La crisis de los misiles de Cuba: La vista Soviética

La crisis de los misiles de Cuba: La vista Soviética

Revista de la antorcha • Otoño 2015

Sherry Nay

Sherry Nay creció en Powell, Wyoming, al este del parque de Yellowstone y cerca de la frontera de Montana.

Después de obtener una licenciatura en lo que hoy es la Universidad de Colorado del Norte, enseñó en la Escuela Secundaria Wasson en Colorado Springs. Después de obtener una maestría de la Universidad de Colorado, pasó dos años en Colorado Springs que trabaja para el departamento de Servicios Sociales antes de pasar a Nyack, Nueva York. Ella obtuvo su Ph.D. de la Universidad de Rutgers en la historia rusa.

Ella era profesor adjunto en varias universidades en el área de Nueva York, incluyendo la Universidad Estatal de Montclair y Rutgers, la enseñanza de la civilización occidental, así como la historia de Rusia.

Ella y su familia se trasladó a Fairfax en

2004. Si bien no se enseña en la Universidad George Mason. Su marido, Ed Acker, y se trasladó a Winchester en 2011. En su retiro, ella todavía disfruta de la historia, incluyendo la historia familiar y la genealogía. Ed y Sherry tienen dos hijas.

Por Sherry Nay

27 de octubre de 1962. Este fue el día en la historia en que los pedidos poco claras, mal entendido intenciones, y política suicida podría haber causado el fin de la civilización tal como la conocemos. Esto no es una exageración. misiles estadounidenses con bombas nucleares estaban listos. misiles soviéticos con bombas nucleares estaban listos. submarinos soviéticos armados con torpedos nucleares pensaron que estaban siendo atacados. no se habían recibido órdenes a sus comandantes. fuerzas del Pacto de Varsovia y la Unión Soviética estaban en alerta máxima. Las fuerzas armadas de Estados Unidos estaban en Defcon 2, el paso de la preparación próxima a la guerra nuclear.

devastadora invasión alemana de la Segunda Guerra Mundial.

Esta historia produce una continua búsqueda de la seguridad y el deseo de evitar la guerra. El primer ministro soviético Nikita Jruschov había experimentado la invasión de su pueblo por los austriacos en la Primera Guerra Mundial personalmente; durante la invasión alemana de la Segunda Guerra Mundial, él estaba en la decisiva batalla de Stalingrado y mortal. Curiosamente, tanto Jruschov y Kennedy que se presentan en el bando aliado durante la guerra. Ambos perdieron miembros cercanos de la familia Kennedy-un hermano y un hijo Jruschov.

Muchos ahora vivo recordar la Crisis de los

misiles en Cuba, posiblemente por distintos

momentos, como Adlai Stevenson de “hasta que

el infierno se congele sobre” discurso en la ONU,

o simplemente por la atmósfera de temor y el

miedo que todos estábamos. Para otros, las

imágenes más vívidas pueden ser de la película Treinptarobabilidad, las dos razones principales que

dias, protagonizada por Kevin Costner. Treinta dias casi no toca, sin embargo, en lo que estaba ocurriendo con los rusos, y la historiografía americana posterior no hace mucho mejor. El propósito de este trabajo es ampliar la comprensión de la Crisis de los misiles en Cuba analizando desde el punto de vista soviético.

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Los líderes soviéticos estaban viviendo en una sociedad cuya revolución había sido un reproche a su pasado. Sin embargo, todavía llevan su historia en sus almas, un fondo rusos historia de invasiones desde todos los lados, comenzando por los mongoles que colgaba alrededor de dos siglos y medio, y continuando con más adelante

invasiones de polacos, Lituanos, suecos y turcos. En la memoria más

reciente, se había producido Napoleón, la Primera Guerra Mundial y la

motivan Jruschov eran, en primer lugar, para salvar a Cuba y su gobierno revolucionario

a partir de una percepción próxima invasión de los EE.UU., y en segundo

lugar, a reparar un equilibrio nuclear desfavorable.

Tener Cuba como un aliado fue visto como ganancia política a los líderes soviéticos. Por otra parte, muchos soviéticos fuertemente relacionados con la revolución cubana. hijo-en-ley de Jruschov dijo que Jruschov vista Castro como un “día moderno Lenin” (khrushchev

406). Se había producido una gran cantidad de espíritu revolucionario romántico en Rusia en 1917, y Castro fue reavivar esto de una manera profunda. El compromiso con la supervivencia de la revolución cubana formó una parte importante de la conexión emocional con Cuba. Los primeros lazos fortalecidos, y los dos países quedaron obligados el uno al otro.

rivalidad de la Guerra Fría, con su historia de la competencia ideológica, política y militar, jugó mucho en la mente de los líderes soviéticos, Jruschov no menos que sus predecesores. Esta rivalidad creó el contexto de la decisión de Kruschev para colocar misiles en Cuba. Con toda

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Revista de la antorcha • Otoño 2015 Jruschov tenía ahora un aliado que no sólo

representaba la marcha del socialismo mundial, sino que también estaba en el patio trasero de los Estados Unidos.

Los EE.UU. vimos y entendimos lo vio a los soviéticos. En oposición diametral, que eran hostiles a todo lo que Castro representaba. Mientras que los soviéticos estaban abrazando Castro, los estadounidenses estaban contemplando cómo deshacerse de él. Un intento abierto se hizo en abril de 1961 con el éxito de la bahía de Cochinos, llevado a cabo por exiliados cubanos, pero con el apoyo de la

EE.UU. Después de este fracaso, la administración Kennedy continuó con actividades para desbancar a Castro a través del sabotaje, destruyendo la economía y fomentar la contrarrevolución. Jruschov estaba convencido de que no habría otra invasión, esta vez por las fuerzas armadas estadounidenses. A medida que pasaban los meses, había mucha evidencia de que esto podría ser verdad.

Así que ¿por qué enviar en algo tan provocador como misiles con cabezas nucleares? Antes de la decisión de misiles, Jruschov había hablado con sus asesores militares sobre la posibilidad de Cuba, con el apoyo soviético, frustrando con éxito un ataque convencional americano.

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