizar si se hubiera querido detener los hechos ocurridos en estos días, sino que también se realizaron los procesos con tanta lentitud que para el momento en el que se podría efectuar las decisiones tomadas en esta asamblea ya habían ocurrido los hechos.

En gran parte del Consejo Nacional de Seguridad se usó como bandera la Negociación en una alternativa pacífica, pero lamentablemente estas ideas quedaron en el papel; después de la primera advertencia que fue enviada mediante nuestro corresponsal secuestrado y la toma de una estación de radio se esperaría que el consejo de seguridad aumentaría la seguridad en la ciudad, en cambio la asamblea solo tuvo en consideración la idea de aumentar la seguridad sobre los ministros y sus familias.

Al tiempo que se discutía sobre este tema y se comentaba la importancia que podía llegar a tener realizar estas acciones, fueron secuestrados tres hijos de diferentes ministros, entre los cuales destacó el ministro de defensa, miembro del consejo de seguridad y promotor de las negociaciones con el movimiento armado. Una vez ocurridos estos hechos, el Consejo Nacional optó por generar  franjas de seguridad en el palacio de Nariño, dando a entender que la prioridad del consejo Nacional no son los ciudadanos, sino los miembros del gobierno. Lo cual fue confirmado cuándo en el atentado al ministerio de justicia las bajas estaban compuestas exclusivamente por civiles.

La lentitud en la toma de decisiones, la prolongación de los debates y la priorización de los políticos por encima de la sociedad civil en general dieron a un último suceso: el asesinato de los hijos de los ministros que habían sido secuestrados. Ante este suceso nuestros corresponsales entrevistaron a el ministro de defensa, quién describió el suceso de la muerte de su hija como un hecho triste que se debía considerar como el reflejo de la necesidad de unirse en un acuerdo nacional, dejando entrever que probablemente la lentitud en la toma de decisiones se debía a temas netamente políticos y de ideología ocasionando a su vez que la sociedad se cuestione acerca de las prioridades de sus dirigentes.

Una vez ocurrido este hecho, la opinión pública estaba expectante a sobre si esto sería el “gran suceso” que estaban esperando o si este sería solo el preámbulo, pregunta que fue respondida en las últimas horas con la toma del palacio de justicia por parte del M19, una vez ocurridos estos sucesos esperamos que en esta ocasión se resuelva el hecho en si, con la protección a la libertad y los derechos humanos.

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